Redacción Farmacosalud.com
Varios son los avances que se han conocido en el marco del Congreso de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO, por sus siglas en inglés) 2019, evento celebrado estos días en Barcelona.
Atezolizumab + bevacizumab, avance en cáncer hepático
Roche ha presentado los resultados de un estudio fase Ib que evalúa la eficacia y seguridad de Tecentriq® (atezolizumab) en combinación con Avastin® (bevacizumab) como tratamiento para pacientes con carcinoma hepatocelular no resecable, el cáncer de hígado más frecuente, y que no habían sido tratados previamente con terapia sistémica[1]. Los datos no aleatorizados del grupo tratado con Tecentriq y Avastin (brazo A) mostraron respuestas clínicamente significativas y duraderas después de una mediana de seguimiento de 12.4 meses, con una tasa de respuesta objetiva (TRO) confirmada del 36% (IC 95% 26-46) por revisión central según RECIST v1.1. Los datos también mostraron que el 12% de los pacientes lograron una respuesta completa al tratamiento.
Aún no se dispone de resultados de la mediana de duración de respuesta (DR). La mediana de Supervivencia Libre de Progresión (SLP), según RECIST v1.1, un objetivo secundario de eficacia en el estudio, fue de 7,3 meses (IC del 95%: 5,4 a 9,9)[2]. Para los datos aleatorizados del estudio (brazo F), que evalúan el enfoque de la combinación de Tecentriq y Avastin versus monoterapia con Tecentriq en monoterapia, se cumplió el objetivo primario de eficacia que era la SLP, evaluada por RECIST v1.1; la combinación redujo el riesgo de empeoramiento de la enfermedad o muerte en un 45% en comparación con Tecentriq en monoterapia. Después de una mediana de seguimiento de 6.6 meses, los resultados muestran la superioridad de la combinación de Tecentriq y Avastin sobre Tecentriq en monoterapia (HR = 0.55, IC 80% 0.40–0.74, p = 0.0108). La mediana de SLP en el brazo que recibió Tecentriq y Avastin fue de 5,6 meses (IC del 95%: 3,6–7,4) en comparación con 3,4 meses (IC del 95%: 1,9–5,2) en el tratado con Tecentriq en monoterapia[2].
Cáncer de ovario: niraparib, olaparib+bevacizumab, y veliparib
Un estudio internacional[3], liderado el Dr. Antonio González Martín, codirector del Departamento de Oncología de la Clínica Universidad de Navarra y presidente del Grupo Español de Investigación en Cáncer de Ovario (GEICO), demuestra que administrar niraparib tras el tratamiento de quimioterapia convencional en pacientes recién diagnosticadas de cáncer ovario avanzado mejora su supervivencia libre de progresión y reduce su riesgo de recaída o muerte por esta enfermedad. La investigación se publica en ‘The New England Journal of Medicine’, revista médica líder en el mundo.
“En este estudio hemos evaluado los beneficios de emplear niraparib tras el tratamiento estándar de cáncer de ovario basado en quimioterapia. Con este nuevo abordaje terapéutico hemos observado una mejora significativa de la supervivencia de las pacientes y una reducción de casi un 40% de su riesgo de recaída”, señala el Dr. González Martín, primer autor del artículo.
El trabajo consistió en añadir niraparib tras el tratamiento convencional de primera línea de quimioterapia para estas pacientes. Niraparib es un potente fármaco inhibidor de PARP (una enzima implicada en la reparación del ADN y la muerte celular) que se emplea como terapia de mantenimiento en mujeres con recaída de cáncer de ovario, tengan o no mutado el gen BRCA (asociado al riesgo de padecer esta enfermedad). A su vez, se estudió también el efecto de este tratamiento en pacientes con un tipo de defecto en la reparación del ADN llamado deficiencia de la recombinación homóloga (HRD). En las pacientes que sí mostraron esta deficiencia (la mitad de las mujeres del estudio), el beneficio del tratamiento fue aún mayor consiguiendo una reducción del riesgo de recaída o progresión de la enfermedad de un 57%.
A todo esto, se ha mostrado el beneficio de añadir un segundo fármaco al tratamiento estándar actual que se administra tras la cirugía para prevenir las recaídas del cáncer de ovario. Tanto en pacientes con mutación en el gen BRCA como sin esta mutación, añadir el inhibidor PARP olaparib junto a bevacizumab puede extender la supervivencia libre de progresión en pacientes con cáncer de ovario avanzado, según los resultados del estudio PAOLA-1[4].
La mediana de seguimiento fue de 24 meses en el grupo de olaparib y de 22,7 meses en el brazo de placebo. La mediana de supervivencia libre de progresión fue de 22,1 meses en el grupo de pacientes tratadas con olaparib y de 16,6 meses en el grupo de placebo (tasa de riesgo 0,59; intervalo de confianza 95% 0,49-0,72; p<0,0001).
Como explica el Dr Andrés Cervantes, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Clínico Universitario de Valencia y presidente electo de ESMO, la reducción del riesgo de progresión de la enfermedad fue del 41% en el grupo de mujeres que recibió olaparib. “Es decir, de cada 100 mujeres que experimentaron una recaída en el grupo tratado con bevacizumab y placebo, recayeron 59 en el grupo de olaparib”. Un efecto que fue incluso más marcado en aquel subgrupo de mujeres con mutación en el gen BRCA, en las que la reducción del riesgo obtenida al añadir el inhibidor de PARP a bevacizumab alcanzó el 69% (100 recaídas en el grupo control frente a 31 entre las que recibieron el nuevo tratamiento).
Concretamente, la mediana de supervivencia libre de progresión con olaparib llegó a los 37,2 meses en pacientes con mutaciones en BRCA y en pacientes con recombinación homóloga (HRD), otra mutación asociada a buena respuesta a los inhibidores de PARP. “Los resultados en pacientes con HRD sin mutación BRCA identifican, por primera vez, una población de pacientes con mayor beneficio clínico al emplear olaparib añadido a bevacizumab”, indica la Prof. Isabelle Ray-Coquard, del Centro Leon Bérard y la Universidad Claude Bernard de Lyon (Francia).
Por su parte, el investigador Dr. Jesús García-Donas, jefe de la Unidad de Tumores Ginecológicos y Genitourinarios y de la Piel del Centro Integral Oncológico Clara Campal HM CIOCC, ha participado como uno de los autores principales en un ensayo clínico multicéntrico cuya principal conclusión reside en que abre nuevas esperanzas a las pacientes de tumor ovárico maligno. En concreto, este estudio prueba que la combinación del fármaco veliparib con el tratamiento de quimioterapia inicial, mejora los resultados de eficacia en toda la población estudiada tengan o no, mutaciones del gen BRCA.
Para García-Donas, “este estudio representa uno de los mayores avances en esta enfermedad en los últimos años y es un paso muy importante en una enfermedad con una alta tasa de mortalidad en la que las alternativas terapéuticas son limitadas. Es muy probable que este estudio dé lugar a la aprobación del uso de veliparib en primera línea de cáncer de ovario. De ser así, pasaría a incorporarse a la práctica asistencial y el cuidado de nuestros pacientes. Pero aun así, sigue tratándose de una enfermedad grave en la que es imprescindible un esfuerzo investigador mantenido que permita avanzar hacia su resolución”.
Uno de los factores más relevantes de este estudio, que ha despertado un gran impacto dentro de la comunidad científica, reside en que la utilidad de veliparib es superior a lo imaginado inicialmente. “Este fármaco pertenece a la familia de los ‘inhibidores de PARP’. Aunque inicialmente se pensó que solo serían útiles en mujeres que presentaran mutaciones en los genes BRCA1 y 2 cada vez existe más evidencia de que ese beneficio es general y puede darse en cualquier caso.
iCDK4/6 + fulvestrant, e inmunoterapia frente al cáncer de mama
Nuevos datos de dos estudios han mostrado que el tratamiento con fármacos inhibidores de CDK4/6 en combinación con fulvestrant mejoran la supervivencia global de pacientes con cáncer de mama avanzado con receptores hormonales positivos (HR+) y HER2 negativo[5,6]. Además, un tercer estudio sobre inmunoterapia en cáncer de mama ha arrojado resultados positivos en una forma particularmente agresiva de cáncer de mama: el subtipo triple negativo.
En los dos primeros trabajos se incluyeron poblaciones de pacientes diferentes y se estudiaron fármacos distintos en momentos diversos del curso terapéutico. Por un lado, el estudio Monaleesa-3 analizó ribociclib y fulvestrant como terapia de primera o segunda línea en mujeres postmenopáusicas; mientras que el estudio Monarch 2 evaluó abemaciclib y fulvestrant en pacientes con cáncer de mama avanzado tras fracasar la terapia endocrina, independientemente del estado menopáusico.
Los resultados de Monaleesa-3 muestran una mejora en la supervivencia global de pacientes con cáncer de mama HR+ HER2- avanzado con ribociclib más fulvestrant en primera y segunda línea. Los beneficios de la combinación de ambos fármacos se observaron en pacientes que no habían recibido terapia hormonal previa y en aquellas que habían desarrollado resistencia a la terapia endocrina. El estudio Monarch 2, por su parte, ha mostrado mejoría estadística y clínicamente relevante en la supervivencia global con el inhibidor CDK4/6 abemaciclib combinado con fulvestrant en mujeres premenopáusicas, perimenopáusicas y postmenopáusicas con cáncer de mama avanzado HR+ HER-, resistente a terapia hormonal.
Por otra parte, los últimos datos del estudio KEYNOTE-522[7] indican que la inmunoterapia añadida a la quimioterapia mejora la respuesta patológica completa en pacientes con cáncer de mama triple negativo en fase precoz. Los resultados preliminares de este trabajo, el primer estudio en fase III de inmunoterapia en cáncer de mama en su fase inicial, también apuntan a una mejoría en supervivencia libre de recaídas. “Estos datos sugieren que la mejoría en la respuesta patológica completa con pembrolizumab se traduce en menos recurrencias”, señala el Prof. Peter Schmid, de la Universidad Queen Mary de Londres (Reino Unido).
El triple negativo es el subtipo más agresivo del tumor mamario, y afecta con mayor frecuencia a mujeres jóvenes. Las pacientes suelen recibir quimioterapia, seguida de cirugía para la extirpación del tumor. Esto ofrece las mejores probabilidades de obtener una respuesta patológica completa, lo cual significa que no existen restos de células cancerígenas en el lugar de la intervención quirúrgica. Las mujeres con una respuesta patológica completa tienen una probabilidad del 85-90% de curarse, mientras que en aquellas con tejido tumoral residual la probabilidad de recurrencia es del 40-50%, lo que suele suceder en un plazo de tres años.
Osimertinib, y nivolumab+ipilimumab, frente al cáncer de pulmón
Los ensayos FLAURA y CHECKMATE 227 avalan el empleo de nuevas alternativas terapéuticas a la quimioterapia en primera línea de tratamiento en cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) avanzado. Los resultados de ambos ensayos muestran una mejora de la supervivencia global. Por un lado, el estudio fase III aleatorio y multicéntrico FLAURA[8] se centra en pacientes con CPNM avanzado con mutación de EGFR (siglas en inglés del receptor del factor de crecimiento epidérmico) que no habían recibido tratamiento previamente. Se asignó al azar a un grupo de 556 pacientes en una proporción de 1:1 a recibir tratamiento con osimertinib (un fármaco dirigido inhibidor de la tirosina quinasa, TK, de tercera generación) por vía oral (n=279) o un inhibidor de primera generación (erlotinib o gefitinib).
Osimertinib se asoció a una mejora significativa en la supervivencia global frente al tratamiento de comparación. La mediana de supervivencia fue de 38,6 meses en el brazo de osimertinib, y de 31,8 meses en el grupo de control. La tasa de supervivencia a 36 meses fue del 54% y del 44% para cada uno de los brazos, respectivamente. Los datos sobre seguridad son similares a los publicados en estudios previos. Los autores concluyeron que osimertinib proporcionó una mejoría significativa tanto estadísticamente como desde el punto de vista clínico en la supervivencia global respecto al TKI-EGFR comparador elegido por el investigador.
Por otro lado, el estudio CHECKMATE 227[9] es un estudio fase III en el cual se reclutó a 1.189 pacientes con cáncer de pulmón no microcítico en estadio IV o en recaída. En la parte 1 del ensayo los pacientes con expresión de PD-L1 de al menos el 1% (1.189) fueron aleatorizados en tres opciones de tratamiento: nivolumab más ipilimumab a bajas dosis; nivolumab solo o quimioterapia. Los pacientes con PD-L1<1% (n=550) recibieron nivolumab más ipilimumab a bajas dosis, nivolumab más quimioterapia o solo quimioterapia.
La supervivencia global fue significativamente superior con la combinación de inmunoterapia frente a la quimioterapia en todos los subgrupos (PD-L1>1%, PD-L1<1% y todos los pacientes randomizados con independencia del nivel de PD-L1). El perfil de seguridad de la combinación fue consistente con los hallazgos previos en pacientes con cáncer de pulmón no microcítico avanzado. Los autores concluyen que la combinación de nivolumab+ipilimumab representa una nueva opción de tratamiento para estos pacientes.
Inhibidores de BRAF, MEK y EGFR en cáncer colorrectal
Un trabajo liderado por el Dr. Josep Tabernero, presidente de ESMO, director del Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO) y, al frente, además, del Grupo de Tumores Gastrointestinales y Endocrinos del VHIO (Barcelona), con la colaboración de la Dra. Elena Élez, investigadora del mismo grupo, apunta a que una triple combinación de fármacos, inhibidores de BRAF (encorafenib), MEK (binimetinib) y EGFR (cetuximab), resulta efectiva para lograr una supervivencia global significativamente más larga y una tasa de respuesta más alta que la terapia estándar en pacientes con cáncer colorrectal metastásico con la mutación BRAF V600E. La nueva investigación supone una opción nueva de tratamiento para unos pacientes que hasta la fecha no contaban con alternativas terapéuticas exitosas en este tipo de tumor con particular mal pronóstico.
BEACON CRC (binimetinib, encorafenib y cetuximab combinados para tratar el cáncer colorrectal mutante BRAF) es un ensayo global, multicéntrico, aleatorizado, abierto, de fase III. “En este estudio, se han incluido pacientes con cáncer colorrectal metastásico confirmado histológicamente con la mutación BRAF V600E que habían tenido progresión de la enfermedad después de uno o dos regímenes de tratamiento previos”, explica la Dra. Élez.
En total, se incluyeron 655 pacientes que fueron asignados aleatoriamente en grupos de terapia de triplete (encorafenib, binimetinib y cetuximab), un grupo de doble terapia (encorafenib y cetuximab) y un tercer grupo de control con cetuxmab e irinotecan o FOLFIRI (ácido folínico, fluorouracilo e irinotecan).
Olaparib y cabazitaxel contra el cáncer de próstata
Asimismo, se han conocido datos prometedores de un nuevo tratamiento para pacientes con cáncer de próstata avanzado resistente a la terapia hormonal: se trata de una terapia oral (olaparib) dirigida a aquellos tumores cuyas células tienen defectos en la reparación del ADN. Olaparib se ha mostrado eficaz a la hora de ralentizar la progresión del cáncer y potencialmente mejorar la supervivencia a largo plazo. Los resultados del estudio PROfound, en el que se ha testado este fármaco, muestran que la progresión de la dolencia se retrasó en torno a los cuatro meses cuando olaparib se comparaba con una terapia hormonal. Los datos preliminares, además, sugieren una mejora de la supervivencia superior a los tres meses[10].
Refiriéndose al estudio PROfound, la Dra. Eleni Efstathiou, del Centro para el Cáncer MD Anderson, de Houston (Estados Unidos), dice: “Estamos ante un ensayo crucial, ya que es el primer ensayo en fase III que analiza de forma específica tumores que albergan una alteración molecular que puede ser una diana terapéutica. En pacientes con este tipo de tumores, el tratamiento con olaparib retrasó la progresión de la enfermedad un 66% comparado con los nuevos agentes hormonales que se usaron en el estudio PROfound. Es un hallazgo impresionante, porque es una mejoría considerablemente mayor que las que considerábamos aceptables en estudios anteriores sobre cáncer de próstata en estas fases avanzadas, 35-40%. Hay una tendencia a mejorar la supervivencia, pero es necesario esperar a completar el análisis de los datos”.
“No deberíamos ignorar los efectos adversos significativos, como anemia y náuseas, que fueron más frecuentes con olaparib, ya que pueden tener un importante impacto en la capacidad del paciente para tomar el fármaco. En la práctica, los pacientes necesitarán ser monitorizados con atención”, añade.
Por otro lado, los datos publicados en ‘New England Journal of Medicine’ muestran que los pacientes con tumor prostático metastásico resistente a la castración (CPRCm) tratados previamente con docetaxel, que progresaron en un plazo de 12 meses mientras recibían nuevos agentes hormonales (abiraterona o enzalutamida), presentaron una supervivencia libre de progresión radiográfica (SLPr) significativamente superior con Jevtana® (cabazitaxel) cuando se comparó con abiraterona o enzalutamida. La supervivencia global (SG) con Jevtana también fue significativamente superior, informa Sanofi.
En relación al objetivo primario del estudio (SLPr), el tratamiento con Jevtana (N= 129) superó en más del doble al brazo comparador: Abiraterona o Enzalutamida (N=126; mediana 8 vs. 3,6 meses; HR=0.54; 95% CI, 0.40-0.73; p<0.0001). Los pacientes tratados con Jevtana consiguieron una mejoría en la SLPr en todos los subgrupos preespecíficados, independientemente de si recibieron el tratamiento hormonal antes o después de Docetaxel. Jevtana también mejoró de forma estadísiticamente significativa el principal endpoint secundario, la supervivencia global (mediana 13.6 vs 11.0 meses; HR=0.64; 95% CI, 0.46-0.89; p<0.0078), reduciendo el riesgo de muerte por cualquier causa en un 36% cuando se comparó con abiraterona o enzalutamida. El resto de objetivos secundarios también fueron favorables a Jevtana de forma estadísticamente significativa: Supervivencia libre de progresión (SLP) (mediana 4.4 vs. 2.7 meses; p<0.0001); antígeno prostático específico (PSA) (35.7% vs. 13.5%; p=0.0002), respuesta tumoral (36.5% vs 11.5%; p=0.004), respuesta al dolor (45.0% vs. 19.3%; p<0.0001) y tiempo a eventos esqueléticos sintomáticos (no alcanzado vs. 16.7 meses; p=0.0499).
Trabectedina + ‘radio’ en sarcoma de tejidos blandos
Los grupos de investigación en sarcoma de España, Francia e Italia, en colaboración con PharmaMar (MSE:PHM), han presentado los resultados de la cohorte del grupo pacientes metastásicos del estudio multicéntrico, de fase II, de un solo brazo, de trabectedina en combinación con una dosis baja de radioterapia para el tratamiento de sarcoma de tejidos blandos. El estudio, liderado por el Dr. Martín Broto, oncólogo del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, ha alcanzado su objetivo primario de la Tasa de Respuesta Global (ORR), con un 55,6% de respuestas.
Trabectedina en combinación con dosis basas de radioterapia ha mostrado una actividad relevante en un amplio rango de tipos de sarcomas de tejidos blandos, en pacientes con enfermedad metastásica avanzada, dando otras opciones para la reducción del tumor, más allá de la primera línea de tratamiento. Además, esta combinación ha mostrado un impacto relevante en cuanto a la Supervivencia Libre de Progresión (PFS) y la Supervivencia Global (OS) en pacientes con enfermedad avanzada que han recibido de media dos líneas previas de tratamiento. La mediana de PFS a seis meses ha sido del 75%, mientras que la mediana de OS a seis meses ha llegado al 86% de los pacientes.
Resultados de lurbinectedina en mesotelioma pleural maligno
Por último, El SAKK (Swiss Group for Clinical Cancer Research), con la colaboración de PharmaMar (MSE:PHM), ha presentado los resultados del ensayo de fase II de lurbinectedina como agente único en el tratamiento del mesotelioma pleural maligno. La presentación oral ha mostrado los resultados del ensayo de fase II, multicéntrico, internacional y de un solo brazo, que ha reclutado 42 pacientes con mesotelioma pleural maligno progresivo, y que alcanzó su objetivo primario de Supervivencia Libre de Progresión (PFS) a 12 semanas en el 52,4% de los pacientes. Actualmente no existe un estándar de tratamiento en segunda línea para el mesotelioma pleural maligno. Los tratamientos más utilizados en segunda línea suelen ser vinorelbina o gemcitabina en monoterapia, en ambos casos con una mediana de PFS inferior a 3 meses y una mediana de OS (supervivencia global) inferior a 9 meses[11]. Por lo tanto, hay una gran necesidad médica no cubierta de tratamientos novedosos en mesotelioma pleural maligno progresivo.
Según el Dr. Metaxas, investigador coordinador del ensayo, “estos resultados demuestran que lurbinectedina podría ser activa en mesotelioma pleural maligno progresivo y parece que funciona independientemente de la histología o después de un tratamiento previo con inmunoterapia. Los pacientes con una progresión lenta o rápida de la enfermedad, tratados previamente en primera línea con pemetrexed de platino, podrían beneficiarse de este tratamiento”. El mesotelioma maligno es un tumor que surge de las células mesoteliales del revestimiento pleural, peritoneal o pericárdico y, a menudo, se asocia con la exposición al amianto (asbestos), habitualmente con muy mal pronóstico en el momento del diagnóstico, siendo el mesotelioma pleural el más frecuente.
Referencias
1. Llovet J et al. Hepatocellular carcinoma. Nat Rev Dis Primers. 2016;2:16018.
2. Lee MS et al. Randomised Efficacy and Safety Results For Atezolizumab (Atezo) + Bevacizumab (Bev) in Patients (pts) With Previously Untreated, Unresectable Hepatocellular Carcinoma (HCC). LBA39. ESMO 2019, 27 September–1 October, Barcelona, Spain. Presented at 14:15 in the Proffered Paper session (14:00–15:30) in the Madrid Auditorium (Hall 2) on Friday 27 September.
3. González-Martín A, Pothuri B, Vergote I, et al. Niraparib in Patients with Newly Diagnosed Advanced Ovarian Cancer. NEJM. Septiembre, 2019. DOI: 10.1056/NEJMoa1910962 https://www.nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMoa1910962
4. LBA2_PR ‘Phase III PAOLA-1/ENGOT-ov25 trial: Olaparib plus bevacizumab (bev) as maintenance therapy in patients (prs) with newly diagnosed, advanced ovarian cancer (OC) treated with platinum-based chemotherapy (PCh) plus bev‘ will be presented by Isabelle L. Ray-Coquard during Presidential Symposium I on Saturday, 28 September, 16:30 to 18:20 (CEST) in the Barcelona Auditorium (Hall 2). Annals of Oncology, Volume 30, Supplement 5, October 2019
5. LBA7_PR ‘Overall survival (OS) results of the phase III MONALEESA-3 trial of postmenopausal patients (pts) with hormone receptor-positive (HR+), human epidermal growth factor 2-negative (HER2-) advanced breast cancer (ABC) treated with fulvestrant (FUL) + ribociclib (rib)’ will be presented by Dennis Slamon during the Presidential Symposium II on Sunday, 29 September 2019, 16:30-18:00 CEST in Barcelona Auditorium (Hall 2). Annals of Oncology, Volume 30, Supplement 5, October 2019
6. LBA6_PR ‘Monarch 2: overall survival of abemaciclib plus fulvestrant in patients with HR+, HER2- advanced breast cancer’ will be presented by George Sledge during the Presidential Symposium II on Sunday, 29 September 2019, 16:30-18:00 CEST in Barcelona Auditorium (Hall 2). Annals of Oncology, Volume 30, Supplement 5, October 2019
7. LBA8_PR ‘KEYNOTE-522: Phase 3 study of pembrolizumab (pembro) + chemotherapy (chemo) vs placebo (pbo) + chemo as neoadjuvant treatment, followed by pembro vs pbo as adjuvant treatment for early triple-negative breast cancer (TNBC)’ will be presented by Peter Schmid during the Presidential Symposium II on Sunday 29 September 2019, 16:30-18:00 (CEST) in Barcelona Auditorium (Hall 2). Annals of Oncology, Volume 30, Supplement 5, October 2019
8. LBA5_PR ‘Osimertinib vs comparator EGFR-TKI as first-line treatment for EGFRm advanced NSCLC (FLAURA): Final overall survival analysis’ will be presented by Suresh S. Ramalingam during Presidential Symposium I on Saturday, 28 September, 16:30 to 18:20 (CEST) in Barcelona Auditorium (Hall 2). Annals of Oncology, Volume 30, Supplement 5, October 2019
9. Abstract LBA7128 ‘Nivolumab (nivo) + low-dose ipilimumab (ipi) vs platinum-doublet chemotherapy (chemo) as first-line (1L) treatment (tx) for advanced non-small cell lung cancer (NSCLC): CheckMate-227 part 1 final analysis’ will be presented by Solange Peters during Presidential Symposium I on Saturday, 28 September, 16:30 to 18:20 (CEST) in Barcelona Auditorium (Hall 2). Annals of Oncology, Volume 30, Supplement 5, October 2019
10. LBA12_PR ‘PROFOUND: Phase 3 study of olaparib versus enzalutamide or abiraterone for metastatic castration-resistant prostate cancer (MCRPC) with homologous recombination repair (HRR) gene alterations’ will be presented by Maha Hussain during the Presidential Symposium III, Monday 30 September 2019, 16:30-18:15 CEST in Barcelona Auditorium (Hall 2). Annals of Oncology, Volume 30, Supplement 5, October 2019 The PROfound trial is co-led by The Institute of Cancer Research, London, The Royal Marsden NHS Foundation Trust
11. Ceresoli et al., Cancer Treat Rev, 2015