Redacción Farmacosalud.com

Uno de los objetivos que se ha marcado Matilde Sánchez Reyes como nueva presidenta de la Federación de Distribuidores Farmacéuticos (FEDIFAR) es “lograr que se visualice el papel esencial que juega la distribución farmacéutica dentro del Sistema Nacional de Salud (SNS)”. En este sentido, Sánchez Reyes reivindica la labor desarrollada por su sector durante la crisis sanitaria provocada por el coronavirus SARS-CoV-2: “El 94% de los ciudadanos señaló que, durante los primeros meses de pandemia, los más complicados, tuvo acceso a los medicamentos que necesitaba con total normalidad a través de las farmacias. Todo fue posible gracias a las estructuras sólidas y la eficaz gestión empresarial con las que cuentan las empresas del sector asociadas a FEDIFAR”. En ello, claro está, puede haber influido el hecho de que el sector farmacéutico en España haya invertido en los últimos tiempos “muchos recursos en innovación tecnológica”, lo que, traducido en términos logísticos, ha comportado que tanto las farmacias como los almacenes de los mayoristas estén actualmente “a la vanguardia de la robotización en Europa”, según señala.

-Usted encabeza la patronal que representa a todas las empresas de distribución farmacéutica de gama completa que operan en España. ¿Qué quiere decir ‘gama completa’, qué actividad en concreto desarrolla FEDIFAR?
El término distribución de gama completa se refiere a un modelo de distribución farmacéutica que garantiza el suministro de la oferta completa de medicamentos y productos sanitarios, más de 30.000 referencias, con independencia de cuál sea su precio o su nivel de rotación. Por su parte, FEDIFAR es la patronal que representa a la totalidad de las entidades de distribución farmacéutica de gama completa, 19 empresas que cuentan con más del 97% de la cuota de mercado del sector. Estas empresas son las encargadas de suministrar medicamentos y productos farmacéuticos a las 22.100 farmacias de España, con independencia de dónde se ubiquen, para que los pongan a disposición de todos los ciudadanos en condiciones de equidad, calidad y seguridad.

-¿Cuáles son sus objetivos al frente de la organización?
El objetivo principal que me fijo como presidenta de la patronal es la defensa de los intereses de todas las empresas de distribución farmacéutica de gama completa. FEDIFAR es el interlocutor válido de la distribución farmacéutica que opera en España, por lo que le corresponde a la patronal establecer los marcos de diálogo y colaboración tanto con las autoridades sanitarias como con el resto de los agentes que conforman el sector sanitario. Otro objetivo importante es lograr que se visualice el papel esencial que juega la distribución farmacéutica dentro del Sistema Nacional de Salud (SNS).

-Matilde Sánchez Reyes es la primera mujer que comanda la patronal farmacéutica española… ¿En aras de alcanzar una normalidad social, el género de la persona elegida para dirigir una institución debería empezar a dejar de ser noticia?
El ser la primera mujer que preside la patronal de la distribución farmacéutica en España es algo que veo con normalidad. Estoy de acuerdo con usted en que el hecho de que una mujer acceda a un puesto institucional de máxima responsabilidad es algo que debe de dejar de ser noticia, y creo que se va en esa dirección. Llevo trabajando muchos años en el sector farmacéutico, un sector eminentemente femenino en el que tenemos numerosos ejemplos de mujeres que presiden empresas de distribución, colegios profesionales, instituciones farmacéuticas... Al margen de ello, pienso que cualquier empresa o institución debe contar con las personas mejor preparadas, con independencia de que sean hombres o mujeres.

-Así pues, según sus palabras, los mayoristas farmacéuticos de gama completa forman parte esencial de la cadena del medicamento y, por tanto, del SNS, al garantizar el acceso de los ciudadanos a los medicamentos y productos sanitarios. ¿Cree usted que el ciudadano de a pie sabe que detrás de un farmacéutico que dispensa fármacos hay todo un gran engranaje logístico?
Todo el mundo sabe cuál es la labor que desempeña un laboratorio o el trabajo que realiza la farmacia; sin embargo, el eslabón que hay entre ellos es el más desconocido de esta cadena, y es la distribución farmacéutica, que permite que el producto que fabrica el laboratorio pueda ser dispensado por la farmacia. No sólo ocurre en el sector farmacéutico, dado que la labor logística de los operadores de otros sectores tampoco suele ser conocida por el ciudadano de a pie.

No obstante, esta circunstancia varió sensiblemente durante la crisis sanitaria provocada por la pandemia, ya que en este periodo los ciudadanos sí fueron más conscientes del importante trabajo que llevan a cabo las empresas de distribución que operan en España: suministro de mascarillas y productos de protección frente a la COVID-19, distribución de vacunas… De todos modos, creo que más importante que ese conocimiento, es la labor en sí que desarrollan las empresas de distribución dentro del Sistema Nacional de Salud.

-¿Cómo está afectando la pandemia de COVID-19 a la organización que usted representa?
Durante la pandemia los mayoristas farmacéuticos y todos sus trabajadores han llevado a cabo un trabajo excelente. Desde la patronal de la distribución farmacéutica, FEDIFAR, se ha realizado una gran labor institucional, poniéndose en todo momento al servicio de las autoridades sanitarias y trabajando intensamente junto al resto de agentes del sector farmacéutico para que las empresas pudiesen garantizar el normal suministro de medicamentos y productos sanitarios. Es algo que los ciudadanos han reconocido.

En este sentido, y pese a las dificultades derivadas de la COVID-19, una encuesta realizada por GAD-3 arrojó un dato revelador: el 94% de los ciudadanos señaló que, durante los primeros meses de pandemia, los más complicados, tuvo acceso a los medicamentos que necesitaba con total normalidad a través de las farmacias. Todo fue posible gracias a las estructuras sólidas y la eficaz gestión empresarial con las que cuentan las empresas del sector asociadas a FEDIFAR, algo que posibilitó reforzar rutas y plantillas, gestionar los stocks de aquellos medicamentos que podían presentar problemas de abastecimiento, acudir a mercados inestables para adquirir material de protección frente a la COVID-19, participar en la logística de distribución de vacunas…

-¿Los distribuidores farmacéuticos que desarrollan su trabajo en el ámbito rural deben operar en condiciones más complicadas que en los entornos urbanos? ¿O bien cada uno tiene sus propios problemas?
La labor principal de todas las empresas de distribución farmacéutica de gama completa es suministrar la oferta completa de medicamentos y productos sanitarios a las 22.100 farmacias españolas en condiciones de equidad, con independencia de que éstas estén ubicadas en una gran ciudad o en una remota localidad rural. La distribución farmacéutica de gama completa permite que el código postal no determine el acceso al medicamento, por lo que todas las empresas desarrollan su labor en el ámbito urbano y en zonas rurales.

Lógicamente, para las empresas no tienen la misma rentabilidad las rutas que se realizan dentro de las grandes ciudades que las que ofrecen servicio a farmacias ubicadas en pequeñas localidades rurales, pero nuestro compromiso con la salud hace que el modelo de distribución que seguimos detraiga recursos de las operaciones rentables para sufragar las no rentables. Esa es una de las grandes fortalezas de una distribución farmacéutica que permite sostener un modelo farmacéutico de gran capilaridad, que es un gran valor sanitario para la sociedad.

-¿Qué le parece la irrupción de los robots de almacenamiento farmacéutico?
La robotización, tanto de las oficinas de farmacia como de los almacenes de distribución, no es algo que haya irrumpido ahora, sino que llevamos años implementando en nuestras farmacias y en nuestros almacenes la tecnología más puntera del mercado. El sector farmacéutico en España ha invertido muchos recursos en innovación tecnológica, y tanto las farmacias como los almacenes de los mayoristas farmacéuticos están altamente robotizados. Es más, puedo afirmar que estamos a la vanguardia de la robotización en Europa.