Redacción Farmacosalud.com
Un estudio realizado por profesionales sanitarios del Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz ha demostrado que el uso de un fármaco basado en anticuerpos monoclonales, concretamente los inhibidores de la proteína convertasa subtilisina/kexina tipo 9 (iPCSK9), reduce los niveles de colesterol y triglicéridos en los pacientes con Enfermedad Renal Crónica (aquella que hace que los riñones dejen de funcionar), lo que permite alcanzar y mejorar los objetivos terapéuticos con estos enfermos y mantener además su función renal estable.
Los inhibidores de la PCSK9 son un tipo de medicamentos que constituyen una novedad para el tratamiento de las enfermedades de colesterol alto (hipercolesterolemias), y que utilizan una nueva diana terapéutica y un mecanismo de acción totalmente distinto al de otros fármacos empleados hasta el momento. En concreto, estos medicamentos contienen una proteína especializada, diseñada para fijarse a una sustancia diana del organismo, que, en este caso, bloquea la proteína PCSK9, permitiendo así aumentar el número de receptores disponibles para ayudar a eliminar el colesterol ‘malo’ del cuerpo y así reducirlo.
Análisis de una cohorte de pacientes entre los años 2016 y 2020
Hasta la fecha, los estudios sobre el uso de estas terapias en pacientes con Enfermedad Renal Crónica (ERC) eran muy escasos, por lo que los profesionales del Hospital Puerta del Mar de Cádiz desarrollaron la nueva investigación para determinar si su aplicación era beneficiosa para estos sujetos, algo que ha quedado demostrado. En el trabajo, que se ha presentado en el Congreso anual de la Sociedad Española de Nefrología (S.E.N.), han participado profesionales de los servicios de Nefrología, Cardiología y Farmacia del hospital gaditano, quienes analizaron una cohorte de pacientes con ERC que iniciaron tratamiento con iPCSK9 en el centro entre los años 2016 y 2020. Todos los participantes tuvieron al menos 2 años de seguimiento tras la administración del fármaco, comparando cifras de colesterol total, colesterol LDL, triglicéridos y filtrado glomerular al inicio del tratamiento, a los 6, 12 y 24 meses.
Durante el periodo de la investigación, un total de 278 pacientes iniciaron tratamiento con iPCSK9 en el hospital, de los cuales, 41 presentaban ERC (el 51% eran hombres con una edad media de más de 70 años). El 83% de estos enfermos presentaban dislipemia y el 87% habían sufrido eventos coronarios. Tras 6 meses de tratamiento, se observó una reducción significativa en las cifras de colesterol total, de colesterol LDL, y de triglicéridos, manteniéndose estas diferencias a los 2 años de tratamiento. El 48% de los sujetos alcanzaron objetivos de disminución de c-LDL (colesterol ‘malo’) a los 6 meses de tratamiento y el 48% a los 12 meses, manteniéndose la función renal estable durante el seguimiento. Asimismo, no se detectaron efectos secundarios al tratamiento con iPCSK9 ni eventos cardiovasculares.
Casi siete millones de españoles afectos de ERC
De este modo, los autores de la investigación concluyeron que el uso de los inhibidores iPCSK9 reduce el colesterol, el c-LDL y triglicéridos en los pacientes con ERC, por lo que recomiendan que, dadas las ventajas iniciales de la administración de este tipo de medicamentos, se deberían diseñar ensayos clínicos dirigidos a esta población que permitan confirmar su uso como terapia generalizada.
Los resultados del estudio se han presentado en el 52º Congreso Nacional de la S.E.N., celebrado hace unos días en Granada. La ERC es una patología que, a pesar de afectar a casi siete millones de españoles y tener un fuerte impacto en la calidad de vida de las personas, sigue siendo una gran desconocida para la mayoría de la población, representando además una importante carga para el sistema sanitario.