Redacción Farmacosalud.com
La compañía Mikrobiomik ha presentado los resultados de su ensayo fase 3 con MBK-01, el primer medicamento biológico para el tratamiento de la infección primaria y recurrente por Clostridium difficile (CD). La infección por Clostridium difficile (ICD) es la causa más frecuente de diarrea infecciosa en pacientes hospitalizados, afectando a unas 124.000 personas cada año en Europa1. Según las conclusiones del ensayo ICD-01, MBK-01 ha demostrado ser un 15% más efectivo en comparación con el tratamiento antibiótico fidaxomicina en la población general.
Además, se ha observado que, por cada recurrencia en el grupo de MBK-01, hay al menos dos recurrencias en el grupo tratado con fidaxomicina. En los casos tratados con MBK-01 sin haber recibido antibióticos previos, se ha mostrado un beneficio clínico aun mayor, lo que podría reducir la necesidad de suministrar antibióticos a este tipo de pacientes. Aunque las guías actuales recomiendan el trasplante de microbiota fecal (TMF) sólo para episodios recurrentes de ICD (rICD), el uso de TMF se justifica por la alta probabilidad de recurrencia con más episodios y tratamientos con antibióticos. Esto concuerda con la etiología de la ICD recurrente y el mecanismo de acción del TMF, que restaura la homeostasis de la microbiota.
Fácil administración
Además, MBK-01 es fácil de administrar, ya que se presenta en cápsulas orales de 250 mg y sólo requiere una única dosis de 4 cápsulas. “MBK-01 es la primera aproximación de tratamiento no antibiótico en la infección por Clostridium difficile y tenemos previsto iniciar su comercialización en el primer semestre de 2025.”, explica Juan Basterra, consejero delegado de Mikrobiomik. “Estamos convencidos de que aportará un importante valor añadido tanto a los pacientes como a los sistemas nacionales de salud, puesto que hemos demostrado una menor recurrencia de la infección y, por tanto, una reducción de los tiempos de estancia hospitalaria, el coste principal que suponen los pacientes con ICD para el sistema sanitario”, agrega.
“Los resultados del ensayo constatan el beneficio que MBK-01 puede aportar a la calidad de vida de los pacientes afectados por una enfermedad limitante como la ICD. En España, el fármaco está incluido en el programa de uso compasivo de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), del que ya se han beneficiado más de 40 pacientes”, explica el Dr. Javier Cobo, jefe de sección del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal (Madrid).
El objetivo del ensayo fue evaluar la eficacia y seguridad de MBK-01 en comparación con fidaxomicina en pacientes con ICD 8 semanas después del inicio del tratamiento, siendo el objetivo principal la ausencia de recidivas dentro de dicho periodo.
Reducción a la mitad de los casos de recurrencia
En este estudio, considerando la población general, el análisis de probabilidad de recurrencia muestra la no inferioridad de MBK-01 cuando se compara con la fidaxomicina. Concretamente, el 10,81% de los pacientes tratados con MBK-01 experimentaron recurrencia de ICD en comparación con el 22,5% de los tratados con fidaxomicina. Por subgrupos, la tasa de recurrencia para MBK-01 fue significativamente menor que para fidaxomicina en casos de rICD, con sólo un 18,75% en comparación con el 61,54% para fidaxomicina, lo que posiciona a MBK-01 como una alternativa terapéutica superior, informa Mikrobiomik.
Si se tiene en cuenta el tratamiento de casos primarios de ICD con TMF, el estudio devela un aspecto innovador y precursor, ya que demuestra la no inferioridad de MBK-01 frente al antibiótico fidaxomicina y alineándose con estudios previos. Así, la probabilidad de recurrencia fue del 4,76% para MBK-01 y del 3,7% para fidaxomicina en los casos primarios. En el análisis del uso previo de terapia antibiótica, los datos sugieren mayor probabilidad de recurrencia en ambos grupos de tratamiento a medida que aumenta el número de líneas de tratamiento antibiótico, lo cual es más significativo en el caso de fidaxomicina que en el de MBK-01.
En ambos casos, los resultados han sido excelentes, puesto que en pacientes con primeros episodios de infección por Clostridium difficile, y en aquellos sin pretratamiento antibiótico, se ha demostrado la no inferioridad de MBK-01. En el caso de ICD recurrente, la eficacia de MBK-01 fue superior a la de fidaxomicina. En concreto, en los pacientes con primeros episodios de infección por ICD, el 10,81% de los sujetos tratados con MBK-01 presentaron recurrencia frente al 22,5% de los tratados con fidaxomicina. MBK-01 demostró no inferioridad a la fidaxomicina tanto en primeros episodios de ICD (p=0.013) como en los pacientes sin tratamiento antibiótico previo frente a ICD (p<0.01). En este subgrupo, MBK-01 fue 100% efectivo frente al 80% de la fidaxomicina.
Un tratamiento bien tolerado
La diarrea fue el evento adverso más común en ambos grupos de tratamiento, si bien MBK-01 mostró menos eventos adversos en general frente a fidaxomicina (46.35% vs. 53.65%), con una baja incidencia de efectos secundarios directamente relacionados con el tratamiento en ambos grupos. Por lo tanto, MBK-01 es un tratamiento seguro y bien tolerado.
El ensayo de fase 3 de Mikrobiomik fue un estudio multicéntrico, controlado, abierto, paralelo y aleatorizado en una cohorte de pacientes con ICD, tanto con episodios primarios como recurrentes. Han participado 92 pacientes de 21 centros en España. De estos, 45 fueron asignadas al grupo que recibió MBK-01 y 47 al grupo que recibió fidaxomicina. En concreto, 23 y 25 sujetos de cada grupo completaron el estudio. El perfil de paciente incluía a personas adultas con ICD confirmada, diarrea (al menos tres deposiciones cada 24 horas) y detección de las toxinas A y/o B de CD. Entre los criterios de exclusión se encontraban individuos con trasplante de microbiota fecal previo, trasplante de órganos (excepto aquellos con buena función del órgano y con trasplante hace más de 2 años), sujetos con menos de 500 neutrófilos/μL y mujeres embarazadas o en fase de lactancia, entre otros.
El grupo experimental recibió una dosis única de 4 cápsulas orales que contenían microbiota fecal liofilizada heteróloga (MBK-01, ≥2.1-2.5 x10^11 microorganismos), mientras que el grupo control recibió fidaxomicina oral, 200 mg/12 horas durante 10 días. Se permitió el uso de vancomicina durante 3-5 días previo a la aleatorización. Las personas que habían recibido tratamiento antibiótico previo para la ICD se sometieron a un período de ‘lavado’ sin antibióticos de entre 24 y 48 horas.
Referencias
1. Asha NJ, Tompkins D, Wilcox MH. Comparative analysis of prevalence, risk factors, and molecular epidemiology of antibiotic-associated diarrhea due to Clostridium difficile, Clostridium perfringens, and Staphylococcus aureus. J Clin Microbiol 2006;44(8):2785-91