Redacción Farmacosalud.com
“La dermatitis atópica y la dermatitis seborreica no tienen nada que ver, son muy diferentes tanto por el mecanismo de producción como por diferentes expresiones clínicas”, aclara la doctora Eulalia Baselga, dermatóloga pediátrica del Hospital de Sant Pau y de la Clínica Dermik de Barcelona. Por ejemplo, la dermatitis seborreica se manifiesta mediante granitos rojos y normalmente aparece en los tres primeros meses de vida, mientras que la dermatitis atópica -aunque con excepciones-, aparece a partir de los tres meses de vida. De igual modo, la afección atópica produce picor, pero en la afección seborreica, “por muy aparatosa que sea y por muy rojos que estén los granitos, no suele molestar al lactante y éste duerme con toda tranquilidad”, especifica la doctora.