Redacción Farmacosalud.com
La compañía Royal Philips ha anunciado que puede ayudar a los médicos y a las instituciones de atención médica a gestionar el aumento del flujo de pacientes como resultado del brote de COVID-19 a través de una solución dedicada y escalable de telesalud que facilita la realización de exámenes en línea, cuestionarios de seguimiento y monitoreo, y colaboraciones con centros de llamadas externos. Su objetivo es evitar visitas innecesarias a los médicos de familia y hospitales y el monitoreo remoto de la gran mayoría de los pacientes con coronavirus que se encuentran en cuarentena en el hogar.
Fuente: Royal Philips / Europa Press Comunicación
En primer lugar, los pacientes completan desde casa un cuestionario online. Según los resultados, el cuidador puede permitir que la solución clasifique a los pacientes dependiendo del riesgo y tomar las medidas adecuadas. Si fuese necesario, los usuarios pueden ser monitoreados a través de encuestas de seguimiento automatizadas. Un centro de llamadas contactará con los pacientes de alto riesgo para obtener información adicional. Si el centro determina que se requiere atención, el paciente es derivado al médico de familia, quien luego puede brindarle la atención necesaria o enviarlo al hospital.
No se pretende sustituir la atención regular o de emergencia
El cuestionario está dirigido a apoyar a los servicios sanitarios, por lo que, explícitamente, no pretende sustituir la atención regular o de emergencia. La solución se basa en una plataforma probada y testada en pacientes de Philips que está siendo utilizada por más de 100 instituciones de salud en todo el mundo.
El Hospital Groene Hart en Gouda, Holanda, es una de las instituciones sanitarias que no solo ha comenzado a usar la solución de detección y monitoreo COVID-19, sino que también ha contribuido a su desarrollo. "Estamos utilizando esta aplicación para aliviar la enorme presión que actualmente se ejerce sobre nuestro sistema de salud", dice Ronald Liem, jefe de Cirugía del Hospital Groene Hart. "Junto con los médicos de familia y el servicio holandés de salud pública, ahora podemos centrarnos en los casos más urgentes y determinar, en base a las respuestas de las encuestas, qué pacientes necesitan o no necesitan atención adicional".
