Redacción Farmacosalud.com
Un estudio realizado en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, con datos reales de pacientes con cáncer de mama, ha demostrado los buenos resultados del tratamiento médico para esta patología mediante el uso del fármaco trastuzumab-emtansina (TDM1) para la segunda línea de tratamiento, en pacientes que previamente fueron tratados con pertuzumab en primera línea de tratamiento.
Se trata de un estudio pionero en España que corrobora lo que ya algunos ensayos clínicos habían confirmado en cuanto al éxito de la aplicación TDM1 en pacientes con cáncer de mama y que recibían este tratamiento en segunda línea, pero que no habían recibido como tratamiento inicial el pertuzumab y quimioterapia. Lo más importante, en este sentido, es que el estudio se ha desarrollado sobre población real con pacientes que han recibido este tratamiento, y que han confirmado los buenos resultados en cuanto el aumento de la supervivencia libre de progresión (SLP) en este tipo de enfermas. De este modo, el estudio se equipara a otros estudios americanos sobre los nuevos tratamientos y terapias oncológicas realizados en enfermos de cáncer, en este caso con mujeres con cáncer de mama.
“El tratamiento con TDM1 está aprobado en segunda línea de tratamiento para pacientes con cáncer de mama agresivo, pero su eficacia no ha sido corroborada tras la aplicación de pertuzumab, trastuzumab y quimioterapia para la primera línea en mujeres con este tipo de tumores, y sobre todo teniendo en cuenta los resultados de casos reales, no en ensayos clínicos anteriores”, indican Manuel Ruiz, impulsor del estudio, y Alejandro Falcón, coordinador, ambos doctores oncólogos.
La edad media de las pacientes, de 48 años
El trabajo, que se ha presentado en las comunicaciones del IV Congreso de la Andaluza de Oncología Médica, celebrado en Sevilla, se desarrolló en pacientes con tumor mamario con una edad media de 48 años, todas ellas tratadas como TDM1 tras uso previo de pertuzumab, trastuzumab y quimioterapia en primera línea de tratamiento. El tratamiento se mantuvo hasta la interrupción por progresión del tumor, pero con un 30% de pacientes que tuvieron una respuesta parcial al tratamiento, demostrando así un aumento de la tasa de supervivencia y destacando además la buena tolerancia a la terapia.
El objetivo es ahora aumentar el análisis de estos datos con un estudio intercentro que recopile los casos de todos los hospitales andaluces, de manera que se amplíe la cohorte y se incluyan todos los datos reales de la supervivencia libre de progresión en la población andaluza, lo que permitiría tener uno de los pocos informes que existen con datos reales a nivel nacional e internacional en pacientes con cáncer de mama que son sometidos a este tratamiento, y que por tanto, seguir avanzando en la aplicación de nuevas terapias para el cáncer en general.