Redacción Farmacosalud.com
Angelini Farmacéutica ha anunciado el lanzamiento en España de Latuda (hidrocloruro de lurasidona) para el tratamiento de pacientes adultos con esquizofrenia. De acuerdo con la Dra. Mònica Prat, psiquiatra adjunta en el Concorci Sanitari Integral Sant Joan Despí (Barcelona) [Consorcio Sanitario Integral] y médico psiquiatra en el Instituto Internacional de Neurociencias Aplicadas (Barcelona), el hidrocloruro de lurasidona es un fármaco que, en general, presenta “un buen perfil de seguridad y tolerabilidad”.
Se ha evaluado la seguridad de lurasidona a largo plazo, hasta dosis de 148 mg al día, en pacientes adultos que cumplían criterios de esquizofrenia. Las reacciones adversas que se han descrito con más frecuencia fueron náuseas, acatisia y somnolencia, asociadas principalmente a dosis más elevadas. “Existen casos descritos de insomnio, por lo que en pacientes que lo experimenten, se podría considerar trasladar la toma a la mañana”, precisa la Dra. Prat. En cuanto a las contraindicaciones, este medicamento se debería retirar en caso de hipersensibilidad al principio activo o a alguno de sus excipientes. También se descartaría en aquellos pacientes que se encuentren en tratamiento con inhibidores potentes de la CYP3A4 e inductores potentes de la CYP3A4, como son por ejemplo algunos antirretrovirales o barbitúricos.
Eficacia en los síntomas positivos y negativos
El hidrocloruro de lurasidona, que fue creado por Sumitomo Dainippon Pharma Co., Ltd., tiene una gran afinidad por los receptores de la dopamina D2, la serotonina 5-HT2A y la serotonina 5-HT7, en los que ejerce efectos antagonistas. Además, lurasidona es un agonista parcial del receptor de la serotonina 5-HT1A y carece de afinidad apreciable por los receptores de la histamina H1 o muscarínicos M1. Lurasidona ha demostrado eficacia en los síntomas positivos y negativos en pacientes con esquizofrenia con un impacto cardiometabólico mínimo (efectos insignificantes sobre el aumento de peso, ausencia de alteraciones cardíacas o efectos insignificantes en los niveles de glucosa y lípidos).
Los síntomas positivos de la patología esquizofrénica se asocian a delirios y alucinaciones (por ejemplo, el paciente oye voces). “El hidrocloruro de lurasidona es un antipsicótico atípico que ofrece algunos cambios en el perfil receptorial, si lo comparamos con otros fármacos del mismo grupo. Entre sus distintos efectos, destaca una elevada afinidad por los receptores de la dopamina D2, lo que se asociaría a una reducción de los síntomas positivos de la esquizofrenia, y de la serotonina 5-HT2A, con lo que se minimiza el riesgo de aparición de clínica extrapiramidal”, establece la experta. El síndrome extrapiramidal consiste en una alteración del sistema piramidal que provoca una serie de efectos indeseables que afectan al movimiento[1], como acatisia, parkinsonismo y discinesias tardías[2]. Según Prat, “la eficacia de lurasidona en el tratamiento de la esquizofrenia se demostró en cinco estudios multicéntricos, doble ciego, controlados con placebo y de 6 semanas de duración, en los que lurasidona mostró una eficacia superior a la de un placebo desde el día 4 en la reducción de la sintomatología positiva”.
En el ámbito de la esquizofrenia, los síntomas negativos hacen referencia a carencias, como falta de energía, de relaciones sociales, de emociones, etc. En este sentido, la alta afinidad, con efecto antagonista, del hidrocloruro de lurasidona por los receptores de serotonina 5-HT7 “se ha relacionado con una acción beneficiosa sobre el estado de ánimo, la ansiedad y la sintomatología negativa”, subraya la psiquiatra adjunta del Concorci Sanitari Integral Sant Joan Despí. Estos efectos han sido constatados en los estudios multicéntricos mencionados, durante los que se ha estudiado la acción sobre la sintomatología global del trastorno (tanto positiva como negativa), así como el mantenimiento de la acción a largo plazo, condición en la que ha mostrado superioridad al placebo.
Tres presentaciones del fármaco
Asimismo, lurasidona aporta una mejoría de la función cognitiva y la calidad de vida de los pacientes a largo plazo[3]. Los efectos antagonistas sobre el receptor de serotonina 5-HT2A y su acción como agonista parcial del receptor de la serotonina 5-HT1A se han asociado a una mejoría de la sintomatología cognitiva vinculada a los pacientes con esquizofrenia de evolución crónica.
Por otro lado, la ausencia de afinidad apreciable por los receptores de la histamina H1 o muscarínicos M1 se ha relacionado con una reducción del riesgo de aumento de peso, sedación y alteración cognitiva. “Todos estos efectos deberían condicionar una mejoría de la calidad de vida de los pacientes por los efectos positivos del fármaco, así como por la capacidad de mantenimiento a largo plazo, avalada por los estudios realizados”, sostiene la médico psiquiatra del Instituto Internacional de Neurociencias Aplicadas.
El hidrocloruro de lurasidona se administra en forma de comprimidos, del que se disponen tres presentaciones en España: 18'5, 37 y 74 mg. En EE.UU. existen presentaciones de 18'5, 37, 55'5, 74, 111 y 148 mg. La toma es por vía oral, en dosis única y se recomienda administrarla con la cena, ya que la toma con alimentos favorece su absorción. “La dosis inicial recomendada en pacientes con esquizofrenia sería de 37 mg al día con opción de titularla hasta un máximo de 148 mg al día en función de la respuesta y la tolerabilidad. Lurasidona y su metabolito activo ID-14283 son principalmente metabolizados por la CYP3A4, por lo que se debe tener precaución con aquellas sustancias que ejercen acción sobre esta enzima. En aquellos pacientes con insuficiencia hepática o renal, está indicado ajustar la dosis de lurasidona a la mitad”, detalla la Dra. Prat.
En todo el mundo, casi 3,5 millones de personas ya han recibido tratamiento con Latuda desde su introducción en 2010. Angelini empezó a comercializarlo en Italia en 2017. En menos de un decenio, este medicamento se ha convertido en el segundo antipsicótico más recetado en todo el mundo[4]. La esquizofrenia, que en España afecta aproximadamente a 450.000 personas, es un trastorno mental crónico, grave y profundamente incapacitante que afecta a más de 23 millones de personas en todo el mundo[5].
Referencias
1. Lab Tests Online. Farmacogenómica y efectos secundarios del tratamiento de la esquizofrenia. Abril 2015. Difusión online: https://labtestsonline.es/news/farmacogenomica-y-efectos-secundarios-del-tratamiento-de-la-esquizofrenia
2. Moreno-Calvete MC. Prevalencia de los efectos extrapiramidales por neurolépticos en personas hospitalizadas con esquizofrenia. Enfermería Clínica. Vol. 23. Núm. 3. Páginas 114-117 (Mayo - Junio 2013). DOI: 10.1016/j.enfcli.2013.04.001. Elsevier: https://www.elsevier.es/es-revista-enfermeria-clinica-35-articulo-prevalencia-los-efectos-extrapiramidales-por-S1130862113000715
3. Samalin, L., Garnier, M., & Llorca, P. M. (2011). Clinical potential of lurasidone in the management of schizophrenia. Therapeutics and clinical risk management, 7, 239.
4. Fuente: IQVIA Worlwide Sales 2018. Obsérvese que, en el mercado estadounidense, las indicaciones son tanto esquizofrenia como depresión bipolar.
5. Regier DA, Narrow WE, Rae DS, Mandercheid RW, Locke B2, Goodwin, FK. The de Facto US Mental and Addictive Disorders Service System. Arch Gen Psychiatry. 1993;50:85-94. Calculado por extrapolación de las estimaciones poblacionales de 2008 de la Oficina del Censo de los Estados Unidos.