Redacción Farmacosalud.com
La enfermedad quística renal o poliquistosis renal, que puede afectar tanto a niños como a adultos, viene a suponer entre un 8-10% de los pacientes que han llegado al llamado estadio 5 y por ello han requerido tratamiento sustitutivo (diálisis). “Hasta fechas muy recientes no disponíamos de medidas eficaces para esta enfermedad hereditaria”, pero “ahora empieza a haber cosas, hay varios ensayos clínicos con sustancias nuevas”, revela el doctor Alberto Martínez Castelao, médico de Nefrología del Hospital Universitario de Bellvitge (l’Hospitalet de Llobregat, en Barcelona). El experto se refiere a las pruebas con inhibidores de la sustancia denominada mammalian Target of Rapamycin (mTOR) y las sustancias antagonistas de la vasopresina, “que nos están dando pistas de que se puede tratar a estos pacientes en fases precoces para intentar que no crezcan sus quistes”. Martínez Castelao advierte del carácter hereditario de la poliquistosis renal y recuerda la importancia de detectar la patología en sus fases iniciales, ya que “si los quistes han crecido, de momento no se puede hacer nada”. A juicio del nefrólogo, “por primera vez podemos decir que tenemos instrumentos para que, probablemente, podamos frenar el avance de la poliquistosis renal”.
El doctor ha dejado de presidir la Sociedad Española de Nefrología (SEN) una vez finalizado el XLIV Congreso Nacional de esta institución médica, reunión que se ha celebrado recientemente en Barcelona. A manera de conclusiones de la cita congresual, el nefrólogo ha hablado de “cosas muy prometedoras”, como la “regeneración de células renales, que puede significar la mejora y la prevención de enfermedades renales en un futuro”. Otros temas destacados han sido la relación entre la microbiota intestinal y las toxinas urémicas, el manejo del colesterol alto en los enfermos renales y el manejo de las alteraciones del metabolismo óseo y mineral, así como la elaboración de nuevos medicamentos que próximamente pueden interferir en la Glomerulonefritis (inflamaciones específicas del riñón), y la implantación de mejoras en las terapias sustitutivas (hemodiálisis y diálisis peritoneal). En el siguiente vídeo, el ex presidente de la SEN expone con datos en la mano los avances registrados en diálisis peritoneal, tratamiento que puede realizarse en el domicilio del paciente.
Prevenir la enfermedad renal crónica entre los grupos de riesgo
La prevención de la enfermedad renal crónica ha ocupado buena parte de la agenda del Congreso. Para Martínez Castelao, “prevenir la enfermedad renal crónica es detectarla a tiempo”. De hecho, la SEN y 9 sociedades científicas más han consensuado un documento encaminado a buscar la manera de prevenir esta afección y, en este sentido, detectarla en los grupos de riesgo. El perfil de esos pacientes se corresponde con diabéticos, hipertensos, personas que hayan tenido un evento cardiovascular, familiares de personas que estén en diálisis o que tengan enfermedades renales, y personas mayores por encima de 65 o 70 años. “La detección en estos grupos de riesgo en fundamental porque si diagnosticamos la enfermedad, y eso es muy fácil -muestra de sangre y de orina-, a partir de ahí hay que ponerle freno con el fin de que no progrese hasta las etapas finales; ese es el mensaje más importante de este congreso”, afirma.
En declaraciones a www.farmacosalud.com en el marco de la reunión de la SEN, el ex presidente de los nefrólogos españoles también ha abordado los progresos registrados en el ámbito de los trasplantes de riñón. En 2013, en España se practicaron 2.552, “la cifra más alta” obtenida hasta el momento, dice el doctor. “A pesar de la circunstancias adversas económicas y de los recortes en sanidad, seguimos trasplantando cada vez más; y un dato muy importante: se han trasplantado más de 300 pacientes antes de llegar a diálisis, lo que llamamos el trasplante renal adelantado, que ya supone un 5,2% de los pacientes que llegan a esa etapa o estadio 5”, agrega.
Avances en inmunosupresión
En el Congreso de la SEN, asimismo, se ha hablado de avances en inmunosupresión del paciente trasplantado renal, “nuevos fármacos que pueden mejorar la evolución” de esa transferencia de órganos “y que nos van a ayudar a disminuir las pérdidas del injerto renal por rechazo agudo, que ya es casi residual (un 10% de pacientes), o el rechazo crónico o humoral”, señala Martínez Castelao. Frenar ese tipo de resistencias del organismo evitará que esos enfermos “vuelvan otra vez a necesitar diálisis”, remarca.