Redacción Farmacosalud.com
El médico internista tiene la capacidad de abordar de forma integral al paciente, pero sigue habiendo grupos minoritarios con necesidades concretas de atención, como el de las personas transgénero, a los que es preciso dar respuesta. Para cubrir sus necesidades médicas y asistenciales, el facultativo internista necesita formación en el paciente transgénero tanto estrictamente desde el punto de vista médico, como también desde el prisma de creación del vínculo médico-paciente. La población transgénero forma parte de este colectivo y disminuir las inseguridades del médico internista en la atención y trato a estas personas motiva la celebración de la mesa redonda ‘Transgénero, un nuevo perfil de paciente’, una de las primeras actividades organizadas en el marco del 41 Congreso de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) Virtual.
Así lo explica una de las moderadoras de la mesa, la Dra. Gemma Ortiz, del Grupo de Formación de la SEMI. La sesión también ha contado con el Dr. Daniel Martín, del mismo grupo de SEMI; la Dra. Rosa Almirall, ginecóloga y directora del Servicio de Atención a la Salud Sexual y Reproductiva en Trànsit, un servicio gratuito de información y asesoramiento de la salud para las personas transgénero, del Institut Català de la Salut, en Barcelona, y Daniela Fernández, paciente que ha representado al colectivo transgénero.
Personas que se sienten atrapadas en un cuerpo del otro sexo
Se ha constatado que existe una necesidad de formar al internista de hoy en día en la atención al paciente de perfil transgénero, a pesar de que existe poca evidencia respecto a estos pacientes. Aunque cada vez más personas que se sienten atrapadas en un cuerpo del otro sexo deciden cambiar de género, hay pocos casos y, por lo tanto, es difícil encontrar voluntarios para hacer estudios clínicos relativos a sus problemas médicos. “Actualmente, apenas existe literatura sobre estos pacientes y, probablemente, por esta razón suponen un reto. Precisamente por esta falta de evidencia científica, hemos pensado que era necesario proporcionar a los residentes de medicina interna algunos conocimientos básicos que puedan ayudarles a mejorar la práctica diaria. A lo largo de su carrera se pueden cruzar con varios de estos pacientes”, comenta la Dra. Ortiz.
La atención al paciente de perfil transgénero tiene un doble reto: el establecimiento de una buena relación médico-paciente y aspectos relacionados con la atención médica. En referencia al vínculo médico-paciente, la Dra. Ortiz destaca que el internista ve en pocas ocasiones a personas de este perfil, a las que es más probable que visite un médico de cabecera o de urgencias. Por ello, la comunicación del médico internista con el paciente trans puede no resultar sencilla. Puede tener dudas de cómo dirigirse al individuo en el primer encuentro, como hombre o mujer, y un tropiezo en este comienzo puede derivar en que no se establezca un buen vínculo inicial y que no haya una continuidad en la relación.
A pesar de estas dificultades en la práctica asistencial, el papel del internista en el manejo del paciente transgénero es el mismo que el de la población general de la misma edad. Sin embargo, debe tener en cuenta ciertos factores, más allá de los que tendría, dado que son sujetos con tratamientos complejos y puede haber interacciones con sus tratamientos hormonales más allá de las que a menudo se tienen en cuenta”, añade Ortiz.
Cirugías importantes y complejas, y tratamientos hormonales de larga duración
Los pacientes transgénero, para realizar su cambio de sexo, no solo tienen que someterse a cirugías importantes y complejas, sino también tomar tratamientos hormonales de larga duración. Algunos de los problemas médicos con que pueden encontrarse los internistas u otros especialistas a la hora de atenderlos es que estas personas sufran interacciones medicamentosas con los tratamientos hormonales que tienen que recibir. En la historia clínica es importante que quede muy bien documentado qué tratamientos hormonales están tomando a fin de evitar estos episodios.
Asimismo, la retirada de estos tratamientos hormonales puede influir en el desarrollo de enfermedades tromboembólicas, bien una tromboembolia pulmonar (TEP) o una trombosis venosa profunda (TPV), ictus o infartos, debido a la pérdida de la protección estrogénica. Esta protección la tienen las mujeres de forma natural hasta la menopausia, por lo que es posible que las mujeres trans que provienen del sexo masculino tengan más riesgo de enfermedades cardiovasculares precoces. Otra posibilidad es que se presenten tipos de neoplasias ligadas al género, como mama o próstata, en pacientes en los que no se piensa que puedan tenerlas debido al cambio de sexo.
Los pacientes transgénero, debido a la gran transformación que deben realizar para sentirse bien consigo mismas, también pueden padecer patología psiquiátrica de tipo ansioso-depresiva. Estas personas deben realizar un proceso personal de aceptación y llegar al punto de decidir si quieren transformar su cuerpo mediante cirugías que son complejas y dolorosas. Además de trabajar su autoaceptación, deben hacer entender a su entorno durante su niñez y adolescencia cómo se sienten, ya que no se identifican con el cuerpo en el que han nacido, por lo que necesitan un cambio de sexo. Afrontar esta autoaceptación y la del entorno no siempre es fácil: a menudo topan con la oposición de sus seres queridos y amistades y todo ello puede derivar en este tipo de patología psiquiátrica.
Atención integral a las personas transgénero
Actualmente, existen modelos de asistencia integral dedicados a la promoción de la salud de las personas transgénero. Trànsit es uno de estos recursos, implementados para atenderlas. “En el momento en que se crean estos modelos, estos dispositivos asistenciales aumentan el conocimiento y, de hecho, el paciente trans suele confiar en estos equipamientos y en sus profesionales y se están convirtiendo en la puerta de entrada al sistema sanitario para estas personas”, explica la Dra. La contrapartida es que “debemos comprender que el hecho de que los profesionales sanitarios en general no tengan suficientes conocimientos sobre este colectivo no es excusa para que pueda quedar desatendido. Por ello, deberíamos preguntarnos qué necesidades tienen los modelos como Trànsit para seguir creciendo y para optimizar la asistencia a este tipo de pacientes”, añade.
El 41º Congreso Nacional de SEMI Virtual (23-27 de noviembre) aborda temas como la atención médica a las personas transgénero, casos de éxito en COVID-19 (Hospital IFEMA y el Modelo Uruguayo), novedades respecto al uso de anticoagulantes orales de acción directa (ACODs), bacterias resistentes y nuevos antibióticos, patología vascular ocular, tratamiento inmunomodulador en COVID-19, la relación entre el riesgo vascular y la Enfermedad Tromboembólica Venosa (ETV) y la COVID-19, la obesidad como enfermedad multisistémica, la coordinación y la transición asistencial en pacientes con necesidades paliativas, la importancia de la gestión clínica y las nuevas tecnologías, los retos para la Medicina Interna en la Asistencia de las Personas con Altas Necesidades de Atención, las decisiones terapéuticas de la Insuficiencia Cardíaca sin respuesta en las Guías Clínicas, la atención paliativa en el paciente COVID-19, y las consecuencias negativas del consumo intensivo de alcohol o la práctica del llamado binge drinking.
También se analizarán nuevas tendencias nutricionales, novedades en el manejo de la insuficiencia cardíaca, EPOC u osteoporosis, entre otros temas relacionados con la actualización en el abordaje y nuevas dianas diagnósticas y terapéuticas respecto a múltiples patologías infecciosas, minoritarias, autoinmunes, crónicas y/o multisistémicas desde la óptica de Medicina Interna. Asimismo, tienen una presencia destacada, en el área eHealth, los temas sobre big data médico, telemedicina o inteligencia artificial en el ámbito clínico.
También se presentarán las principales investigaciones y datos del Registro Clínico SEMI-COVID-19, uno de los mayores del mundo, un protocolo de seguimiento de pacientes COVID-19 de SEMI y SEMERGEN y un consenso sobre hiperpotasemia crónica. Se contará, además, con la participación de expertos internacionales y con una conferencia a cargo del director y fundador de la ONG Open Arms, Óscar Camps.