Redacción Farmacosalud.com

Consumir el cigarrillo en sitios incómodos con el fin de no disfrutar del hábito tabáquico, fumar con la mano contraria a la habitual y evitar los conocidos como ‘fumaderos’ (puerta del bar, la casa de un familiar donde hay tabaco), así como cambiar rutinas para huir de automatismos, como por ejemplo renunciar a fumar dentro del coche o separar los cigarrillos de todos aquellos escenarios asociados al tabaco (toma de café o alcohol, sentarse en el sofá después de comer), son algunas de las estrategias que forman parte del protocolo no farmacológico que debe ponerse en marcha justo antes de intentar desengancharse del tabaquismo. Así se recoge en el documento ‘Enfoque Integral del Tabaquismo en Atención Primaria’, elaborado por la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN).

Con respecto al abordaje farmacológico, ‘actualmente se reconocen como fármacos de primera línea en el tratamiento del tabaquismo la terapia sustitutiva con nicotina (TSN) en todas sus presentaciones y dosis (parches, chicles, comprimidos para chupar y espray bucofaríngeo), vareniclina, citisina/citisiniclina y bupropion’, según indica el nuevo consenso.

Vareniclina, útil en adultos que usan cigarrillos electrónicos y vapeadores
Otro de los aspectos en los que incide el dossier se centra en los fumadores jóvenes y su relación con las nuevas formas de consumo: ‘la proporción de adolescentes y jóvenes que han probado o usan cigarrillos electrónicos es notable y está experimentando un alarmante aumento. La adolescencia y la juventud son momentos clave para intervenir de manera efectiva, adoptando un enfoque empático y educativo’. De acuerdo con el documento, los facultativos deben ‘evaluar la dependencia a la nicotina’ de estos jóvenes ‘utilizando métodos apropiados y sensibles al contexto de la adolescencia’.

No obstante -se lee en la guía-, ‘el manejo del tabaquismo en menores de 18 años es complejo, ya que la única opción disponible es la TSN, dado que el bupropión, la citisina/citisiniclina y la vareniclina están contraindicados. En cuanto a los adultos que usan cigarrillos electrónicos o vapeadores, los estudios sobre el uso de TSN y la terapia farmacológica no nicotínica son limitados. Sin embargo, un estudio publicado en ‘The Lancet’ muestra la utilidad y seguridad de la vareniclina en estos usuarios. Este estudio indica que la administración de vareniclina 1 mg dos veces al día durante 12 semanas es efectiva para el tratamiento de la cesación tabáquica en estos pacientes’.

En paralelo, ‘es importante recalcar que no existe evidencia científica sólida que respalde la eficacia de los cigarrillos electrónicos como una herramienta para reducir o cesar el consumo de tabaco. De hecho, su uso puede aumentar la exposición a sustancias químicas nocivas, lo que representa un riesgo adicional para la salud’.

En definitiva, que ante fumadores adolescentes y jóvenes, los profesionales sanitarios deben priorizar un enfoque empático y educativo, asegurando una recepción adecuada del paciente y una evaluación inicial detallada que permita adaptar las estrategias terapéuticas a sus necesidades¹.

El protocolo REVERSE
El consenso ‘Enfoque Integral del Tabaquismo en Atención Primaria’ ha sido redactado por miembros del Grupo de Trabajo de Tabaquismo de SEMERGEN bajo la coordinación del Dr. Raúl de Simón Gutiérrez. El documento incluye una novedosa herramienta de trabajo, denominada REVERSE, que ayuda a los profesionales a sistematizar el abordaje clínico de un fumador en una primera consulta con el objetivo de revertir el hábito de fumar de una manera ágil y efectiva.

El protocolo REVERSE es una metodología estructurada en siete pasos, de tal manera que cada uno de ellos está orientado a evaluar y apoyar al paciente en su proceso hacia la cesación tabáquica asegurando una atención holística y personalizada.

Según el Dr. De Simón, “las intervenciones en fumadores deben ser ordenadas, estructuradas y basadas en las mejores evidencias disponibles, pero igualmente deben ser fáciles de cumplir en su implementación. REVERSE reúne toda la rigurosidad exigible a una intervención frente al tabaco, pero también se acompaña de sencillez en su diseño y agilidad en su ejecución, lo que permite ser fácilmente aplicable en escenarios con baja disponibilidad de tiempo como puede ser el de la Atención Primaria (AP). Pensamos que su implementación puede representar un gran avance en el manejo del tabaquismo, brindando a los pacientes mayores posibilidades de éxito en su camino hacia la cesación tabáquica”.

8 millones de fumadores diarios en España
La prevalencia del consumo de tabaco en España supera el 30%, lo que equivale a aproximadamente 8 millones de fumadores diarios y cerca de un millón que lo hacen de forma ocasional². Son cifras que están muy por encima del objetivo fijado por la Unión Europea, que es el de reducir la prevalencia del tabaquismo por debajo del 5% para el año 2030³.

A pesar de los esfuerzos para reducir el consumo de tabaco, el tabaquismo sigue representando un grave problema de salud pública en España. En concreto, esta adicción es responsable de casi el 40% de las muertes prematuras en hombres de entre 35 y 70 años y del 15% en mujeres dentro del mismo rango de edad⁴. Además, el problema se agrava con la proliferación de nuevas formas de consumo, como los cigarrillos electrónicos o vapeadores, así como con el inicio temprano del hábito entre los jóvenes¹. Este escenario pone de manifiesto la necesidad de implementar intervenciones continuas y contundentes para abordar eficazmente el impacto del hábito tabáquico en la población.

"La gran mayoría de los fumadores requiere al menos dos o tres intentos para lograr la cesación definitiva, y una gran parte del éxito en el abandono del tabaco no sólo depende del nivel de motivación del paciente, sino también del tipo de intervención recibida. Para alcanzar una cesación efectiva, es crucial implementar un abordaje estructurado y coordinado, adaptado a las características y necesidades individuales de cada paciente. Esto implica ofrecer herramientas y estrategias personalizadas, así como garantizar un seguimiento programado y un acompañamiento continuo", explica la Dra. Helia Madrona, médico de familia y miembro del Grupo de Trabajo de Tabaquismo de SEMERGEN.

7 pasos en la consulta
El protocolo REVERSE consta de 7 fases en las consultas de AP:

1. Recepción y evaluación inicial: se da la bienvenida al paciente en un ambiente de confianza y receptividad. Se indaga sobre el motivo de consulta y se sientan las bases para una entrevista motivacional, elemento clave para generar el cambio de comportamiento necesario para la cesación tabáquica.

2. Evaluación de hábitos y dependencia: se analiza el historial de tabaquismo del usuario de AP, incluyendo la duración del hábito, la cantidad y tipo de productos de tabaco consumidos, y los posibles intentos previos de abandono. Para determinar el nivel de dependencia a la nicotina, se recomienda la aplicación del test de Fagerström, una herramienta que permite adaptar el enfoque terapéutico según las características de cada caso.

3. Valoración médica integral: este paso consiste en un examen físico detallado y una revisión de los antecedentes médicos del fumador para identificar condiciones de salud que podrían estar relacionadas o agravadas por el tabaquismo, como enfermedades cardiovasculares, respiratorias o cáncer. Además, en este punto se realiza una revisión de los fármacos que podría estar tomando el paciente, con el fin de evaluar cualquier interacción con posibles tratamientos para la cesación del tabaco.

4. Establecimiento de la fase de cambio: se determina en qué etapa del cambio se encuentra el paciente usando modelos psicológicos, como el de Prochaska y DiClemente.

5. Recomendación del tratamiento: en el quinto paso del protocolo REVERSE se enfatiza la importancia de realizar un enfoque personalizado, cuya aplicación debe estar basada en la información recopilada previamente. Este plan puede incluir diversas estrategias, como tratamiento farmacológico y no farmacológico, y medidas de prevención de recaídas. Según el programa, el abordaje no farmacológico, a través del apoyo cognitivo-conductual, debe ser una parte fundamental del tratamiento.

En lo relativo al abordaje farmacológico, “cualquier intento de abordar el tabaquismo debe ser planificado con un enfoque basado en el concepto del tabaquismo como enfermedad crónica adictiva. Desde este punto de vista, el tratamiento farmacológico debe ser ofrecido a cualquier fumador que quiera hacer un intento serio para dejar de fumar (grado de recomendación A), salvo en los casos en que coexistan contraindicaciones médicas o situaciones no sustentadas de evidencias sólidas sobre la seguridad o eficacia de los fármacos (embarazo, niños y adolescentes y fumadores de menos de 10 cigarrillos diarios)”, apunta De Simón.

6. Suministro de educación y recursos: se ofrece al paciente un conjunto de materiales informativos, como folletos, guías y referencias digitales, que ilustran tanto los peligros del tabaquismo como las ventajas de su cese. Hay que asegurarse de que el paciente tenga acceso continuo a apoyo educativo y práctico.

7. Evaluación y seguimiento: el último paso se enfoca en mantener un contacto continuo con el fumador para monitorear su progreso y hacer ajustes necesarios al plan de tratamiento. Se recomienda hacer un seguimiento programado desde la primera semana después del último cigarrillo, hasta llegar al año de abstinencia.

REVERSE, asimismo, recoge recomendaciones específicas para poblaciones especiales, como los fumadores con cardiopatías, con diagnóstico de Enfermedad Obstructiva Crónica (EPOC), fumadoras embarazadas, y pacientes con obesidad o con patologías psiquiátricas.

Referencias
1. Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. Informe sobre los cigarrillos electrónicos. Madrid: Ministerio de Sanidad; 2022
2. Extremadura, Murcia y Andalucía, las comunidades más fumadoras; El Periódico de España, Nieve Salinas, 17 mayo 2022. Disponible en: https://www.epe.es/es/sanidad/20220517/comunidades-autonomas-fumadoras-espana-tabaco-13667751
3. La encuesta edades 2022 demuestra que el consumo de tabaco en España está aumentando y se hace imprescindible que el gobierno adopte medidas, CNPT, 12 de enero 2023. Disponible en: https://cnpt.es/actualidad/detalleNota/251
4. Tabaquismo y deshabituación tabáquica, CGCOF, 2018. Disponible en: https://www.cofbadajoz.com/wp-content/uploads/2018/03/TABAQUISMO-Y-DESHABITUACIO%CC%81N.pdf