Redacción Farmacosalud.com
La aplicación de una terapia de células inmunitarias modificadas CAR-T ha reducido tumores cerebrales detectados en niños, ha restaurado la función neurológica de estos pacientes y, en un caso, ha borrado todos los rastros detectables de un tipo de cáncer cerebral que se considera incurable y que afecta sobre todo a personas en edad pediátrica, informa la Universidad de Stanford, en California (Estados Unidos). En concreto, esta enfermedad tan grave es el glioma pontino intrínseco difuso o DIPG -un subtipo del glioma difuso de línea media-, cuyo pronóstico es muy malo porque la supervivencia de los individuos afectados por DIPG no suele superar el año tras el diagnóstico.
Es la primera vez que la inmunoterapia dirigida con CAR-T consigue buenos resultados frente a tumores sólidos, ya que hasta ahora los beneficios obtenidos con este tratamiento se habían centrado en la lucha contra los cánceres sanguíneos o hematológicos.
Sano a los 4 años tras el diagnóstico
De los 11 participantes en el ensayo que recibieron el tratamiento a base de células CAR-T, 9 mostraron beneficios, es decir, 9 obtuvieron una mejora funcional frente a las discapacidades causadas por la enfermedad. 4 registraron una disminución de más del 50% en el volumen de sus tumores, mientras que uno de esos 4 participantes logró una respuesta completa, lo que significa que su tumor desapareció de su cerebro. Si bien es demasiado pronto para decir que esté curado, el paciente en cuestión está sano cuatro años después del diagnóstico.
Esta persona, que actualmente cuenta con 20 años de edad, había ido al médico debido a dolores de cabeza inusuales, movimientos extraños de su ojo izquierdo y parálisis parcial en ese mismo lado de la cara. A medida que el tumor crecía, el cáncer le afectaba la audición, el equilibrio y el sentido de la marcha. Este joven llegó a necesitar una silla de ruedas para desplazarse, salvo en distancias cortas.
Un cáncer cerebral no extirpable mediante cirugía
Los gliomas difusos de la línea media, que pueden crecer en el cerebro o la médula espinal, no son extirpables quirúrgicamente. La radioterapia ofrece sólo un alivio temporal y no existen medicamentos de quimioterapia eficaces.
Para elaborar células CAR-T, lo que se hace es extraer algunas de las propias células T de un paciente y modificarlas para que se unan a un objetivo molecular específico. Los agentes celulares modificados se devuelven al cuerpo del enfermo, donde desencadenan una respuesta inmunitaria contra las células cancerosas.