Redacción Farmacosalud.com
La administración de lenvatinib y pembrolizumab, junto con la aplicación de quimioembolización (oclusión de los vasos sanguíneos del tumor hasta provocar la necrosis del tejido tumoral) aporta notables beneficios frente al carcinoma hepatocelular (cáncer de hígado) en estadios intermedios, según se desprende de un estudio internacional publicado en ‘The Lancet’. Esta triple combinación, además, es bastante segura, dado que los efectos secundarios relacionados con la toma de los “tratamientos farmacológicos se consideran tolerables y son los esperables y previamente descritos, como hipertensión, proteinuria* y síndrome postembolización**”, asegura el líder del trabajo, el Dr. Josep Maria Llovet, jefe del grupo de Investigación Translacional en Oncología Hepática del Hospital Clínic-IDIBAPS (Barcelona).
*proteinuria: presencia excesiva de proteína en la orina
**síndrome postembolización: náuseas, dolor y una ligera fiebre
De hecho, se considera que el beneficio clínico obtenido con este abordaje terapéutico “es superior a los eventos adversos esperados”, agrega desde www.farmacosalud.com Llovet, quien también es profesor ICREA y catedrático de Medicina en la Universidad de Barcelona (UB) y en la Icahn School of Medicine del Mount Sinai (Nueva York, en Estados Unidos).
La primera mejora terapéutica significativa en 20 años frente a este subtipo de cáncer hepático
El nuevo estudio ha servido para presentar la primera mejora significativa en 20 años para el tratamiento de un subtipo de pacientes con cáncer hepático. Así, este ensayo clínico de fase 3 ha revelado que lenvatinib + pembrolizumab + quimioembolización prolonga significativamente la supervivencia libre de progresión tumoral en personas que sufren un carcinoma hepatocelular en estadios intermedios. En los pacientes que, además de la quimioembolización, recibieron ambos medicamentos, la supervivencia libre de progresión de la enfermedad fue de 14,6 meses, en comparación con los 10 meses que se obtienen con la ‘quimioembolo’ sola. Asimismo, la respuesta antitumoral fue del 72% frente al 50%, respectivamente.
Preguntado por si la triple combinación terapéutica funciona mejor en ciertos perfiles de enfermos que en otros -por ejemplo en función de la edad, comorbilidades, etc.-, el Dr. Llovet explica que, “en principio, la población diana son los pacientes con carcinoma hepatocelular en estadio intermedio, que representan el 25-30% de los casos. Esta población, a nivel mundial, representaría 200-250.000 casos al año. De entre las personas tratadas, el 72% responden a la nueva combinación, y sólo se ha objetivado que, del resto de pacientes, una baja proporción progresarían (progresaría la afección) a pesar del tratamiento: serían aquellos con síntomas relacionados con el cáncer”.
Un inhibidor multiquinasa e inmunoterapia
“Este estudio representa un cambio de paradigma en el manejo de los pacientes con carcinoma hepatocelular en estadios intermedios. Se pasa del tratamiento exclusivamente con quimioembolización, a añadir tratamiento sistémico con un inhibidor multiquinasa e inmunoterapia, lo que mejora el pronóstico de las personas afectadas, ya que reduce en un 34% el riesgo de progresión de la enfermedad”, precisa mediante un comunicado el experto.
El ensayo, en el que han participado 137 centros de todo el mundo, incluyó a 480 sujetos divididos en dos grupos. A todos los participantes se les aplicó la terapia de la embolización, pero solo a uno de los grupos se les administró lenvatinib por vía oral y pembrolizumab por vía intravenosa. Al otro grupo se le administró placebo. En el marco del seguimiento de más de 2 años realizado a los pacientes, además de la respuesta antitumoral y la supervivencia libre de progresión, también se observó una cierta mejora en la supervivencia global, si bien los datos aún no son suficientemente maduros.
“Para afirmar con seguridad que la combinación de lenvatinib y pembrolizumab supone un aumento de la supervivencia de los pacientes, necesitamos realizar un seguimiento más prolongado para obtener datos que confirmen la significación estadística. De todas maneras, los datos que tenemos hasta ahora son bastante alentadores”, manifiesta Llovet.
Lenvatinib, que pertenece a la familia de los inhibidores de quinasas, bloquea la señalización que induce la división celular y, con ello, detiene la propagación del cáncer. Es un medicamento ya aprobado para el tratamiento de personas con carcinoma hepatocelular avanzado que no pueden beneficiarse de la embolización o en quienes esta estrategia ha fallado. Por su parte, pembrolizumab es un anticuerpo que ayuda al sistema inmunitario a atacar las células tumorales y cuya utilización ya ha sido aprobada en Estados Unidos.
“Elegimos estos dos fármacos porque creímos que la combinación de inmunoterapia con un inhibidor de quinasas podría prevenir la inmunosupresión presente en estos tumores, aumentando así la actividad antitumoral. Y también que podría prevenir la formación de nuevos vasos sanguíneos en el tumor, lo que incrementaría el efecto de la embolización”, destaca el jefe del grupo de Investigación Translacional en Oncología Hepática del Hospital Clínic-IDIBAPS.
La presentación de los resultados del nuevo estudio fue el tema principal de la sesión plenaria del último Congreso de la ESMO (Sociedad Europea de Oncología Médica), celebrado el pasado otoño en Barcelona con la presencia de más de 30.000 profesionales. Este ensayo clínico se ha llevado a cabo con la financiación de Eisai y Merk.
Artículo de referencia
Kudo M, et al. Transarterial chemoembolisation combined with lenvatinib plus pembrolizumab versus dual placebo for unresectable, non-metastatic hepatocellular carcinoma (LEAP-012): a multicentre, randomised, double-blind, phase 3 study. The Lancet. 2025. DOI: 10.1016/S0140-6736(24)02575-3.