Redacción Farmacosalud.com
La Fundació Puigvert (Barcelona) ha realizado con éxito la primera cistectomía radical mundial con HUGO™, el robot quirúrgico de última generación desarrollado por Medtronic. Una de las ventajas asociadas a la aplicación del sistema robótico es el recorte en los días de estancia hospitalaria del paciente. Así lo constata el Dr. Joan Palou, director del Servicio de Urología de la Puigvert: “la cirugía robótica per se, al ser menos invasiva, permite una más rápida recuperación y recortar los días de hospitalización. El robot HUGO también cumple estos criterios. Comparado con el promedio nacional de días de estancia hospitalaria en España por una cistectomía (la mayoría son por cirugía abierta), que es de 18 días, la estancia de nuestro paciente de 6 días indica que se va por el buen camino”.
HUGO™, desarrollado durante los últimos diez años, irrumpe en el escenario de la cirugía robótica mundial como uno de los más avanzados. En esta ocasión, el equipo del Dr. Palou ha sido pionero en usar este moderno dispositivo para llevar a cabo una cistectomía radical, que es un procedimiento quirúrgico de alta complejidad. El paciente que fue sometido a esta intervención está recuperado y presenta un buen estado de salud físico. Fue operado en marzo de 2022 y la intervención consistió en extirpar la totalidad de la vejiga afectada por el tumor y ganglios circundantes (linfadenectomía) y asegurar márgenes tumorales quirúrgicos. Para la reconstrucción de la vía urinaria se optó por una derivación (conducto ileal) utilizando el intestino delgado del paciente para unirlo con los uréteres y garantizar la salida de la orina al exterior. La mayor complejidad de esta técnica quirúrgica radicó en que todos estos pasos se realizaron de manera intracorpórea.
Plena recuperación en uno o dos meses
“La cistectomía radical es la cirugía de máxima complejidad en urología, ya que implica quitar la vejiga, la próstata y los ganglios linfáticos de la pelvis y luego reconstruir la vía urinaria utilizando intestino. Comporta muchas suturas, cerrar el intestino y unir los uréteres con el intestino, lo que obliga a realizar múltiples pasos que requieren la atención del cirujano desde el principio hasta el final. No es infrecuente (50-60%) que los sujetos operados presenten alguna complicación, si bien la mayoría son leves. En nuestro caso, el paciente no presentó ninguna complicación, siendo dado de alta sin ningún problema a los 6 días”, asegura Palou en declaraciones a www.farmacosalud.com.
El hecho de realizar una operación mínimamente invasiva como la llevada a cabo mediante el robot HUGO™ facilita una rápida recuperación. “La recuperación es rápida, en pocos días los pacientes se van a casa y pueden ya realizar múltiples actividades hasta la plena recuperación en uno o dos meses, cuando se pueden reincorporar y llevar ya una vida normal”, señala el experto.
Un sistema robótico eficiente y con un menor coste
“La evolución de la tecnología en medicina ha hecho que la Urología del siglo XXI sea el producto de mejoras técnicas continuas que obligan al especialista a un cambio y nuevos aprendizajes para beneficiar al paciente”, indica el Dr. Palou, uno de los cirujanos más reconocidos a nivel mundial por sus aportaciones como urólogo al estudio y tratamiento del cáncer de vejiga. Asimismo, “HUGO aporta imagen tridimensional, una preparación del campo quirúrgico con varios módulos, una consola de visualización abierta, e Inteligencia Artificial para almacenaje y utilización de la grabación de la imagen. A pesar de ser nuevo en el mercado, HUGO es un robot muy maduro en el escenario de la cirugía robótica, con enorme solvencia y muchas posibilidades”, añade a través de un comunicado.
“Con el desarrollo de un nuevo robot, la cuestión es valorar si éste se comporta como mínimo de una manera similar al robot Da Vinci -que lleva años en el mercado y con diferentes modelos de evolución- y de una forma eficiente desde el punto de vista quirúrgico y también económico. Los costes de las nuevas tecnologías deben evolucionar y facilitar la implantación para la universalización de este tipo de tecnología. El poder realizar las cirugías establecidas, desde las más simples a las más complejas con este nuevo robot y a menor coste, implica que el desarrollo tecnológico va en la buena dirección”, afirma Palou.
La Fundació Puigvert es uno de los centros de referencia en cirugía urológica de España y Europa que registra mayor volumen de actividad asistencial. Actualmente, la cirugía robótica sólo se aplica en un 3% de los procedimientos a nivel mundial. Sin embargo, en el centro Puigvert y gracias a la adquisición de HUGO™, se ha robotizado la mitad del bloque quirúrgico apostando por las ventajas que ofrece la cirugía mínimamente invasiva para la seguridad y recuperación de los enfermos, especialmente en procedimientos de tan alta complejidad.
La robótica ha irrumpido en el ámbito de la Urología de manera indudable y, a partir de ahora, es una realidad imparable. Según el Dr. Alberto Breda, jefe de la Unidad de Urología Oncológica y presidente de la ERUS (la Sociedad Europea de Cirugía Robótica por sus siglas en inglés), “los urólogos apostamos por la cirugía robótica como primera opción por la cantidad de ventajas que ofrece a los pacientes: disminución del sangrado, del dolor postoperatorio y de los días de hospitalización. Y este, sin duda, es nuestro objetivo principal”.