Redacción Farmacosalud.com
El Colegio de Farmacéuticos de Sevilla, en colaboración con farmacéuticos de Atención Primaria, ha puesto en marcha un sistema pionero a nivel nacional que permitirá comunicar de forma directa a las Oficinas de Farmacia con los Centros de Salud para que puedan ser notificados problemas que afecten al tratamiento de los pacientes para así buscar una resolución óptima con la mayor agilidad posible.
Mediante esta herramienta tecnológica –denominada AP-Farm@– los farmacéuticos comunitarios remitirán al Colegio de Farmacéuticos de Sevilla la incidencia detectada, desde donde se enviará al farmacéutico de Atención Primaria del Distrito Sanitario correspondiente, quien intervendrá transmitiendo la incidencia al Centro de Salud desde donde partió la prescripción de ese tratamiento para que sea resuelta. Dicha resolución será enviada de nuevo al Colegio, desde donde un técnico –profesional farmacéutico– la notificará a la Oficina de Farmacia donde se constató el problema.
Respuesta a una demanda en la profesión farmacéutica
“Existía una demanda en la profesión por parte de los farmacéuticos comunitarios de disponer de un canal de comunicación ágil con los médicos y enfermeros para solventar diversas incidencias que acontecen durante el desempeño diario. Es por ello, por lo que gracias a la colaboración de los farmacéuticos de Atención Primaria, se ha desarrollado una herramienta disponible en la aplicación informática que utilizan todas las farmacias sevillanas”, explica el presidente del Colegio de Farmacéuticos, Manuel Pérez, quien subraya que con esta aplicación no sólo se mejora la comunicación entre ambos espacios sanitarios, sino que se ofrecerá una mejor atención al paciente, “lo que se traducirá en mayor calidad de vida”.
Otras de las ventajas de AP-Farm@ es que evita desplazamientos innecesarios y consultas presenciales, más si cabe en un momento como el actual, en el que se trata de evitar la asistencia de pacientes –especialmente los más vulnerables– a los centros sanitarios, y también previene la posible distorsión del mensaje que el prescriptor desea transmitir al farmacéutico que llevará a cabo la dispensación, dado que ahora se canaliza de una forma directa entre profesionales de la farmacia.
Algunas de las incidencias más comunes que se podrán detectar mediante esta herramienta es la falta de adherencia de los pacientes a los tratamientos prescritos o intolerancia a algunos de los excipientes de determinados fármacos. Gracias a la labor del farmacéutico comunitario, el prescriptor también tendrá constancia de la falta de disponibilidad de algunos tratamientos por desabastecimiento. Otras de las potencialidades de AP-Farm@ es que también se podrán detectar y notificar con mayor agilidad problemas de seguridad en relación con los tratamientos –tales como reacciones adversas, alergias o duplicidades–, o errores en pautas posológicas, entre otros.