Redacción Farmacosalud.com
Por fin ha llegado a España la técnica ASC (Anterior Scoliosis Correction), un procedimiento que permite tratar la escoliosis idiopática usando una cuerda como método de corrección de la desviación de la columna, lo que mejora la calidad de vida de los pacientes con respecto al método clásico, que se sirve de unas barras fijas para lograr tal remodelación. Con la ASC se actúa como con los brackets en los dientes, es decir, se corrige sin fijar, pero con la diferencia de que el cable para la escoliosis queda colocado de manera permanente, mientras que en el caso del sistema odontológico el aparato se quita una vez ha realizado su función de recolocar las piezas dentales en la posición adecuada.
El 10% de los adolescentes presentan escoliosis idiopática, una curvatura de la columna vertebral sin causa conocida. Aproximadamente un 1% de ellos (mayoritariamente mujeres) con escoliosis idiopática de más de 45 grados se operan para corregir esa desviación. Así las cosas, el Hospital Universitario Dexeus–Grupo Quirónsalud (Barcelona) ha realizado la primera intervención en España para corregir la escoliosis idiopática adolescente mediante el procedimiento ASC, que permite mantener la movilidad de la columna mientras se va corrigiendo el grado de la curva, con lo que la persona intervenida puede realizar actividad física y deporte a las pocas semanas de la operación. Teóricamente, y dependiendo del grado de curvatura de la desviación de columna, la intervención quirúrgica dura entre 4 y 6 horas.
El sistema ASC se realiza por vía torácica
La técnica tradicional para corregir la escoliosis idiopática se basa en colocar tornillos en las vértebras afectadas y dos barras que fijan la columna en la posición correcta, pero imposibilitando el movimiento de la misma y limitando la capacidad en la vida diaria de los pacientes. Sin embargo, el sistema ASC se realiza por vía torácica y permite colocar la mitad de los tornillos que con la técnica tradicional para corregir las vértebras afectadas. Además, con el método ASC los tornillos se unen mediante una cuerda y la columna no pierde flexibilidad.
De entrada, el paciente que se beneficia de la técnica ASC puede volver a hacer actividad física al cabo de tres semanas y deporte después de seis semanas tras la intervención. “Si son deportistas de alto rendimiento empiezan a ponerse en forma a las 6 semanas, y los dejamos ya volver al deporte competitivo a las 8-10 semanas”, remarca a través de www.farmacosalud.com el doctor Juan Carlos Rodríguez Olaverri, cirujano traumatológico pediátrico especializado en columna que ha dirigido la intervención pionera en España.
Cabe destacar que antes de una operación como esta, una persona con escoliosis puede practicar deporte de alta exigencia, siendo el grado de curvatura de la columna un factor que influye en el ejercicio de dicha actividad. “Sabemos que hay que operar cuando los pacientes tienen 40-45 grados. Cuando tienen una curva de más de 60 grados, si tú le haces una prueba de capacidad pulmonar ésta estará disminuida, aunque clínicamente el paciente no sienta nada. Cuando hay más de 90 grados puede aumentar la morbilidad del afectado”, subraya Rodríguez Olaverri.
Todo empezó con el procedimiento Vertebral Body Thetering
El método ASC tiene ya varios años de historia, dado que se remonta al año 2000. Se trata de una técnica que viene derivada del procedimiento conocido como Vertebral Body Thetering, que también corrige sin fusionar la columna pero que está limitado a curvas de entre 40 y 60 grados y a niños aún en crecimiento. El equipo de los Drs. Betz, Antonacci y Cuddihy del Institute for Spine & Scoliosis de Nueva Jersey modificaron el sistema, de manera que la ASC está indicada para un rango de edad desde los 10 años hasta adultos, con curvas torácicas, torácico lumbares o lumbares de entre 30 y 80 grados. De hecho, “se ha operado a pacientes de 45 o 50 años de edad”, certifica el doctor Rodríguez Olaverri.
La paciente intervenida por el equipo del doctor Rodríguez Olaverri es una niña de 12 años de edad que presentaba una desviación de columna de 65 grados. Tras la intervención, la curva ha disminuido a 12 grados, con una previsión de corrección hasta los 7 u 8 grados a través del crecimiento. “Con el tratamiento se busca corregir la curva y que ésta no vaya a más -afirma el cirujano-. Como la niña tiene 12 años, crecerá hasta los 18 y se llegará a mejorar la curva unos 7-8 grados finales. La diferencia entre los brackets dentales y este tipo de cirugía es que los brackets se quitan, y esto (el cable) no lo quitamos, lo dejamos ahí puesto. Lo que sí hemos visto es que en pacientes en los que se ha roto la cuerda, a los dos años de seguimiento la curva se ha quedado igual, no ha avanzado, y no hemos tenido que entrar a operar”. Por ahora, con la técnica ASC no se puede llegar a lograr una columna totalmente recta, como en una persona sin escoliosis, puesto que “ese no es el propósito de esta cirugía… nosotros operamos para corregir todo lo que podamos y sin que haya lesión medular, y luego lo importante es que la desviación no vaya a más”, puntualiza.
Con el método ASC. el anestesista tiene que colapsar el pulmón
Por otro lado, “el nuevo abordaje por vía torácica de la cirugía correctora de escoliosis comporta una modificación sustancial de la técnica anestésica clásica, implicando mayor complejidad. Sin embargo, el postoperatorio resulta más corto, menos doloroso, menos agresivo y con menor riesgo de sangrado”, explica el doctor Enric Monclús, responsable de la Unidad de Anestesiología pediátrica del Hospital Universitario Dexeus.
Según el doctor Rodríguez Olaverri, la vía torácica implica que “el anestesista tenga que colapsar el pulmón por donde se va a entrar con el fin de poder llegar a la columna vertebral, pero se cuenta con la ventaja -respecto a la técnica clásica- de que la pérdida sanguínea es mínima, casi no hay que poner sangre al paciente. Luego, como no entramos por la espalda, no cortamos ningún músculo, y el riesgo de lesión medular es mucho menor en comparación con el sistema tradicional. ¿Por qué? Pues porque con el método clásico tú pones tornillos a cada lado de la médula, mientras que con la otra técnica el tornillo se pone por delante de la médula, no va al lado de ésta”. En términos anestésicos, la técnica ASC es más compleja, pero en términos quirúrgicos es mucho menos agresiva. “Además, el anestesista no tiene ningún problema de corrección de la tensión arterial, porque el paciente casi no pierde sangre”, asegura el experto.
Estricto control hemodinámico durante toda la intervención
La prevención de la lesión medular es otro de los puntos clave de la operación: “Se logra a través de un estricto control hemodinámico durante toda la intervención a través de técnicas de control y minimización del sangrado y asegurando la irrigación medular”, establece Monclús. “Además, se realizan estudios neurofisiológicos intraoperatorios para evaluar de forma continuada la función medular”, señala el facultativo.
Finalmente, el doctor Rodríguez Olaverri comenta que, por ahora, la técnica ASC está indicada para la escoliosis idiopática y no para el abordaje de otras malformaciones, si bien “eso no significa que dentro de 4-5 años se cambie y haya algo mejor que la cuerda, o que con la cuerda se pueda hacer más cirugía. La ASC se usa cuando tras la escoliosis no hay ninguna enfermedad de base importante, de manera que su uso todavía no está estudiado en pacientes que presenten una enfermedad neuromuscular… por ejemplo, una atrofia muscular espinal”.