Redacción Farmacosalud.com

La Clínica Dermatológica Internacional (CDI o el Hospital de la Piel, en Madrid) ha creado DERMA ÍNTIMA, la primera unidad compuesta de manera conjunta por dermatólogos y ginecólogos para ofrecer las mejores soluciones a las alteraciones de la región vulvo vaginal. En la nueva unidad se abordan los dos componentes del rejuvenecimiento genital no quirúrgico:

• Los genitales externos: para devolverles su aspecto ‘juvenil’
• La región vaginal: en la que se trabaja con la parte funcional

Los dispositivos empleados en estos tratamientos (distintos tipos de láser o radiofrecuencia fundamentalmente) pueden utilizarse tanto con una finalidad estética, como para mejorar problemas funcionales que afectan a los genitales femeninos o incluso al tracto urinario. Actualmente se están realizando como alternativa de tratamientos quirúrgicos más invasivos que suponen un mayor coste económico, peor tolerancia y tiempos de recuperación más largos.

Según declara la Dra. Elena Tévar, responsable de la unidad DERMA ÍNTIMA, “de esta forma, no sólo la imagen externa de los genitales, sino diversos síntomas que pueden interferir tanto en las relaciones íntimas como afectar de forma importante en la calidad de vida de las pacientes, van a ser susceptibles de mejorar con las nuevas aplicaciones de dispositivos láser como el láser CO2 fraccionado”.  El equipo de ginecología está dirigido por el Dr. Bau, que actúa de manera conjunta con la Dra. Tévar para asegurar que los aspectos más funcionales de la zona vulvo-vaginal también se trabajan de manera óptima, asegurando así un tratamiento integral (principal innovación que la unidad DERMA INTIMA de CDI ofrece al sector) de toda esta zona.

Demanda cada día más frecuente de rejuvenecimiento vaginal
Al igual que ocurre con otras partes del cuerpo, hay una demanda cada día más frecuente en lo que al rejuvenecimiento vaginal se refiere. La menopausia, la edad, los partos o la obesidad son algunas de las causas que contribuyen a la laxitud vulvo-vaginal o a la atrofia vaginal. Estas alteraciones pueden afectar de forma importante a la calidad de vida de las mujeres, pero raramente se habla de ellas, ni siquiera con el especialista.

La laxitud vaginal se relaciona con la dilatación del área vaginal atribuida a los partos y lo pueden presentar tanto mujeres pre como postmenopáusica. Con los partos y la edad el tono muscular de la vagina desciende y lleva a disfunción orgásmica, cambios en las sensaciones en la zona genital e incluso a incontinencia urinaria. Las mujeres postmenopáusicas debido al descenso en los estrógenos pueden experimentar laxitud, sequedad, picor, incontinencia urinaria y dolor.

Las pacientes con tumores ginecológicos también pueden beneficiarse
También las pacientes con tumores ginecológicos podrían llegar a beneficiarse de estos tratamientos. Estas pacientes suelen desarrollar distintos grados de atrofia vaginal debido a los quimioterápicos recibidos y en muchas de ellas la terapia hormonal sustitutiva está contraindicada, por lo que el ‘rejuvenecimiento vaginal no quirúrgico’ podría representar una posible alternativa.

El láser Core Intima es un láser CO2 fraccionado diseñado para el tratamiento de alteraciones en la región vulvo-vaginal con un tiempo de recuperación corto y escasos efectos secundarios. Es un láser con afinidad por el agua que cuando se aplica en la zona vulvo-vaginal produce una ablación y coagulación del tejido que desencadena una remodelación con nueva formación de colágeno y fibras de elastina en la piel atrófica. De esta forma, el tono muscular de la vagina se recupera gracias a un tensado de las estructuras de soporte. El láser CO2 fraccionado ha demostrado eficacia en la mejoría de los síntomas de laxitud y atrofia vulvo-vaginal restaurando la estructura de la mucosa en mujeres tanto pre como posmenopáusicas.

El tratamiento consiste en 3 sesiones espaciadas un mes una de otra y la mejoría comienza a observarse después de la segunda sesión manteniéndose hasta por lo menos un año después. No es necesaria la utilización de ningún anestésico, salvo en el caso del tratamiento de la zona externa, donde si hay molestias puede utilizarse anestesia local en forma de crema. La paciente puede reincorporarse de forma inmediata a su vida diaria.