Redacción Farmacosalud.com

En el tratamiento del ictus, tiempo es cerebro. De cara a minimizar las secuelas neurológicas que sufren estos pacientes, el Hospital Vall d’Hebron (Barcelona) ha puesto en marcha el sistema One Step Ictus, que transforma la atención al paciente de ictus isquémico y hemorrágico concentrando todo su abordaje en una única sala de acceso directo para reducir el tiempo de actuación desde que el enfermo llega al Servicio de Urgencias hasta que recibe el tratamiento. Es, por lo tanto, una tecnología nueva que va acompañada de un abordaje también innovador.

El conseller de Salut de la Generalitat, Manel Balcells, destaca que “este proyecto no supone sólo una nueva manera de afrontar el código ictus, sino que también supone un ahorro de tiempo, ganar tiempo, y, en los ictus, actuar con rapidez es clave”. “Este proyecto representa también una nueva manera de contratar los servicios, conocida como compra pública innovadora, que fomenta la innovación” y que “en este caso permitirá que pacientes que han sufrido un ictus puedan hacer una vida normal”, agrega.

Reforma del espacio de neurorradiología intervencionista
Después de un año de actuaciones estructurales y tecnológicas, este proyecto, pionero en el mundo, ya ha entrado en funcionamiento. One Step Ictus ha ido acompañado de la reforma del espacio de neurorradiología intervencionista, que se ha equipado con la tecnología más innovadora para que el equipo de profesionales de Neurología y Neurorradiología evalúen, diagnostiquen y traten a los enfermos de forma más ágil. El proyecto se ha realizado a través de una Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por las firmas Medtronic y Siemens Healthineers.

One Step Ictus también incorpora la plataforma digital SmartStroke desarrollada por Siemens Healthineers, que integra la información de la historia clínica con el resto de datos que genera el paciente a través de dispositivos médicos y varias aplicaciones digitales durante su paso por el sistema sanitario, tanto en la fase de ingreso como durante su seguimiento. Este manera de trabajar facilita la monitorización del proceso de manera integral a través de cuadros de mando avanzados. “Hoy inauguramos oficialmente One Step Ictus, un proyecto que se enmarca en la transformación del nuevo Vall d’Hebron, una apuesta estratégica que pasa por la creación de nuevos equipamientos y la mejora de las infraestructuras acompañada de la tecnología más puntera para resolver los retos que la sanidad nos plantea”, señala el Dr. Albert Salazar, gerente del Hospital Universitario Vall d’ Hebron.

Un 48% de los casos más graves pueden conseguir una recuperación clínica casi total
Gracias a One Step Ictus, el sujeto que presenta síntomas de accidente cerebrovascular va directamente a la sala One Step Ictus, en vez de pasar el circuito tradicional del Servicio de Urgencias, a través de un pasillo que se ha habilitado exclusivamente para el traslado de estos pacientes. “La solución tecnológica pionera de la sala One Step Ictus combina un angiógrafo biplano para realizar la trombectomía mecánica, el procedimiento estándar para extraer los trombos que causan el ictus, con un equipamiento para hacer el TAC antes, durante y después de la trombectomía y evaluar el flujo sanguíneo cerebral del paciente”, explica el Dr. Manel Escobar, director clínico del Servicio de Diagnóstico por la Imagen del Hospital Universitario Vall d’ Hebron y del IDI Vall d’Hebron.

Siemens Healthineers ha desarrollado tanto ARTIS Icono Biplane, el equipamiento para hacer trombectomías, como SOMATOM Edge Plus sliding gantry, que posibilita hacer los TACs al enfermo sin moverlo mientras se le somete al procedimiento, puesto que se desplaza por raíles magnéticos.

“Gracias al traslado directo del paciente con ictus a la sala de angiografía, donde se hace la exploración y el tratamiento de forma inmediata, duplicamos la probabilidad de un buen pronóstico funcional de los pacientes con ictus más graves: calculamos que un 48% pueden llegar a conseguir una recuperación clínica casi total después de ser sometidos a una trombectomía directa, frente al 27% de los que siguen el circuito tradicional”, expone el Dr. Carlos Molina, jefe de sección del Servicio de Neurología y jefe de la Unidad de Ictus y coordinador del Proceso Ictus de Vall d’Hebron.

Los individuos que presentan un cuadro neurológico repentino sugestivo de ictus y una clínica moderada o severa son trasladados a la sala One Step Ictus directamente desde la ambulancia o bien desde el Servicio de Urgencias. “La sala One Step Ictus permite hacer diagnóstico, valoración clínica y estabilización, así como un número importante de tratamientos, de forma que los traslados intrahospitalarios quedan reducidos a la mínima expresión, con el consiguiente ahorro del tiempo en la atención a los pacientes”, añade el Dr. Alejandro Tomasello, jefe de la sección de Neurorradiología Intervencionista del Hospital Universitario Vall d’Hebron.

Trabajando en equipo
“El máximo objetivo de One Step Ictus es minimizar el tiempo de actuación para el tratamiento de los pacientes y esto supone que los técnicos superiores de diagnóstico por la imagen y los profesionales de enfermería trabajen de forma integrada. Por parte de los técnicos, preparando el material específico y la tecnología de los angiógrafos para el tratamiento de estos pacientes y, desde enfermería, instrumentalizando el material conjuntamente con el neuroradiólogo y dando asistencia hemodinámica al paciente conjuntamente con el anestesiólogo”, destacan Neus Salmerón, enfermera responsable de angio-radiología, y Cristina Losada, técnica superior de diagnóstico por la imagen responsable del material de angio-radiologia. Los profesionales de enfermería están implicados en el proceso de estabilización, control, administración de la medicación e instrumentación del procedimiento intervencionista. Los técnicos son los responsables del manejo de los sofisticados equipamientos biplano y TAC deslizante.

One Step Ictus incorpora asimismo la plataforma SmartStroke, que recoge sistemáticamente datos clínicos e indicadores transversales muy definidos para garantizar el mejor pronóstico funcional con la mayor eficiencia y realizar una medicina más predictiva y personalizada. Además, SmartStroke facilita la comunicación directa con el enfermo una vez es dado de alta, su seguimiento a distancia, las consultas telemáticas y el control preciso de los factores de riesgo vascular, y permite monitorizar la rehabilitación desde su domicilio.

Medtronic pone a disposición de este proyecto el abordaje integrado de procesos y procedimientos asistenciales, teniendo en cuenta las diferentes fases del ciclo de cuidado de los pacientes, especialmente relevante en patologías tiempo-dependientes como esta. Un enfoque que permitirá maximizar la eficiencia en el manejo de materiales, ofreciendo, a su vez, un modelo de aprovisionamiento para una terapia personalizada a cada paciente. Además, para medir el impacto de estos resultados, se monitorizarán indicadores como los PROMs (Patients Reported Outcome Measures) que aportarán información del estado y evolución del paciente a nivel tanto físico como cognitivo.

El proyecto One Step Ictus tiene un coste total de 18.185.676 euros cofinanciado al 50% con Fondos Europeos de Desarrollo Regional (FEDER), que aportarán 9.092.838 euros, en el Programa Operativo 2014-2020 de Catalunya que impulsa proyectos de Compra Pública Innovadora en el marco del SISCAT (Sistema Sanitario Integral de Utilización Pública de Cataluña, del cual forma parte Vall d’Hebron). La Compra Pública Innovadora fomenta la innovación desde el sector público y compromete las empresas a cumplir toda una serie de indicadores asistenciales y basados en resultados de salud. Este proyecto de colaboración entre Vall d’Hebron, Siemens Healthineers y Medtronic tendrá una duración inicial de cinco años.