Redacción Farmacosalud.com
Janssen Pharmaceutical Companies de Johnson & Johnson ha anunciado nuevos resultados del ensayo clínico fase III SPARTAN, que revelan que apalutamida (un inhibidor del receptor androgénico de última generación) comparado con placebo, reduce significativamente el riesgo de metástasis o de muerte en un 72%, y mejora la mediana de la supervivencia libre de metástasis (SLM) en más de 2 años (diferencia de 24,3 meses) en pacientes con cáncer de próstata resistente a castración (CPRC) no metastásico de alto riesgo. Los resultados se han presentado en el simposio de cánceres genitourinarios de la American Society of Clinical Oncology (ASCO GU), celebrado en San Francisco (resumen n.º 161), y se han publicado simultáneamente en ‘The New England Journal of Medicine’.
“Los resultados del ensayo SPARTAN son los primeros en demostrar que la aparición de metástasis puede retrasarse en pacientes con cáncer de próstata resistente a castración, lo que indica que apalutamida podría convertirse en un nuevo tratamiento de referencia para los pacientes con CPRC no metastásico de alto riesgo”, explica el Dr. Simon Chowdhury, oncólogo y consultor médico en los Hospitales de Guy, King y St. Thomas e investigador del estudio SPARTAN. “Retrasar la propagación del cáncer en un paciente supondría una mejora real de los resultados, ya que el CPRC metastásico sigue siendo una enfermedad mortal”. Los datos del ensayo clínico SPARTAN se han utilizado como base para presentar una solicitud de autorización de comercialización para apalutamida a la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).
Apalutamida + TDA: mejora clínica en todos los objetivos secundarios
En el ensayo clínico SPARTAN, un estudio fase III, aleatorizado, doble ciego, controlado con placebo y multicéntrico, se incluyeron 1.201 pacientes con tumor prostático resistente a castración no metastásico en el que colaboraron 332 centros de 26 países de Norteamérica, Europa, Asia-Pacífico y Australia. Se aleatorizó a los pacientes en una proporción 2:1 para recibir una combinación de apalutamida y TDA (n = 803) o una combinación de placebo y TDA (n = 398). La combinación de apalutamida y TDA redujo el riesgo de metástasis o muerte en un 72%, en comparación con la combinación de placebo y TDA (HR=0,28; IC del 95%, 0,23-0,35; p < 0,0001). La mediana de la SLM fue de 40,5 meses con la combinación de apalutamida y TDA frente a 16,2 meses con la combinación de placebo y TDA, lo que significa que prolongó la SLM en más de dos años. Este efecto beneficioso en cuanto a la SLM se observó sistemáticamente en todos los subgrupos de pacientes.[1]
Además de mejorar significativamente la supervivencia libre de metástasis, la combinación de apalutamida y TDA, en comparación con la combinación de placebo y TDA, logró una mejora clínica en todos los objetivos secundarios, con mejoras estadísticamente significativas del tiempo hasta la aparición de metástasis (THAM; mediana de 40,5 meses en el grupo de apalutamida y de 16,6 meses en el grupo de placebo) y la supervivencia libre de progresión (SLP; mediana de 40,5 meses en el grupo de apalutamida y de 14,7 meses en el grupo de placebo).
El tratamiento con apalutamida redujo significativamente el riesgo de progresión sintomática en un 55%, en comparación con placebo (HR=0,447; IC del 95%: [0,315, 0,634]; p<0,0001). Con respecto a la supervivencia global (SG), apalutamida se asoció a una reducción del 30% del riesgo de muerte en comparación con placebo en este análisis intermedio inicial.[1] En el análisis de otros objetivos exploratorios, la combinación de apalutamida y TDA logró también una reducción del riesgo del 94% en el tiempo hasta la progresión del PSA (HR = 0,06; IC del 95%, 0,05-0,08; P < 0,0001) y una reducción del riesgo del 51% en la segunda supervivencia libre de progresión (SLP. La combinación de apalutamida y TDA fue bien tolerada y no afectó a la calidad de vida relacionada con la salud global.
Sin diferencias significativas en las tasas de acontecimientos adversos graves
Los acontecimientos adversos aparecidos durante el tratamiento (AAAT) de grado 3/4 más frecuentes con la combinación de apalutamida y TDA, en comparación con la combinación de placebo y TDA, fueron erupción en la piel (5,2% frente al 0,3%), caídas (1,7% frente al 0,8%) y fracturas (2,7% frente al 0,8%). La suspensión del tratamiento por acontecimientos adversos fue del 11% en el grupo de apalutamida y del 7% en el grupo de placebo. Las tasas de acontecimientos adversos graves (AAG) fueron similares en el grupo de la combinación de apalutamida y TDA y en el grupo de la combinación de placebo y TDA (25% frente al 23%, respectivamente).
El cáncer de próstata resistente a castración (CPRC) no metastásico hace referencia a un estadio de la enfermedad en el que el cáncer ya no responde a la reducción de testosterona mediante tratamientos médicos o quirúrgicos, pero en el que todavía no se han detectado metástasis en otras partes del cuerpo al realizar pruebas de imagen como una gammagrafía ósea o una TC.[2]
Este estadio se caracteriza por la ausencia de enfermedad metastásica detectable, un aumento rápido del antígeno prostático específico durante el tratamiento de privación androgénica (TDA) y una concentración sérica de testosterona inferior a 50 ng/dl.[2] El 90% de los pacientes con CPRC no metastásico desarrollará eventualmente metástasis óseas, lo que puede causar dolor, fracturas y compresión de la médula espinal.[3] La tasa de supervivencia relativa a los 5 años en los pacientes con tumor prostático metastásico, sensible o resistente a castración, es del 30% aproximadamente.[4,5] Pese a la importancia crítica de retrasar o prevenir la aparición de metástasis en pacientes con CPRC no metastásico, actualmente no hay tratamientos aprobados por la FDA.[6]
Apalutamida es un inhibidor oral del receptor androgénico (RA) de última generación que bloquea la vía de señalización de los andrógenos en las células del cáncer de próstata. Apalutamida inhibe el crecimiento de las células cancerosas de tres formas: impidiendo la unión de los andrógenos al RA; impidiendo que los RA penetren en el núcleo de las células tumorales e impidiendo la unión de los RA al ADN de la célula tumoral.[7]
Referencias
1. Small E., et al. SPARTAN, a phase 3 double-blind, randomized study of apalutamide (APA) vs placebo (PBO) in patients (pts) with nonmetastatic castration-resistant prostate cancer (nmCRPC). 2018 Genitourinary Cancers Symposium. Abstract #161.
2. Hong JH, Kim IY. Nonmetastatic Castration-Resistant Prostate Cancer. Korean J Urol. 2014 Mar;55(3):153-60. Available at: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3956942/. Accessed February 2018.
3. Hotte SJ, Saad F. Current management of castrate-resistant prostate cancer. Curr Oncol. 2010; 17(Suppl 2): S72–S79. Available at: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2935714/. Accessed February 2018.
4. Saad F, et al. The 2015 CUA-CUOG Guidelines for the management of castration-resistant prostate cancer (CRPC). Can Urol Assoc J. 2015;9(3-4):90-96.
5. American Cancer Society. Survival Rates for Prostate Cancer. Available at: www.cancer.org/cancer/prostate-cancer/detection-diagnosis-staging/survival-rates.html. Accessed February 2018.
6. Tombal B. Non-metastatic CRPC and asymptomatic metastatic CRPC: which treatment for which patient? Ann Oncol. 2012;23 Suppl 10:x251-8.
7. Clegg NJ, et al. ARN-509: a novel antiandrogen for prostate cancer treatment. Cancer Res. 2012;72:1494-1503.