Redacción Farmacosalud.com
“El hígado graso afecta a una cuarta parte de la población española, previéndose un aumento de su incidencia en los próximos años. Además, su prevalencia está aumentando en la población infantil, de forma que entre un 30-80% de la población pediátrica con exceso de peso tiene hígado graso”, advierte la Dra. Marta Casado Martín, nueva presidenta de la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD). Casado no esconde tampoco su preocupación por otros datos reveladores, como el hecho de que la incidencia de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII) en territorio español sea de “16,2 casos por 100.000 habitantes-año, cifra considerablemente mayor que la descrita previamente en España e incluso mayor que la reportada previamente en países de Europa occidental como Grecia, Italia o Portugal”. Y, por si todo esto fuera poco, España es “el segundo país de la UE en consumo de alcohol. Además, estamos asistiendo a un aumento del consumo de bebidas alcohólicas entre los jóvenes, y esto es muy preocupante”, agrega.
-Entre sus objetivos prioritarios figura impulsar actividades de sensibilización en materia de salud digestiva, en concreto, en el ámbito de enfermedades hepáticas asociadas al consumo de alcohol, e hígado graso. ¿Cómo estamos en España en relación a estas dos patologías?
En la actualidad las dos enfermedades hepáticas más prevalentes en España son el hígado graso y la enfermedad hepática por alcohol. Ambas son afecciones que fácilmente podemos prevenir con hábitos de vida saludables que incluyen evitar la ingesta de alcohol, y por otro lado hacer ejercicio físico y llevar una dieta mediterránea. En territorio español el consumo de alcohol es responsable de 3 de cada 4 casos de cirrosis hepática en varones y de 1 de cada 2 casos en mujeres, y es la causa más frecuente de enfermedad hepática avanzada y cirrosis hepática en Europa, incluyendo España.
Por otra parte, el hígado graso afecta a una cuarta parte de la población española, previéndose un aumento de su incidencia en los próximos años. Además, su prevalencia está aumentando en la población infantil, de forma que entre un 30-80% de la población pediátrica con exceso de peso tiene hígado graso. Estos datos ponen de manifiesto la relevancia en nuestro país de dos enfermedades hepáticas potencialmente graves, pero que se pueden prevenir con una vida saludable.
-También pretende que la FEAD colabore con asociaciones de pacientes con el fin de canalizar el contacto con los pacientes a través de las mismas. ¿Para ello, trabajará conjuntamente con la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD), cuyo nuevo presidente es el Dr. Agustín Albillos?
Sin ninguna duda. La FEAD representa la expresión del compromiso de la SEPD con la población general y los pacientes en favor de la salud digestiva. La SEPD es la sociedad científica que aúna y representa a los profesionales que trabajan con las personas afectas de patologías digestivas, y son los expertos en el manejo de estas enfermedades, por lo que son la mejor fuente de formación y de información para los pacientes y para la población. Por lo tanto, trabajamos conjuntamente ya que ambas entidades, la sociedad científica y la Fundación, están íntimamente unidas.
-Su nombramiento como máxima dirigente de la FEAD ha tenido lugar tras la celebración del LXXXI Congreso Nacional de la SEPD. ¿Qué principales avances científicos se han conocido en esta reunión?
Este congreso ha supuesto la vuelta a las actividades científicas presenciales tras dos años de interrupción por la pandemia. Ha reunido a más de 1.000 especialistas en aparato digestivo que han compartido sus conocimientos, así como los resultados de los proyectos de investigación más relevantes llevados a cabo en nuestro país relacionados con nuestra especialidad. Aunque no es fácil resumir el contenido científico de este encuentro dada su gran envergadura, destacaría el posicionamiento de nuevos fármacos en el manejo de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII), el desarrollo tecnológico de la endoscopia digestiva, los avances en la eliminación de la hepatitis C, o los avances en el manejo del cáncer digestivo y hepático, fundamentalmente en su diagnóstico precoz.
-Hablando de la EII… los casos de Enfermedad Inflamatoria Intestinal, que engloba a la colitis ulcerosa (CU) y la enfermedad de Crohn (EC), han ido en aumento en todo el mundo. En Occidente, la incidencia y prevalencia de esta afección se ha incrementando en los últimos 50 años1.
Recientemente se ha publicado un estudio multicéntrico español sobre la incidencia de la EII en España. Según los resultados de este trabajo, la incidencia es de 16,2 casos por 100.000 habitantes-año, cifra considerablemente mayor que la descrita previamente en España e incluso mayor que la reportada previamente en países de Europa occidental como Grecia, Italia o Portugal. Otro hallazgo relevante del estudio es la elevada proporción de nuestros pacientes con EII en tratamiento con fármacos inmunomoduladores y agentes biológicos, muy superior a la reportada previamente. Estos datos ponen de manifiesto la especial relevancia que esta patología tiene actualmente en nuestra especialidad.
-¿Se sigue abusando de los protectores estomacales, o bien la prescripción de estos fármacos en personas polimedicadas se ha ido adecuando según las necesidades reales de cada paciente?
Sí, se sigue abusando de los mal llamados protectores estomacales. Y digo mal llamados porque no protegen el estómago, sino que ejercen su efecto terapéutico a través de la inhibición del ácido gástrico… de ahí su nombre, inhibidores de la bomba de protones. Sin embargo, es cierto que en los últimos años su prescripción se está adecuando progresivamente a las necesidades reales de los pacientes, de forma que intentamos restringir su uso únicamente a los pacientes que tienen indicación para ello, y ello incluye la recomendación a la población de que estos fármacos solo se consuman bajo prescripción médica.
-¿Se ha observado, a nivel de salud digestiva, algún nuevo hábito preocupante entre la población española?
Desde mi punto de vista los hábitos más perjudiciales para nuestra salud digestiva y también para nuestra salud en general son tres: el sedentarismo, seguir una dieta no saludable y el consumo de alcohol.
Los dos primeros condicionan la aparición de sobrepeso, estado que es perjudicial para nuestra salud cardiovascular y también digestiva, condicionando la aparición del hígado graso. En los últimos años hemos observado un incremento de estos hábitos entre la población infantil y adolescente, con el impacto que ello tiene en su salud actual y futura.
El hábito del consumo perjudicial de alcohol en la población española no es un hábito nuevo, pero no por ello deja de tener relevancia, siendo la droga más consumida en España. Somos el segundo país de la UE en consumo de alcohol. Además, estamos asistiendo a un aumento del consumo de bebidas alcohólicas entre los jóvenes, y esto es muy preocupante. Es por ello que desde la FEAD nos proponemos informar y concienciar a nuestra población de la importancia de una vida saludable en nuestra salud digestiva a través de una campaña dirigida no solo a la población adulta, sino también a nuestros jóvenes.
Referencias
1. Figueroa C. Epidemiología de la enfermedad inflamatoria intestinal. REV. MED. CLIN. CONDES. 2019;30(4):257-261.