Redacción Farmacosalud.com
Un equipo de investigación del consorcio internacional SCOURGE liderado por el Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) ha realizado un estudio que ha descubierto mecanismos biológicos compartidos entre el COVID-19 grave y la fibrosis pulmonar idiopática. La investigación profundiza en la arquitectura genética del COVID-19 grave analizando cómo los riesgos genéticos asociados a la fibrosis pulmonar idiopática pueden influir en la gravedad de la enfermedad infecciosa. Esta investigación colaborativa CIBER, que ha sido publicada en la revista científica ‘European Respiratory Journal Open Research’, ha contado con la participación de instituciones de España, Reino Unido y América Latina, y ha sido financiada por el Instituto de Salud Carlos III y la Wellcome Trust. El proyecto reúne a expertos y expertas de 34 centros nacionales y 13 centros de América Latina.
La fibrosis pulmonar idiopática es una afección pulmonar crónica, progresiva y poco frecuente, caracterizada por una cicatrización anómala del tejido pulmonar, con una supervivencia media de tan solo tres años tras el diagnóstico. Para ello, se ha contado con los datos del ADN de casi 7.600 pacientes diagnosticados con COVID-19 grave y 11.000 controles recopilados antes de poner en marcha los programas de vacunación contra el COVID.
Varios estudios recientes han demostrado que los pacientes hospitalizados por COVID-19 pueden desarrollar anomalías pulmonares residuales, incluido el desarrollo de una fibrosis pulmonar. Este nuevo trabajo se basa en el análisis de conjuntos de genes del ADN de los pacientes (herencia poligénica) para demostrar la existencia de mecanismos biológicos compartidos entre la fibrosis pulmonar idiopática y la gravedad del COVID-19 y determinar si estas relaciones dependen de la edad y/o el género de los pacientes.
La relación genética más importante se identificó en las personas hospitalizadas, especialmente entre los varones menores de 60 años. Este resultado apoya la idea de que, entre los sujetos más jóvenes, la gravedad del COVID-19 se debería a la presencia de factores de riesgo genéticos, mientras que, en edad avanzada, el COVID-19 grave podría estar más influido por factores no genéticos, como afecciones coexistentes y defectos inmunológicos. Además, el nuevo trabajo identificó algunos mecanismos biológicos específicos que podrían estar implicados tanto en dicha patología infecciosa grave como en la fibrosis pulmonar idiopática.
Creciente interés en la aplicación de modelos de herencia poligénica
Puesto que el COVID-19 grave también aumenta el riesgo de padecer secuelas pulmonares tras la infección, los resultados de este estudio sugieren que las personas con un alto riesgo genético de fibrosis pulmonar idiopática podrían tener un mayor riesgo general para desarrollar secuelas fibróticas pulmonares una vez superado un COVID-19 grave. Estos resultados tendrían también implicaciones importantes para la población con un mayor riesgo genético de fibrosis pulmonar que no han desarrollado esta enfermedad, además de tener implicaciones significativas en las estrategias para la prevención y el manejo de la afección.
Los resultados de la investigación también respaldan el creciente interés en la aplicación de los modelos de herencia poligénica en el desarrollo de la Medicina de Precisión.
"Este trabajo abre nuevas vías de estudio para entender mejor los mecanismos de establecimiento de las secuelas pulmonares a causa de una infección grave, con el fin de entender mejor la historia natural de la fibrosis pulmonar, entre otras, y para la definición de posibles dianas terapéuticas", explica el Dr. Carlos Flores, coordinador del trabajo e investigador del CIBER en el área de Enfermedades Respiratorias (CIBERES) y de la Fundación Canaria Instituto de Investigación Sanitaria de Canarias (FIISC) en el Complejo Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria (HUNSC) y el Área de Genómica del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), dependiente del Cabildo Insular de Tenerife.
La Dra. Beatriz Guillén Guío, líder del estudio e investigadora del CIBERES en la Universidad de Leicester (Reino Unido), destaca asimismo que “los estudios genéticos son clave para comprender por qué algunos individuos desarrollan fibrosis pulmonar e identificar posibles opciones de tratamiento. Los resultados de esta investigación no sólo son relevantes en el contexto del COVID-19, sino también para la fibrosis pulmonar asociada a infecciones por otros microorganismos”.
“Este estudio refleja el extraordinario esfuerzo llevado a cabo por las instituciones participantes durante los momentos más críticos de la pandemia del COVID-19, así como su firme compromiso con la investigación científica de excelencia”, concluye el equipo de investigación.
En mayo de 2020, se puso en marcha el consorcio internacional SCOURGE (COalición Española para Desbloquear la Investigación sobre Genética del Huésped en COVID-19) liderado por el Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) con el objetivo de identificar biomarcadores de evolución y pronóstico que puedan mejorar el manejo clínico y las decisiones terapéuticas en infecciones por el coronavirus SARS-CoV-2, que eds el patógeno causante del COVID-19. Trabajando en estrecha colaboración con la iniciativa STOP-Coronavirus, SCOURGE aprovecha una plataforma centralizada de análisis y genotipado para avanzar en el conocimiento genético del huésped y su relación con la gravedad de la COVID-19.
Artículo de referencia en acceso abierto:
Guillen-Guio B, Marcelino-Rodriguez I, Lorenzo-Salazar JM, Leavy OC, Allen RJ, Pompa-Mera EK, et al. Polygenic risk of idiopathic pulmonary fibrosis and COVID-19 severity. ERJ Open Research 2024, https://doi.org/10.1183/23120541.00978-2024