Redacción Farmacosalud.com
La compañía biotecnológica Celgene ha presentado la nueva indicación de REVLIMID® (lenalidomida), primera y única terapia de mantenimiento para pacientes con Mieloma Múltiple de nuevo diagnóstico que han sido sometidos previamente a un Trasplante Autólogo de Progenitores Hematopoyéticos (TAPH). La indicación está sujeta a financiación pública después de que el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad así lo haya acordado. “Los resultados de los estudios con lenalidomida como tratamiento de mantenimiento muestran una prolongación de entre un año y medio y dos años y medio en supervivencia libre de enfermedad (tiempo hasta la recaída), junto a un aumento de más de dos años en la supervivencia total”, comenta el doctor Jesús F. San Miguel, director Médico de la Clínica Universidad de Navarra.
En su opinión, este nuevo tratamiento supone “una gran ventaja para los pacientes, y de hecho esta posibilidad de mantenimiento se ha convertido en un nuevo estándar en el tratamiento del Mieloma Múltiple, ya que el objetivo debe ser erradicar la enfermedad mínima residual (EMR), y esto pasa por utilizar las combinaciones más eficaces posibles en todos los pacientes, incluyendo inducción, trasplante, consolidación y mantenimiento”.

Autor/a: Matt Trostle
Fuente: Flickr / Creative Commons
2.000 nuevos casos de Mieloma Múltiple en España cada año
Cada año se diagnostican unos 2.000 nuevos casos de Mieloma Múltiple en España, representando el 1% de todos los nuevos casos de cáncer y el 10% de los denominados como cánceres de la sangre, lo que la convierte en la segunda neoplasia hematológica más frecuente en territorio español. Se trata de un tipo de cáncer recurrente y grave, que se caracteriza por la proliferación tumoral y la supresión del sistema inmune[1]. Se considera una enfermedad rara y potencialmente mortal, cuya edad media de diagnóstico oscila entre los 65 y los 70 años. Los pacientes menores de 65 años, con buen estado de salud y en buena condición física, suelen considerarse candidatos al TAPH[2].
Para los pacientes recién diagnosticados con Mieloma Múltiple y candidatos a TAPH, los objetivos clave del tratamiento son retrasar la progresión de la enfermedad y, en última instancia, lograr un control en el largo plazo sobre el Mieloma Múltiple[3]. Estos pacientes suelen recibir terapia de inducción y dosis altas de quimioterapia con melfalán seguido del TAPH. Esta estrategia de tratamiento ha sido el estándar terapéutico vigente durante más de 20 años[4]. Teniendo en cuenta que más de la mitad de los pacientes recaen, dependiendo de los tratamientos de inducción, entre 2 y 5 años después del TAPH[5-7], la aprobación de esta nueva terapia de mantenimiento representa un avance importante, ya que retrasa la progresión de la enfermedad.
“Hemos pasado de no disponer de tratamiento a conseguir largas remisiones”
“Los pacientes con Mieloma Múltiple estamos esperanzados a la luz de los avances conseguidos en la última década: hemos pasado de no disponer de tratamiento a conseguir terapias que permiten largas remisiones, como es este caso”, apunta Teresa Regueiro, presidenta de la Comunidad Española de Pacientes con Mieloma Múltiple. Por su parte, el doctor Juan José Lahuerta, jefe de la Sección Clínica del Servicio de Hematología del Hospital 12 de Octubre de Madrid, señala que “la introducción de esta nueva opción de tratamiento era algo muy esperado y supone, sin duda, un gran avance en el abordaje del Mieloma Múltiple. Algunos, quizás muchos, de los pacientes que no están en remisión completa o que mantienen EMR positiva lograrán profundizar su respuesta antitumoral gracias al mantenimiento”.

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Gentileza del Centro Nacional de Microbiología. Instituto de Salud Carlos III de Madrid
La doctora María Victoria Mateos, coordinadora de la Unidad de Mieloma Múltiple del Hospital Universitario de Salamanca, incide en que “las mejores opciones de tratamiento deben utilizarse en la primeria línea, en el momento de nuevo diagnóstico, pues es cuando se va a obtener un mayor beneficio, con un abordaje continuo para conseguir respuestas profundas y duraderas que puedan llegar a plantear la curación de algunos pacientes con Mieloma Múltiple”. “Precisamente, esta nueva indicación de mantenimiento supone que los pacientes puedan prolongar la duración de la respuesta alcanzada tras el trasplante de una manera muy manifiesta, gracias a un tratamiento que, por ser de administración oral y con un perfil de seguridad aceptable, permite que puedan continuar con su actividad habitual, sin que interfiera de una manera significativa en la calidad de vida”, indica la doctora Mateos. Para Regueiro, esta es otra de las ventajas de la terapia de mantenimiento, dado que “permite una buena calidad de vida, habiendo pacientes que continúan su actividad de forma óptima aun estando bajo tratamiento”.
La aprobación de lenalidomida como tratamiento de mantenimiento amplía y refuerza las indicaciones actuales que la posicionan como terapia de combinación esencial para el tratamiento de pacientes con Mieloma Múltiple de nuevo diagnóstico no candidatos a trasplante o que hayan recibido, al menos, una terapia previa.
Sobre CALGB 100104 y IFM 2005-02
El CALGB 100104 es un ensayo fase III, aleatorizado, controlado, doble ciego y multicéntrico, desarrollado en 47 centros de Estados Unidos, que ha incluido 460 pacientes con Mieloma Múltiple de nuevo diagnóstico - de entre 18 y 70 años de edad - que alcanzaron al menos un status de enfermedad estable 100 días después de someterse al TAPH. Estos pacientes fueron aleatorizados a recibir terapia de mantenimiento con lenalidomida (a dosis de 10 mg/día durante 3 meses y posteriormente, si son bien tolerados, podía subirse a 15 mg/día) o placebo hasta la progresión de la enfermedad, la aparición de efectos adversos intolerables o muerte.
El IFM 2005-02 es un ensayo fase III controlado, doble ciego y multicéntrico con placebo llevado a cabo en 77 centros repartidos a lo largo de 3 países europeos. Se incluyeron 614 pacientes menores de 65 años con Mieloma Múltiple de nuevo diagnóstico, sin signos de progresión de la enfermedad en un plazo de 6 meses tras haber sido sometidos a un TAPH. Todos los pacientes recibieron 2 ciclos de consolidación con lenalidomida en monoterapia a dosis de 25 mg/día durante 21 días en ciclos de 28 días. Tras la consolidación, fueron aleatorizados a recibir lenalidomida a dosis de 10 mg/día durante 3 meses, y posteriormente, si son bien tolerados, podía incrementarse a 15 mg/día. El pronóstico de estos pacientes fue comparado con otra población de pacientes que recibieron placebo, en ambos casos, hasta la progresión de la enfermedad, la aparición de efectos adversos intolerables o la muerte.

(de izq. a dcha): Doctor Jesús San Miguel, director de Medicina Clínica y Traslacional de la Universidad de Navarra; Doctora Luisa Rodríguez Pose, directora médico de Celgene; Teresa Regueiro, presidente de la Comunidad Española de Pacientes con Mieloma Múltiple, y Doctor Juan José Lahuerta, jefe de sección del servicio de hematología del Hospital 12 de Octubre de Madrid
Fuente: Celgene / Planner Media
Sobre lenalidomida
Lenalidomida está autorizada en combinación con dexametasona en Europa, Estados Unidos, Japón y en otros 25 países para el tratamiento de pacientes adultos con Mieloma Múltiple que no han sido tratados previamente para esta enfermedad y que no son candidatos a trasplante. Lenalidomida también está aprobado en combinación con dexametasona para el tratamiento de pacientes con Mieloma Múltiple que han recibido al menos un tratamiento previo en casi 70 países, entre ellos Europa, América, Oriente Medio y Asia. Lenalidomida en monoterapia está indicada para el tratamiento de pacientes adultos con anemia dependiente de transfusiones debida a síndromes mielodisplásicos (SMD) de riesgo bajo o intermedio-1 asociados a una anomalía citogenética de deleción 5q aislada cuando otras opciones terapéuticas son insuficientes o inadecuadas.
Además, lenalidomida está aprobado en Europa y Estados Unidos para el tratamiento de pacientes con linfoma de células del manto (LCM) que han sufrido una recaída o cuya enfermedad ha progresado después de dos terapias previas, una de las cuales incluyó bortezomib. En Suiza, lenalidomida está indicado para el tratamiento de pacientes con LMC recidivante o refractario después de un tratamiento previo que incluía bortezomib y quimioterapia con rituximab.
Referencias
1. Palumbo A, et al. N Engl J Med. 2011;364:1046–1060
2. Moreau P, et al. Ann Oncol. 2013; 24 (Suppl 6): vi133-vi137
3. Stewart AK, et al. Blood. 2009;114:5436-5443
4. Bird JM, et al. Br J Haematol. 2011;154:32-75
5. Attal M, et al. Blood. 2006 Nov 15;108(10):3289-94
6. Child JA, et al. N Engl J Med. 2003; 348:1875-1883
7. Rosiñol L, et al. Blood. 2012 Aug 23;120(8):1589-96