Redacción Farmacosalud.com
La Jornada ‘Orientando la Atención Primaria hacia la comunidad’, organizada por el Programa de Actividades Comunitarias (PACAP) de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC) en colaboración con el Ministerio de Sanidad y con la participación de la Federación de Asociaciones de Enfermería Comunitaria y Atención Primaria (FAECAP) y la Asociación Enfermería Comunitaria (AEC), ha servido para la presentación oficial del documento ‘Orientación comunitaria: Hacer y No hacer en Atención Primaria’, un texto colaborativo que marca un paso más en la trayectoria del Programa de Actividades Comunitarias en Atención Primaria de la semFYC, y que es continuación de las Recomendaciones PACAP para equipos de Atención Primaria (AP).
El programa del PACAP de semFYC trabaja la orientación comunitaria como elemento esencial a la hora de abordar la salud en Atención Primaria. Según la co-coordinadora del mismo, Marta Sastre, “su incorporación supone un cambio de paradigma centrado en la salud y no en la enfermedad, ampliando el concepto de salud bajo el que se realizan los abordajes, teniendo en cuenta los determinantes sociales y la perspectiva más allá del sistema sanitario, hacia una necesaria participación comunitaria en salud”. Esta apuesta se ha visto impulsada con la publicación de ‘Orientación comunitaria: hacer y no hacer en Atención Primaria’.
6 de ‘Hacer’ y 6 de ‘No-Hacer’
En palabras de la Dra. Belén Benedé, co-coordinadora de PACAP y una de las coordinadoras del texto, “este documento está aportando un saber técnico, una concreción en 12 recomendaciones, 6 de ‘Hacer’ y 6 de ‘No-Hacer’ sobre acciones concretas que deberían ser realizadas o que deberían evitarse para ser tenidas en cuenta en la práctica cotidiana”. Se trata, además, de un texto muy sencillo, “muy fácil de leer, con un lenguaje que puede ser comprendido por profesionales sanitarios y no sanitarios que trabajan en AP, por la población a que estos atienden, las entidades, el tejido social y otros profesionales del sector salud o sectores próximos con los que se coordina la Atención Primaria, así como otros profesionales o agentes de salud”.
Precisamente esa es una de sus claves. Por eso, Belén Benedé opina que, si un equipo quiere abordar la reorientación comunitaria de su práctica comunitaria, este documento puede ser un buen inicio porque “trata de ver qué cosas, basándose en la evidencia, hemos de hacer y plantearnos no hacer o dejar de hacer, para desarrollar la atención comunitaria. Y el documento facilita las claves para la reflexión”. El abordaje de la atención comunitaria, aunque referenciado desde hace años en el Sistema Nacional de Salud pero invisibilizado y no apoyado, está siendo ‘revalorizado’ en los últimos años hasta el punto de que uno de los ejes del Marco Estratégico de la Atención Primaria aprobado por el Consejo Interterritorial en abril de 2019 se fundamenta en acciones de salud comunitaria.
“La Atención Primaria continúa siendo potencial de cambio”
Marta Sastre coordinadora del documento junto con Belén Benedé y co-cordinadora del PACAP, entiende que “la Atención Primaria continúa siendo potencial de cambio y más que nunca tenemos necesidad de respuestas efectivas y eficientes ante las nuevas necesidades sociosanitarias. Tenemos necesidad de vínculos potentes entre los actuales recursos sanitarios de Atención Primaria y los sociales, porque el envejecimiento de la población, la movilidad, las nuevas tecnologías y las nuevas formas de enfermar precisan servicios de salud integrados con los servicios sociales”. En este sentido, en el prólogo del documento ‘Orientación comunitaria: hacer y no hacer en Atención Primaria’ se defiende que “necesitamos diseñar estrategias asociativas, promover la salud, incrementar la calidad de vida y el bienestar social, potenciar la capacidad de las personas y grupos para el abordaje de sus propios problemas, demandas y necesidades. Es por ello que hoy, más que nunca, necesitamos desarrollarnos en las actividades comunitarias”.
Según las responsables del PACAP, para incluir esta dimensión “es preciso hacer una serie de acciones en todos los niveles del sistema y en especial en Atención Primaria de Salud (APS) dejando de considerar los servicios sanitarios como una empresa de provisión sin relación con la acción comunitaria. Solo así, estos asumirán su responsabilidad social utilizando sus marcos estratégicos de coordinación y participación, y podrán enfrentar las necesidades individuales y colectivas así como los problemas de salud”. De hecho, con el fin de responder estas inquietudes y ayudar a implantar esta estrategia, el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) diseñó un Marco Estratégico para la Atención Primaria y Comunitaria.
Se trata de un documento para cuya elaboración se contó con la participación de las Comunidades Autónomas, profesionales, pacientes y usuarios. Un documento que, para Benedé, significa “una nueva oportunidad de materializar un paraguas institucional destinado a que la AP se lleve a cabo con una orientación comunitaria. Sin embargo, se vive también como un momento expectante, puesto que puede quedarse de nuevo en un marco estratégico sin financiación que no suponga ningún cambio a la hora de impulsarlo y que se quede solo en el papel. No obstante, la creación de la oficina técnica supone un avance. Vivimos esta nueva oportunidad con ilusión y ganas de que, en efecto, salga bien”.
“El Sistema Nacional de Salud, y sobre todo la AP, son muy deficitarios”
Las dudas de Belén Benedé tienen que ver con la situación actual: “El Sistema Nacional de Salud, y sobre todo la Atención Primaria, son muy deficitarios y, por lo tanto, sumamente débiles para poder llevar a cabo su quehacer comunitario. Para reorientar hacia la comunidad es necesario utilizar modelos que aporten intersectorialidad, multidisciplinaridad, salud positiva, participación, equidad y orientación a los determinantes, con enfoque a procesos de coproducción de salud”.
En relación a estos modelos, Benedé apunta que parte de la clave de su éxito está en que estos modelos “no se impongan, para que así sean sostenibles y se consoliden, que se basen en hacer las cosas fáciles y sean una oportunidad en el cambio que nuestra Atención Primaria precisa. Para ello, el apoyo institucional contundente y no de fachada es muy importante. En estas Jornadas se ha visto que hay buenas prácticas en los territorios. Ahora toca darle: IMPORTANCIA; VISIBILIDAD Y PRESUPUESTO”.