Redacción Farmacosalud.com
Recientemente, se ha propuesto un innovador tratamiento no invasivo contra el cáncer basado en la aplicación continua de campos eléctricos de muy baja intensidad con frecuencias entre 100 y 300 kHz mediante dispositivos portátiles que los pacientes llevan encima durante sus actividades diarias, ha informado la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona (UPF). Estos campos eléctricos se conocen como Tumor Tratamiento Fields (TTFields) y se tiene la hipótesis de que su efecto sobre el crecimiento del tumor se debe a la inhibición de la división celular (mitosis). En un trabajo publicado en la revista ‘Bioelectrochemistry’, Quim Castellví y Antonio Ivorra, investigadores del Biomedical Electronics Research Group (BERG) del Departamento de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (DTIC) de la UPF, conjuntamente con Mireia M. Ginestà y Gabriel Capellà, investigadores del Instituto Catalán de Oncología del Hospital Duran y Reynals, han realizado un estudio in vivo en ratones a los que se les implantó subcutáneamente tumores pancreáticos de origen humano.
La aplicación de electricidad en los organismos siempre genera calor y el objetivo de la investigación ha sido comprobar si los efectos beneficiosos de los TTFields son causados por el aumento de la temperatura producida por el campo eléctrico o por el efecto directo de los campos eléctricos sobre el tumor. Para el estudio experimental, los dispositivos de tratamiento se sujetaron sobre el lomo de los ratones -en los que previamente se había implantado el tumor- mediante un arnés de silicona. Así, durante una semana, a un grupo de ratones se les trató con una ligera hipertermia (41 ° C), mientras que el otro grupo recibió el tratamiento TTFields (6 V / cm, 150 kHz), con el fin de comprobar en ambos grupos el crecimiento tumoral del implante subcutáneo.
Por sí solo, el método TTFields no produce ningún efecto significativo
Los resultados del estudio mostraron que, por sí solo, el tratamiento TTFields no produce ningún efecto significativo, pero la combinación TTFields con quimioterapia sí evidenció un retraso en el crecimiento del tumor en comparación con los animales tratados sólo con quimioterapia (un 47% de media de reducción relativa del crecimiento tumoral). El cáncer de páncreas es muy agresivo y por ahora los recursos terapéuticos disponibles son muy limitados, por lo que conseguir ralentizar su progresión es una oportunidad para el paciente -en caso de que el experimento con animales tuviera éxito en humanos- porque se gana tiempo a la enfermedad a la espera de que puedan aparecer nuevos tratamientos más efectivos.
La conclusión del trabajo, como ha explicado Ivorra, ha sido que "la combinación de quimioterapia y TTFields muestra un efecto beneficioso, retrasando el crecimiento del tumor de páncreas en un modelo animal in vivo y, contrariamente a lo que nosotros pensábamos, este efecto no parece estar relacionado con el aumento inducido de la temperatura". Además, añade Ivorra "nosotros, que hacemos investigación en la aplicación de campos eléctricos mucho más intensos (cientos de veces superiores) para la eliminación de tumores locales gracias al fenómeno de la electroporación, nos ha sorprendido el impacto de los TTFields". El efecto positivo de los TTFields, aunque moderado, podría ofrecer nuevas posibilidades terapéuticas para tumores malignos. De hecho, ya se está ensayando clínicamente para el tratamiento de glioblastomas, uno de los cánceres cerebrales con una prognosis más desfavorable.
Trabajo de referencia:
Quim Castellví, Mireia M. Ginestà, Gabriel Capellà i Antoni Ivorra (2015), “Tumor growth delay by adjuvant alternating electric fields wich appears non-thermally mediated”, Bioelectrochemistry, 105, pp. 16-24. Doi: http://dx.doi.org/10.1016/J.bioelechem.2015.04.006.