Redacción Farmacosalud.com
El Dr. Juan Antonio Trigueros, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria en el Centro de Salud Menasalbas (Menasalbas, en Toledo), destacó la importancia de complementar la consulta telefónica a un paciente asmático mediante la realización de una videoconsulta, ya que con esta herramienta tecnológica puede obtenerse información muy valiosa, como el hecho de descubrir, por ejemplo, si el enfermo comete o no errores a la hora de usar un inhalador. Trigueros participó en un simposio formativo sobre asma en Atención Primaria (AP) auspiciado por la cátedra INSPIRA-UAB y FUCAP, emitido por www.farmacosalud.com, patrocinado por Pfizer y moderado por el Dr. Vicente Plaza, director de la Cátedra INSPIRA-UAB. En la sesión también intervino el Dr. Antonio Hidalgo, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria en el Centro de Salud de Lucena (Lucena, en Córdoba).
1. ¿Cómo diagnostico asma durante la pandemia?
Con motivo de la pandemia por COVID-19, las principales guías y sociedades médicas han advertido del peligro que supone la generación de aerosoles cuando se establece un diagnóstico funcional de asma mediante la realización de espirometrías, ya que existe un riesgo de propagación de la enfermedad infecciosa derivada del coronavirus. “Por lo tanto, no es que no se puedan hacer espirometrías, pero sí que tenemos una advertencia muy precisa: recurrir a ellas lo menos posible”, matizó el Dr. Juan Antonio Trigueros.
Las áreas de valoración por las que transitar para poder llevar a cabo un diagnóstico de asma en Atención Primaria (AP) pasan por la valoración clínica basada en los síntomas-guía de la patología asmática (disnea, presión torácica, tos), y signos clínicos como sibilancias. También se pueden analizar los factores desencadenantes (infecciones, contacto con alérgenos y humo, generación de emociones, estacionalidad, ejercicio, etc.) y tener en cuenta las comorbilidades, como rinosinusitis, dermatitis o atopia, que “se correlacionan muy bien y aumentan la probabilidad de padecer asma”, recordó el Dr. Trigueros. Según el experto, hay tres áreas más que permiten realizar un diagnóstico “de sospecha muy importante para empezar a resolver la situación” con el fin de que, cuando la pandemia haya perdido fuerza, “podamos realizar pruebas funcionales con mayor facilidad en los centros de salud”:
2. ¿Cómo establecer el nivel de control del asma?
Para conocer en detalle el grado de control del asma en un paciente, de entrada debe analizarse en qué estado se encuentra el control de la patología estableciendo qué síntomas se perciben, qué limitaciones a la actividad diaria tiene el asmático, si éste recurre o no y con qué frecuencia e intensidad a una medicación de rescate o de alivio, y cómo está su función pulmonar. Pero todo ello no sería suficiente, advirtió el Dr. Trigueros, “porque hay pacientes que -por ejemplo- tienen un control bueno pero acumulan muchas exacerbaciones, estando controlados entre una y otra exacerbación”. Entonces, lo que hay que hacer es entrar en la ‘dimensión’ de riesgos futuros partiendo de los datos del número de exacerbaciones -y su gravedad- que haya tenido el paciente.
Con toda esta información, se puede armar una clasificación de control como la que propone GEMA 5.0:
3. ¿Cómo realizar la consulta telefónica del asmático?
A juicio del facultativo, existen una serie de principios “que son irrenunciables” en cualquier comunicación telemática entre un profesional de la salud y un enfermo: conservar la confidencialidad de la información (estar seguros de que el médico se está dirigiendo a la persona adecuada o a su cuidador), dar mensajes basados en la evidencia científica, cerciorarse de que el paciente está entendiendo lo que se le pide que haga, actuar dentro del marco ético-legal, facilitar cada vez más el empoderamiento del asmático y “explorar, si es posible, la posibilidad de completar una teléfono-consulta con una videoconsulta, que nos va a dar aún más información”.
La consulta telemática tendría varias fases:
a) una fase de preparación, previa a la llamada telefónica, en la que se revisan los antecedentes (nivel de gravedad, estado de control de la enfermedad en la anterior revisión, comprobación de la existencia de posibles exacerbaciones recientes, identificación del perfil de adherencia terapéutica y verificación de la retirada de medicación de la farmacia). Asimismo, es conveniente saber si ha habido cambios recientes en el tratamiento y si hay comorbilidades que dificultan el grado de control del asma. De igual modo, es necesario conocer si el asmático tiene un plan de acción por escrito facilitado por el profesional sanitario.
b) Una vez hecho esto, empieza la fase de investigación mediante una entrevista clínica, en la que se recopilan datos sobre síntomas actuales y limitaciones diarias del paciente, y uso o no de medicación de rescate. En paralelo, hay que saber si el asmático está registrándose el flujo espiratorio máximo y también si tiene la posibilidad de mirarse la saturación de oxígeno. Además, en caso de haber podido establecerse una videoconsulta, habría que “valorar la técnica de inhalación, un dato que sería muy interesante”, señaló Trigueros.
c) El siguiente paso es la fase de valoración: con la información obtenida en la consulta se puede realizar una ACT y un TAI (test de adhesión a los inhaladores) por vía telefónica, pero “si estoy recurriendo a una videoconsulta, podría incluso completar el TAI” viendo cómo se administra el paciente su inhalador con el fin de “establecer si tiene o no errores críticos”, remarcó.
d) Finalmente, se llega a la fase de intervención, cuya concreción y ejecución dependerá de si el paciente está controlado o no controlado, pudiendo ocurrir también que en aquel momento el enfermo asmático esté sufriendo una exacerbación:
“Si nuestro paciente está exacerbado, vamos a interrumpir la visita de seguimiento y activar una visita de agudos porque tendremos que determinar el nivel de gravedad de la exacerbación (leve, moderada o grave) e intervenir en consecuencia”, afirmó el Dr. Trigueros.
Para acceder al video que recoge toda la intervención del Dr. Trigueros, clicar en la siguiente grabación: