Redacción Farmacosalud.com
El estudio prospectivo PROMPT ha demostrado la eficacia de metirapona en la reducción del hipercortisolismo del síndrome de Cushing. Los resultados de este trabajo, presentados durante el pasado Congreso Portugués de Endocrinología 2021, también han confirmado el perfil de eficacia y seguridad de la metirapona que, hasta ahora, tan sólo se había observado en estudios retrospectivos. El síndrome de Cushing es una afección poco común en la que los pacientes tienen demasiado cortisol en la sangre. El síndrome de Cushing endógeno suele ser causado por tumores de las glándulas suprarrenales o pituitarias que liberan hormonas. Para controlar esta afección, es importante controlar los niveles altos de cortisol en los pacientes.
La metirapona es un inhibidor de la síntesis del cortisol en la corteza suprarrenal, bloqueando la enzima 11-beta-hidroxilasa, y está aprobada en 24 países europeos para el tratamiento del síndrome de Cushing endógeno. PROMPT es el primer estudio prospectivo realizado con metirapona con controles estandarizados y utilizando técnicas analíticas modernas para medir los niveles de cortisol y evitar la reactividad cruzada (cromatografía líquida acoplada a espectrometría de masas en tándem). “Los resultados sugieren un control del 80% de los pacientes con síndrome de Cushing endógeno tras el tratamiento con metirapona”, según afirma la Dra. Felicia Hanzu, endocrinóloga del Hospital Clinic de Barcelona/IDIBAPS y Profª. asociada de la Universidad de Barcelona. Estos resultados son muy importantes “porque confirman los beneficios de la metirapona en el tratamiento del síndrome de Cushing, que hasta ahora sólo se habían publicado de forma retrospectiva”, incide la Dra. Hanzu.
Mejora de las comorbilidades y la calidad de vida
El estudio PROMPT demuestra que metirapona mejora las comorbilidades de los pacientes con síndrome de Cushing endógeno. “De hecho, se observó una mejora clínica de las comorbilidades relacionadas con los parámetros cardiovasculares (presión arterial) y metabólicos (glucosa e insulina en ayunas, perfil lipídico) ya en la semana 12”, destaca la experta. Estos resultados son de gran relevancia para el abordaje clínico de esta enfermedad rara, porque “debido al hipercortisolismo, los pacientes con síndrome de Cushing presentan un riesgo cardiovascular y metabólico aumentado con hipertensión, tromboembolismo, alteraciones del metabolismo de la glucosa, resistencia a la insulina y dislipidemia, entre otros, y es muy importante disponer de tratamientos que ayuden a controlar estas comorbilidades”, añade la facultativa.
Durante las primeras 12 semanas del ensayo PROMPT, metirapona fue bien tolerada, con una mayoría de acontecimientos adversos de leves a moderados -principalmente gastrointestinales, que se resolvieron espontáneamente-, y sólo un 12% de insuficiencia suprarrenal. El estudio también observó, por primera vez, una mejora clínicamente significativa de la calidad de vida de los pacientes con síndrome de Cushing endógeno ya en la semana 12, con un aumento del 48% en la puntuación total de la calidad de vida con respecto al valor basal. La Dra. Hanzu reconoce que “la calidad de vida es un parámetro muy importante en el tratamiento de enfermedades crónicas como este síndrome”.
Los investigadores del estudio PROMPT esperan confirmar estos resultados durante el periodo de extensión de 6 meses de este trabajo, y publicar los resultados finales a finales de este año. “Estoy segura de que este estudio será ampliamente discutido dentro de la endocrinología", concluye la especialista.