Redacción Farmacosalud.com
La Clínica Universidad de Navarra ha incorporado un dispositivo de crioablación de nueva generación para tratar la fibrilación auricular, convirtiéndose en el primer centro hospitalario de España que integra este nuevo sistema, conocido como crioablación con balón. Una de las claves del novedoso procedimiento radica en la mayor distensibilidad y capacidad de acoplamiento del balón, lo que permite mejorar la precisión de la intervención y obtener mayor rapidez en la ejecución de la misma. “Básicamente, se ha avanzado en su distensibilidad, es decir, en las características físicas del dispositivo una vez inflado. Aunque todavía no se ha comparado con otros sistemas cara a cara, en ensayos con modelos animales la capacidad de distensibilidad y acoplamiento del balón dentro de las venas pulmonares parece ser superior al balón convencional. Esto se traduce en pequeñas mejoras que podrían hacer que este sistema fuera más eficaz, más rápido, etc.”, explica a www.farmacosalud.com el Dr. Ignacio García Bolao, director del Departamento de Cardiología y Cirugía Cardiaca y responsable de la Unidad de Arritmias de la Clínica Universidad de Navarra.
Otro de los progresos técnicos que avalan la crioablación con balón se centra en el renovado diseño de la vaina deflectable, la herramienta con la que los cardiólogos se mueven dentro de la aurícula izquierda. La vaina deflectable es un tubito muy fino que se dobla para acoplarse a las curvas de la anatomía del paciente. Precisamente, a través del interior de ese tubito es por donde se mete el balón desinflado, y, una vez que la vaina ha llegado hasta la zona de interés quirúrgico, se saca el balón por el extremo distal y se hincha al tiempo que se enfría a -50/60 grados. “Ese enfriamiento y el contacto del balón con los tejidos es lo que provoca la cauterización de la zona inútil o enferma del corazón, realizándose la ‘lesión’ que nos sirve para aislar eléctricamente la parte de las venas pulmonares de la aurícula”, señala el Dr. García Bolao.
La nueva vaina es más consistente a lo largo el tiempo
“La nueva vaina está más perfeccionada que los modelos anteriores y permite actuar con mayor precisión y rapidez a lo largo del procedimiento. También es más consistente a lo largo el tiempo, lo que permite superar el problema de conservación de las vainas precedentes, que pueden funcionar muy bien al principio de la operación pero luego se van deteriorando con el uso”, detalla.
La arritmia es una alteración del ritmo cardiaco debido a un mal funcionamiento del sistema eléctrico del corazón, que es el responsable de mantener un correcto flujo sanguíneo y una adecuada presión arterial. La fibrilación auricular es la arritmia más frecuente en la población general. En España, se estima que a partir de los 60 años más del 4% de la población va a sufrir esta dolencia cardiaca. “Gracias a los avances tecnológicos, en la Clínica ahora somos capaces de hacer una valoración del paciente y en 48 horas ofrecerle un tratamiento personalizado”, asegura García Bolao.
La aplicación de frío está especialmente recomendada para aquellos casos que precisen el aislamiento de la vena pulmonar (PVI). “La crioablación es muy eficaz en casos muy iniciales de fibrilación auricular, ya que permite hacer ese aislamiento de manera muy rápida y eficaz, siendo además una técnica complementaria al sistema de ablación tradicional con radiofrecuencia”, destaca a través de un comunicado de la Clínica Universidad de Navarra el responsable de la Unidad de Arritmias de dicho centro hospitalario, en la que han sido tratados más de 11.000 pacientes. Otra de las ventajas del nuevo sistema es que dota de mayor autonomía al operador, tal y como certifica el experto: “Con los sistemas antiguos había que dar órdenes a un ayudante, mientras que ahora el cardiólogo puede actuar autónomamente y ello conlleva que el proceso se vuelva más ágil y fluido. La latencia derivada de la emisión de la orden y la ejecución de la misma no existe”.
Mediante la crioablación con balón se puede conseguir curar definitivamente al paciente
El aislamiento de las venas pulmonares, que se aplica como procedimiento inicial para curar la fibrilación auricular, sirve para desconectar la zona donde se genera la arritmia del resto del corazón. “Para ciertas etapas precoces de la fibrilación auricular paroxística la crioablación con balón es útil, pero si la dolencia avanza puede que sea necesaria la aplicación de otras técnicas. Mediante la crioablación con balón se puede conseguir curar definitivamente al paciente, sobre todo si se le coge en los estadíos iniciales de la fibrilación auricular. Hay que recordar que se trata de una afección progresiva que, normalmente, va empeorando con el tiempo. En los casos abordados precozmente, o sea, en los primeros años de evolución de la enfermedad -y más específicamente en fibrilación auricular paroxística-, la crioablación con balón permite la curación del 80% de los pacientes”, remarca el Dr. García Bolao.
Según el especialista, propiamente no existe ninguna contraindicación para la aplicación del nuevo procedimiento. No obstante, en algunos casos puede ser más eficaz, rápido y recomendable recurrir a una técnica con calor, aplicada punto a punto, en la que se usa un catéter y no un balón.
La crioablación con balón, desaconsejada en un 10-15% de casos
Cuando se aplica el balón, el dispositivo impacta en la vena y el frío elimina el problema de una tacada, en plan single shot, es decir, el balón dibuja una circunferencia alrededor del tejido dañado y consigue el aislamiento de las venas pulmonares.
El problema surge cuando la vena del paciente no presenta un perfil redondo ni tiene un diámetro razonable, sino que adopta la forma de lo que se conoce como colector (dos venas juntas y por tanto de mayor tamaño), ya que tal disfunción anatómica impide que el balón hinchado ocluya toda la zona dañada. “Ahí, desde luego es mucho más eficaz actuar punto a punto que aplicar la crioablación con balón. Eso sucede en un 10-15% de los pacientes. ¿Eso significa que esté contraindicado el balón? No, no está contraindicado, pero en esos casos es más difícil intervenir con este dispositivo que hacerlo mediante el método del punto a punto. Si nos encontramos con venas estándar que pueden ser ocluidas con el balón, la intervención puede durar una hora o una hora y cuarto. Pero si nos metemos en anatomías complejas, probablemente sea mucho más eficaz optar por otra técnica y no por el balón con frío”, precisa el facultativo.