Redacción Farmacosalud.com
La Enfermedad Inflamatoria Intestinal es una patología crónica que engloba entre otras la Colitis Ulcerosa, que afecta al intestino grueso y al colon, y la Enfermedad de Crohn, que cursa con inflamación en cualquier área del tracto intestinal. Se trata de una enfermedad crónica que implica medicación de por vida y que afecta principalmente a personas jóvenes entre los 15 y los 30 años. “Es una enfermedad complicada que puede afectar a la calidad vida de personas muy jóvenes”, explica el doctor Manuel Barreiro, especialista en Aparato Digestivo y experto de la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD). “Aunque la enfermedad tiene períodos sin actividad o de remisión, los afectados van a medicarse de por vida y su calidad de vida, su vida social, laboral o incluso escolar, se verá irremediablemente afectada por los síntomas de la enfermedad y por la necesidad de medicación crónica”, añade.
El tratamiento de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal en los casos graves y persistentes se basa en estimular el sistema antinflamatorio, han apuntado desde la SEPD mediante un comunicado. Se utilizan para ello agentes biológicos, procedentes de fuentes vivas que actúan sobre los puntos específicos de inflamación al desbloquear una proteína llamada TNF-α. Así se consigue controlar la enfermedad y mantener la remisión. “El problema”, explica el doctor Joaquín Hinojosa, especialista en Aparato Digestivo y experto de la SEPD, “es que tenemos un 10% de pacientes que no responden al tratamiento y un 30% que entre los 6 meses y 1 año pierden la respuesta a éste, lo que nos obliga a intensificar el tratamiento o cambiar de agente biológico”.
Entre los efectos secundarios, alteraciones inmunológicas del intestino
Para dar respuesta a estos problemas y evitar que los pacientes deban someterse a una cirugía, que tampoco es garantía de remisión, pues en el caso de la enfermedad de Crohn suele reaparecer en casi el 90% de los casos, los expertos e investigadores trabajan en la búsqueda de nuevos fármacos que actúen por vías diferentes al TNF-α. “Creemos que en estos pacientes hay otros factores que mantienen la inflamación, por lo que se buscan y estudian nuevas moléculas que actúen sobre vías muy concretas, que serán muy selectivos y sin efectos secundarios”, explica Hinojosa.
Cabe recordar que los efectos secundarios más importantes, al tratarse de fármacos que evitan la inflamación, están relacionados con la alteración de la capacidad inmunológica del intestino, lo que facilita la aparición de infecciones oportunistas o se potencia el desarrollo de linfomas. Las nuevas terapias para pacientes graves de difícil control están ya en sus ensayos finales, por lo que en un futuro muy cercano serán tratamientos individualizados, muy eficaces, que actuarán en zonas muy limitadas del intestino, con efectos secundarios controlados y con una administración más simple que la actual, que es vía intravenosa o subcutánea. Tanto los tratamientos biológicos actuales como los que están a punto de llegar son fármacos complejos y caros que van a ser administrados a pacientes crónicos y jóvenes. Es por ello que los especialistas son conscientes de que en la situación actual de crisis deben utilizarse con mucha responsabilidad.
Las causas de la dolencia podrían ser factores ambientales y genéticos
Los síntomas de la Colitis Ulcerosa son básicamente diarreas con sangre y se llega al diagnóstico mediante colonoscopia, mientras que la Enfermedad de Crohn tiene una sintomatología inespecífica que abarca desde diarrea y dolor abdominal hasta anemia o retraso en el crecimiento, y se diagnostica mediante colonoscopia para el intestino grueso o resonancia magnética si la zona afectada es el intestino delgado. No se conocen las causas de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal, pero en ambos casos se trata de cuadros en los que un desencadenante desconocido provoca una respuesta inflamatoria desordenada que termina atacando al propio intestino. Los expertos la asocian a factores ambientales, unidos a la predisposición genética.
Aunque no hay registro general de la enfermedad, a partir de los estudios realizados y los registros hospitalarios, los expertos consideran que la Enfermedad Inflamatoria Intestinal afecta a entre 180.000 y 200.000 personas. Con una incidencia de número de casos nuevos por 100.000 habitantes /año de entre 9 y 10 csaos para la colitis ulcerosa y 5 y 7 casos para la enfermedad de Crohn. Aunque los expertos advierten también que aumenta la incidencia seguramente debido a factores ambientales y a la alimentación.