Redacción Farmacosalud.com
Varios hospitales de campaña y hoteles y pabellones medicalizados van poniéndose en marcha por toda la geografía española para poder atender con las máximas garantías posibles el ‘pico’ o expansión máxima del coronavirus, que podría estar muy cerca de alcanzarse e incluso ya podría haberse alcanzado en España, según estimaciones del Gobierno. El último centro hospitalario que ha salido 'fuera' para ampliar su asistencia a los afectados por la pandemia del COVID-19 ha sido el Hospital Clínic de Barcelona, que ha instalado equipamientos y personal en el Hotel Plaza de la capital catalana.
Los centros hospitalarios, en especial sus Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), se han visto desbordados en los últimos días por una avalancha de casos de COVID-19 que requerían, con carácter de urgencia, atención médica especializada.
Según datos del Ministerio de Sanidad, en España por ahora se han registrado más de 102.000 casos de coronavirus y han fallecido por esta enfermedad más de 9.000 personas. Cerca de 23.000 infectados se han recuperado y unos 51.000 permanecen hospitalizados.
Prohibidos los velatorios y restringidas las ceremonias fúnebres
Por otra parte, el Ministerio de Sanidad ha prohibido todos los velatorios, independientemente de la causa del fallecimiento y de si se celebran en instalaciones públicas o privadas, incluido los domicilios particulares, para limitar la propagación y el contagio por el COVID-19. Así lo recoge la orden ministerial publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que especifica que en el caso de fallecidos por COVID-19 no se podrán realizar prácticas de tanatoestética, intervenciones de tanatopraxia, ni intervenciones por motivos religiosos que impliquen procedimientos invasivos en el cadáver.
La norma recoge otras medidas excepcionales como la restricción de las ceremonias fúnebres. En este sentido, se pospondrá la celebración de cultos religiosos o ceremonias civiles fúnebres hasta que finalice el estado de alarma. No obstante, en el enterramiento o despedida para la cremación de la persona fallecida se permitirá la asistencia de tres familiares o allegados, además, en su caso, de la persona asimilada de la confesión respectiva para la práctica de los ritos funerarios de despedida del difunto. Estas personas deberán respetar siempre la distancia de uno a dos metros entre ellas.