Cristina Soria, autora de ‘El libro que salvará tu relación de pareja’ (HarperCollins): Cristina Soria es licenciada en Ciencias de la Información y cuenta con un Máster en Coaching e Inteligencia Emocional, habiendo completado su formación en los ámbitos del Coaching Sistémico, Deportivo, Fortalezas, Neurociencia y Comunicación no Verbal y Análisis de la Personalidad. También ha presentado el único programa de coaching emitido en televisión en España e imparte conferencias y forma en distintas compañías y escuelas dedicadas a esta disciplina. Como escritora, ha publicado 7 libros: ‘Yo puedo ayudarte’; ‘Sí, tú puedes’; ‘Elige tu aventura’; ‘Adiós, tristeza’; ‘No son las dietas, son los hábitos’; ‘Saca lo mejor de ti’, y ‘Renuévate’.

Redacción Farmacosalud.com

Lo de ‘y fueron felices y comieron perdices’ de los cuentos de hadas está muy bien para alimentar nuestras ansias de encontrar el amor perfecto, pero es que, tal y como advierte Cristina Soria, coach y escritora, esas historias de amor feliz acaban sin que nadie aclare cómo fue evolucionando la relación más adelante, con el paso del tiempo. En el mundo real los protagonistas de los relatos lo tienen mucho más complicado porque, si ya es harto difícil conocer a nuestra media naranja, más complicado aún es mantener juntas esas dos mitades y evitar que el paso de los años acabe ajándolas. El desgaste de la vida en común puede producir frustración, insatisfacción, fracaso e incluso provocar la ruptura. Por eso, descubrir situaciones dañinas y afrontar las crisis de forma constructiva es fundamental para desarrollar relaciones sanas. Con ‘El libro que salvará tu relación de pareja’, Soria presenta una serie de propuestas para discutir sin pelear y conseguir el equilibrio en la convivencia, así como para entenderse, llegar a acuerdos y evitar caer en la rutina.

«Los cuentos de princesas y ranas convertidos en príncipes no existen»
El nuevo manual de Soria contiene pasajes cocinados sin ningún tipo de edulcorante, lo que ya de por sí es toda una declaración de principios: «Sí, siento confirmarte que las historias de amor que nos vendió Disney son MENTIRA. Que los cuentos de princesas y ranas convertidos en príncipes no existen. Tampoco las parejas perfectas cuyas vidas son retransmitidas por Instagram y TikTok. Ni siquiera sabemos con certeza si la relación entre Adán y Eva estuvo siempre exenta de reproches y de sentimientos de culpa». Ya se sabe: nadie es perfecto, por más que en las redes sociales algunos, consciente o inconscientemente, se nieguen a aceptarlo. “Yo personalmente no creo en las personas perfectas; por lo tanto, tampoco creo en las parejas con esta cualidad -afirma la autora en conversación con www.farmacosalud.com-. Trabajo a diario con muchas personas en procesos de coaching, a las que precisamente esas expectativas de una supuesta perfección les limitan y les llegan a menoscabar su personalidad”.

“Creo en aquellas parejas en las que ambas partes crecen, las parejas que pueden ser felices toda su vida, las que superan obstáculos, las que comparten valores, las que se perdonan, las que tienen una relación sana… pero el concepto de perfección es muy subjetivo. Lo que para mí puede acercarse a lo mejor, para usted u otros no”, señala a continuación.

Para vivir felices hay que trabajárselo, nada sale gratis
A mayor abundamiento, el ya mencionado concepto de ‘final feliz’ de los almibarados cuentos de hadas. Soria, en su nueva obra, no desaprovecha la ocasión para recrearse en los chutes de glucosa que cierran este tipo de narraciones: «Esa frase con la que terminan todos los cuentos que nos han transmitido nuestras abuelas, ‘y fueron felices y comieron perdices’, no se cumple en la vida real, tal y como nos lo hemos imaginado, porque, a decir verdad, esas historias de amor feliz acaban ahí; nadie nos ha aclarado qué pasó seis meses, dos años o quince años más allá».

Pues eso, mucha atención con lo de ‘comer perdices’, porque si uno de los dos miembros de la pareja es vegano o vegetariano, ya tenemos conflicto a la vista… (Soria ríe). “Ojalá ese fuera el mayor problema. Creo que nos han hecho crecer con unas ilusiones en lo que se refiere a las relaciones personales -y en particular a la pareja- sin contarnos cómo fue ese proceso. Claro que podemos vivir en pareja felices. Pero, ¿qué aspectos trabajamos a nivel individual y de pareja para que eso suceda? Eso nadie nos lo responde. Así que nos embarcamos en una relación copiando ciertos patrones, o haciendo todo lo contrario de lo que vimos, y como buenamente podemos vamos saliendo adelante”, señala.

Poli-allegados que aterrizan en el nido, con o sin permiso de sus moradores
‘El libro que salvará tu relación de pareja’. El título lo dice todo. No dice qué tipo de pareja ni por quién está formada, es decir, la obra es válida para cualquier modelo de relación (heterosexual, homosexual, lésbica, etc.). “Relata situaciones cotidianas que llevan al desgaste y al desencuentro. Habrá capítulos que se acerquen más a un tipo de parejas que a otras, según como sea cada una de ellas. Pero, además, es un libro en el que, a lo largo de las páginas, reconocemos nuestra relación, la de unos amigos, de familiares, la de nuestros padres…”, detalla Soria.

Hablando de amigos y familiares… si bien por ‘poliamor’ se entiende aquella relación amorosa mantenida y consentida entre varios individuos, habría que crear un nuevo concepto, por ejemplo el de ‘poli-allegados’, para definir a aquellos sujetos que van sobrevolando los nidos de amor -sobre todo cuando están habitados por congéneres influenciables- y que de vez en cuando deciden aportar y entrecruzar ramitas para consolidar los parapetos del refugio, con o sin permiso de sus moradores. Ahora bien, los pájaros del nido también tienen la capacidad de impedir esos vuelos (casi siempre bienintencionados, si bien en ocasiones pueden resultar dañinos para la pareja que anida) y el deber de dejar claro a los poli-allegados que cada uno tiene que cuidar de sus propias alas y no cuidar las de los demás. Claro que -todo hay que decirlo- también es lícito cuidar las de los demás cuando haya habido una petición previa de ayuda, o bien se pretenda evitar o parar un desastre, crisis o conflicto. Simplemente, hay que aplicar el sentido común.

Soria escribe: «Las nuevas generaciones conviven mucho antes de dar el primer paso de compromiso, sin embargo, antes nos lanzábamos a la piscina sin saber si había suficiente agua, convencidos de que era lo que nuestros valores y principios nos dictaban. Para ser honestos, hay que decir que una fórmula u otra no son garantía de éxito ni de eternidad. Y si no, ¿recuerdas tu primer año de vida en común? Yo sí. En ese momento me di cuenta de que si lo que me esperaba de mi matrimonio era lo mismo que estaba viviendo en esos primeros meses, ¡quería pedir ipso facto la hoja de reclamaciones! Nadie nos avisa de que la convivencia es dura de por sí, pero si a eso le añades que no vivimos dos, sino que vivimos en multitud, lo hace todavía más complicado. Y digo multitud porque siempre está la madre, la suegra o la hermana, queriendo dejar huella».

Para Soria, el grado de influencia de esas terceras personas en un nexo sentimental depende del vínculo que se tenga con esas terceras personas y la clase de relación que se mantenga con ellas. “Por ejemplo -precisa-, si cuando inicio una relación de pareja sigo mirando y teniendo en cuenta mi sistema familiar, de alguna manera desplazo a mi pareja, con lo que se sentirá ninguneada, o mis decisiones las basaré según lo que le interese a mi familia de origen. Si en mi familia de origen yo adopto un rol que no me corresponde, lo reproduciré en mi relación de pareja, con lo que no se producirá una relación de iguales”.

“Si todo lo que me ocurre en mi intimidad lo comparto con alguien de mi familia, que me quiere -por supuesto- y que está pendiente de mi bienestar, y a la cual le doy todo el poder de decisión, posiblemente me deje influenciar por su opinión. Si siento una necesidad de devolver todo lo que me dieron mis padres, y esto comporta que cargue con esa responsabilidad, también me influirá en mi relación de pareja. Por no decir cosas más simples, en las que no somos capaces de poner esos límites con esas terceras personas. Nos sentiremos invadidos, y como una de las dos partes se sienta dañada, tenemos la trifulca montada”, explica Soria.

“La pasión puede estar presente o no, con o sin juguete erótico”
«Compramos la idea de que ‘con AMOR todo se puede’ y no siempre es suficiente. Repito: las discusiones están presentes porque forma parte del ser humano ese deseo de imponer nuestra opinión, porque no nos comunicamos de manera asertiva y porque debemos desaprender comportamientos que van de serie en nuestro ADN si queremos vivir felices en pareja. Por no decir que mantener la pasión a lo largo de años de convivencia es un trabajo donde las dos partes tienen que aportar». ¿La pasión se sigue confundiendo con el sexo (relaciones sexuales) puro y duro? ¿La pasión es mucho más que hacer el amor los sábados por la noche usando algún juguete erótico de nueva adquisición para demostrarse a sí mismos que no hay rutina?

“El deseo es algo que tenemos que entrenar más allá de una relación sexual pensando en ella como finalista -sostiene la coach y escritora-. La pasión tiene que estar incluida en esa sexualidad de la que forma parte el autoconocimiento, el volver a besarnos y abrazarnos sin cronómetro, el acariciarnos, el estar de la mano... y la pasión puede estar presente o no, con o sin juguete erótico. La pasión también es una forma de vida, de entusiasmarte”.

Más allá de la vehemencia emocional, tampoco está de más hablar del influjo del dinero sobre los sentimientos, o, si se quiere decir de otra forma, del vínculo que puede haber entre economía y amor. El saber popular dice que ‘el dinero no da la felicidad, pero ayuda’. De todos modos, hay algunas parejas millonarias que son infelices, quizás porque el origen de su adversidad sea un hecho trágico e insalvable, o quizás porque no quieran o no sepan dejarse ayudar por el potencial de sus cuentas corrientes. “Cada una de esas parejas será infeliz por distintas razones. Ojalá conociera todos los casos para dar una respuesta. Creo que va más allá de un simple ‘dejarse ayudar’ por su cuenta corriente. Los millonarios son personas que tendrán sus luces y sombras, y ahí estará la clave de sus males”, aduce Soria.

‘El libro que salvará tu relación de pareja’… según su autora, es un manual que incluso puede ser de gran interés para aquellos que se ganan la vida con separaciones y divorcios (abogados, por ejemplo): “hay un último capítulo dedicado a las rupturas. No creo que les desagrade este libro. Pero eso ya lo dejo a cada cual”.