Redacción Farmacosalud.com
La unidad de Cardiología Pediátrica en el Hospital Universitario Virgen del Rocío (Sevilla) ha puesto en funcionamiento un programa experimental de investigación llamado ‘Cardioshape’ para ayudar a entrenar a pacientes con cardiopatías mediante la realidad virtual. Estos jóvenes pacientes podrán realizar ejercicio desde casa con unas gafas de realidad virtual gracias a la participación de la empresa andaluza Oblumi, encargada de desarrollarlo, y la colaboración de la Fundación Pública Andaluza para la Gestión de la Investigación en Salud de Sevilla (FISEVI).
Las cardiopatías congénitas son, en la mayoría de los casos, enfermedades del corazón presentes desde el nacimiento. En muchas ocasiones los pacientes sufren desde niños intervenciones complejas con recuperaciones lentas, y su capacidad de ejercicio queda afectada. Además, con frecuencia, son considerados demasiado frágiles para la realización de actividad física, cuando en realidad un estilo de vida no sedentario y la práctica de ejercicio adaptada a sus circunstancias es fundamental para un mejor pronóstico y una mejor calidad de vida. Gracias a este nuevo proyecto con realidad virtual, los pacientes hacen deporte según sus capacidades, de una forma divertida, motivadora, y sin salir de casa.
Una prueba funcional como primer paso
El primer paso es realizar una prueba funcional en la que se determina la intensidad del ejercicio que debe realizar cada paciente. El mismo día participan en una sola sesión de deporte con realidad virtual en el hospital, donde se ajustan los parámetros específicos a cada paciente según los resultados de la prueba previa, y se les enseña a manejar esta herramienta desde su domicilio.
Una vez realizado este proceso, los menores podrán llevarse el equipo a casa y empezar su entrenamiento. En principio son 12 semanas de ejercicio en sesiones de una media hora.
Esta innovadora tecnología permite que los especialistas realicen un exhaustivo seguimiento del paciente desde el hospital, además de controlar si están practicando actividad física o no. El profesional dispone de acceso a una web y posibilidad de modificar el programa de intensidad que usa las gafas de realidad virtual, para que hagan más esfuerzo o menos dependiendo de su progreso con esta técnica y la capacidad física que vayan adquiriendo.
Por todo, este proyecto, que se inició el año pasado, va demostrando que ayuda y motiva a los niños a iniciar y mantener un ejercicio controlado. Igualmente, tiene beneficios físicos y un impacto significativamente positivo en la autoestima del menor, al comprobar sus avances desde el punto de vista físico. Asimismo, hay una mejora de las habilidades sociales al haber mayores oportunidades de relacionarse con otros chicos, favoreciéndose además el desarrollo de las capacidades perceptivas y motoras, que influyen de una manera importante en el rendimiento académico y en el desarrollo de las capacidades cognitivas.