Redacción Farmacosalud.com
El Hospital Universitari Dexeus (Barcelona) del Grupo Quirónsalud, de la mano de Bepers, empresa que gestiona el servicio de restauración del centro, ha puesto en marcha una línea de productos ecológicos -comida ecológica- y de proximidad, que se pueden encontrar en los ‘Espacios saludables’ que se han creado en las cafeterías del Hospital, tanto en las de público como en las de profesionales. Se trata de un compromiso de este centro con el cuidado de la salud, también desde el punto de vista de la alimentación. En este sentido, además de elaborar minuciosamente los menús pensando en las nuevas tendencias alimentarias como la dieta vegetariana o vegana (que se han incorporado a la oferta), el Hospital también apuesta por divulgar entre sus usuarios y usuarias consejos para conseguir una dieta equilibrada y saludable. En este sentido, todos los pacientes ingresados en el Hospital reciben un dossier con recetas saludables, información sobre diferentes alimentos (sobretodo frutas y verduras) y sus propiedades y artículos sobre temas de nutrición elaborados por especialistas del centro.
El Hospital Universitario Dexeus, consciente de la importancia de una dieta variada y equilibrada, apuesta por promoverla en todos sus ámbitos dentro del centro, ofreciendo una cocina de mercado que utiliza productos de temporada, menús limitados en grasas y bajos en sodio, con aceite de oliva y menos grasas saturadas y menos azúcares añadidos. También se ha revisado el proceso de elaboración de las comidas para incrementar las cocciones al horno y al vapor, en detrimento de otras. Para dar a conocer esta apuesta del Hospital por una alimentación con productos ecológicos y de proximidad, se obsequiará a todos los pacientes ingresados y a sus familiares con un zumo que combina frutas y verduras, se repartirá fruta en las consultas médicas del centro y se realizarán talleres sobre alimentación para los profesionales que trabajan.
La importancia de la microbiota
Numerosos estudios desarrollados en los últimos años han destacado la importancia que tiene cuidar la alimentación para prevenir determinadas enfermedades cardiovasculares o algún tipo de cáncer. Además, en los últimos 15 años, los estudios sobre la ‘flora intestinal’, este conjunto de bacterias que vive en nuestro intestino, ha acaparado un gran foco de atención. La flora -también conocida como microbiota- del intestino humano está formada por 100 billones de microorganismos de los cuales nos beneficiamos mutuamente. La microbiota intestinal ayuda en la digestión de los alimentos, produce vitaminas y protege contra la colonización de otros microorganismos.
Pero estudios recientes van mucho más allá y relacionan la flora intestinal con la regulación del peso corporal (la tendencia de cada persona a la obesidad), con la aparición de la diabetes, y con muchas otras condiciones de salud y enfermedad como estados de ánimo o enfermedades autoinmunes como la esclerosis múltiple, la colitis ulcerosa y otras como el alzhéimer. Por este motivo, todo lo que pueda alterar nuestra microbiota, como los edulcorantes artificiales, está en el punto de mira como elementos potencialmente relacionados con la salud y el desarrollo de enfermedades.
Una de las mayores aportaciones para evitar el sobrepeso y la obesidad es adquirir hábitos alimentarios saludables y conservarlos durante toda la vida. Un estilo de vida sano, con una dieta saludable, la práctica moderada y regular de ejercicio y el abandono de hábitos como el tabaco, favorece que el número de pacientes que requiere tratamientos más agresivos contra la obesidad, como la cirugía bariátrica, se reduzca, informan desde Quirónsalud.
Pocos obesos con indicación quirúrgica pasan por la cirugía bariátrica
Por otra parte, Johnson & Johnson Medical Devices Companies ha organizado un Simposio Científico en el marco del II Congreso de Obesidad y Complicaciones Metabólicas, celebrado en Sevilla. Bajo el nombre “Acceso y financiación de la cirugía bariátrica ¿Dónde estamos? El modelo público, el modelo privado, los conciertos”, se ha debatido sobre la cobertura asistencial y el modelo de financiación que actualmente se está realizando a los pacientes obesos. Según afirma el doctor Salvador Morales Conde, coordinador de la Unidad de Innovación en Cirugía Mínimamente Invasiva del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, “se debe concienciar a los gestores de la inversión a largo plazo que supone la cirugía bariátrica, ya que el ahorro global por resolución de comorbilidades es importante”.
El doctor Joaquín Estévez Lucas, presidente de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA), opina que clínicos y gestores deben trabajar de forma conjunta para aportar toda la calidad asistencial posible sin restar sostenibilidad al sistema: “El concepto de gasto o coste debe convertirse en concepto de inversión. Es prioritario trabajar evaluando resultados para dejar de invertir en aquello que es ineficiente y reinvertir en lo que verdaderamente lo es”, apunta. Las personas obesas consumen alrededor de un 20% más de recursos sanitarios y un 68% más de fármacos que las que no lo son, “por lo que aunque la cirugía bariátrica requiera una inversión inicial, si se analiza el coste-efectividad de la misma, esta inversión se recupera alrededor de los 2,5 primeros años, lo que supone un ahorro significativo para el sistema”, explica el doctor Estévez, quien añade que, “aunque hay unos 2 millones de pacientes obesos y metabólicos con indicación quirúrgica en España, sólo 7.000 (un 0,35%) son sometidos a cirugía bariátrica cada año, por lo que quizás el modelo puede no ser el adecuado”.
La fibromialgia podría tener su origen en una mala alimentación
La fibromialgia, la fatiga crónica, el espectro autista, la ansiedad o la depresión son algunos ejemplos de trastornos típicos de la mente y el cuerpo que podrían estar relacionadas significativamente con un ambiente intestinal desordenado inducido por una mala alimentación. “Los últimos estudios que se están realizando indican que mantener un intestino sano podría ayudar a prevenir o minimizar estas enfermedades”, afirma el Dr. Barry Sears, presidente de la Inflammation Research Foundation en una visita realizada a España. Estas patologías parecen estar aumentando al mismo tiempo que otros trastornos metabólicos como la obesidad, síndrome metabólico, hígado graso y diabetes, estos últimos causados claramente por la inflamación celular que puede aparecer cuando se come de manera desequilibrada, abusando de ciertos alimentos y olvidando otros fundamentales. “El intestino y el cerebro están conectados mediante el nervio vago, siendo éste una especie de autopista bidireccional por la que las bacterias intestinales pueden causar un efecto devastador en el cerebro si nuestro intestino está alterado", afirma Sears.
Por ello es tan importante cuidar nuestra alimentación con el fin de evitar que se inflamen nuestras células, tanto las del cuerpo como las del cerebro. “Nuestras células pueden inflamarse a raíz de lo que comemos: esta inflamación celular es la razón por la que engordamos, sufrimos determinadas enfermedades y envejecemos antes. Cuando reducimos esta inflamación estamos estabilizando los niveles de glucosa en sangre, eliminamos el exceso de grasa corporal y mejoramos nuestra energía física y agudeza mental”, explica este especialista.