Redacción Farmacosalud.com
El estudio internacional 'Freedom COVID' demuestra que el tratamiento anticoagulante a dosis altas puede reducir la tasa de muerte en un 30% y la necesidad de intubación en un 25% en pacientes hospitalizados por COVID-19 que no permanecen en estado crítico, en comparación con el tratamiento estándar, que es la anticoagulación a dosis bajas. El buen efecto terapéutico de las dosis altas se observó en todos los enfermos, con independencia de su edad, tal y como certifica el Dr. José María Castellano, director científico de la Fundación de Investigación HM Hospitales (FiHM) e investigador principal en España de 'Freedom COVID': “La mediana de edad en los tres grupos estudiados fue de 53 años, con un rango entre 40-64 años. Los resultados en los análisis por subgrupos fueron bastante consistentes, también en el grupo de pacientes de más de 53 años”.
Así pues, la nueva investigación, en la que han participado 76 hospitales de 10 países, podría cambiar el manejo existente de los individuos con COVID no críticos (no ingresados en Unidades de Cuidados Intensivos o UCI). "Desde la Fundación de Investigación HM Hospitales tuvimos el placer de coordinar los centros y pacientes que participaron desde España en este importantísimo estudio. El ensayo aporta nuevas evidencias sobre la optimización del manejo de pacientes COVID-19 y demuestra que la anticoagulación a dosis altas puede mejorar la supervivencia, concretamente en pacientes hospitalizados por COVID-19 con afectación pulmonar sin indicación de ingreso en UCI", destaca el Dr. Castellano.
Enoxaparina y apixaban
“Los registros observacionales del principio de la pandemia informaron de disminuciones de mortalidad en pacientes hospitalizados por COVID tratados con anticoagulación, lo que llevó a tratar de facto a la mayoría de pacientes con dosis profilácticas. Algunos estudios no aleatorizados sugirieron que la anticoagulación a dosis terapéuticas podría tener un beneficio incluso mayor. Bajo estas premisas se inició el presente estudio, que comparó el tratamiento de tres regímenes anticoagulantes en sujetos hospitalizados por COVID sin criterios de ingreso en UCI (pacientes no críticos): enoxaparina a dosis profiláctica (40mgs), enoxaparina a dosis terapéuticas (1mg/kg) o apixaban a dosis terapéuticas (5mgs dos veces al día)”, precisa el Dr. Castellano a través de www.farmacosalud.com.
Los participantes fueron aleatorizados para recibir dosis de los diferentes anticoagulantes en las 24-48 horas siguientes a su ingreso en el hospital y fueron seguidos durante 30 días. Si bien la investigación demostró que el tratamiento con anticoagulación profiláctica (en dosis bajas) se asociaba a mejores resultados, tanto dentro como fuera de la Unidad de Cuidados Intensivos entre los pacientes hospitalizados por COVID-19, también se observó que la anticoagulación terapéutica (a dosis altas) podía conducir a mejores resultados aún.
El objetivo del ensayo fue comparar diferencias en tasas del endpoint primario (compuesto de mortalidad por todas las causas, cuidados intensivos, tromboembolismo o ictus isquémico) entre dosis profilácticas y terapéuticas. Los resultados demostraron que en aquellos pacientes que habían recibido las pautas de anticoagulación a dosis terapéuticas se registraba una “menor mortalidad a 30 días o necesidad de intubación. La tasa de eventos fue similar entre los pacientes que recibieron enoxaparina a dosis altas y apixaban”, detalla el facultativo.
El autor principal de 'Freedom' es el Dr. Valentín Fuster, director general del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), presidente de Mount Sinai Heart y jefe médico del Hospital Mount Sinai (Nueva York, en Estados Unidos). El nuevo ensayo, publicado por ‘The Journal of American College of Cardiology (JACC)’, ha sido presentado recientemente en el marco del Congreso Americano de Cardiología del ACC, celebrado en Nueva Orleans (USA).
El gran problema de los trombos sanguíneos
La participación de la FiHM en esta investigación representa un reconocimiento a su capacidad investigadora y organizativa, ya que ha servido de nexo de unión para gestionar la cohorte de pacientes proveniente de cinco centros hospitalarios españoles, como son los hospitales universitarios HM Sanchinarro, HM Montepríncipe, HM Torrelodones, Complejo Hospitalario de Navarra y Hospital Universitario Infanta Leonor. El Grupo HM Hospitales, a través de la FiHM, ha participado de forma muy activa en la mayoría de los ensayos clínicos que han aportado evidencia tanto en los tratamientos que actualmente se indican en enfermos de COVID-19 como en las diferentes vacunas en adultos, niños y embarazadas. Por lo tanto, esta nueva evidencia consolida a HM Hospitales como plataforma de investigación clínica traslacional a nivel internacional y como una organización que aporta conocimientos con los que ofrecer las mejores estrategias terapéuticas.
El Dr. Fuster, quien al inicio de la pandemia se percató de que muchas personas hospitalizadas con COVID-19 desarrollaban altos niveles de trombos sanguíneos potencialmente letales, apostó por realizar el ensayo entre agosto de 2020 y septiembre de 2022, para el que se reclutaron 3.398 adultos hospitalizados con COVID-19 confirmada (mediana de edad, 53 años). Los enfermos reclutados no estaban ingresados en UCI ni intubados, y aproximadamente la mitad presentaban signos de COVID que afectaban a sus pulmones, provocándoles síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA). "Freedom COVID es el primer estudio que demuestra que la anticoagulación a dosis altas puede mejorar la supervivencia en esta población de pacientes; un hallazgo importante, ya que las muertes por esta enfermedad siguen siendo frecuentes", señala Fuster.