Redacción Farmacosalud.com
La compañía MSD ha anunciado que las revistas científicas ‘The Lancet’ y ‘Clinical Infectious Diseases’ han publicado, en sus ediciones digitales, los resultados de los dos ensayos clínicos pivotales de fase III de ceftolozano/tazobactam, antibiótico de administración intravenosa (1 g/0,5 g), en infecciones complicadas del tracto urinario (cUTI) e infecciones intraabdominales complicadas (cIAI), respectivamente. Estos resultados también se recogerán en sus ediciones impresas. Ambos estudios cumplen los objetivos principales preestablecidos y los resultados de los análisis secundarios fueron consistentes y soportan los resultados principales.
Ceftolozano/tazobactam está aprobado en EE.UU. y está indicado para su uso en combinación con metronidazol en pacientes adultos para el tratamiento de infecciones complicadas intra-abdominales causadas por los siguientes microorganismos gram-negativos y gram-positivos: Enterobacter cloacae, Escherichia coli, Klebsiella oxytoca, Klebsiella pneumoniae, Proteus mirabilis, Pseudomonas aeruginosa, Bacteroides fragilis, Streptococcus anginosus, Streptococcus constellatus y Streptococcus salivarius. Ceftolozano/tazobactam también está indicado en pacientes adultos para el tratamiento de infecciones urinarias complicadas, incluida pielonefritis, causadas por los siguientes microorganismos gram-negativos: Escherichia coli, Klebsiella pneumoniae, Proteus mirabilis y Pseudomonas aeruginosa. Para frenar el desarrollo de las bacterias resistentes a los fármacos y conservar la efectividad de ceftolozano/tazobactam y otros fármacos antibacterianos, ceftolozano/tazobactam debe usarse solo para tratar infecciones en las que se haya demostrado o se tengan fuertes sospechas de que están causadas por bacterias sensibles al mismo. A la hora de seleccionar o modificar la terapia antibacteriana, deberán considerarse los resultados de los cultivos y de la sensibilidad antibiótico, si se dispone de ello. En su ausencia, los datos epidemiológicos locales y los patrones de sensibilidad pueden ayudar a la selección del tratamiento.
Acerca del estudio de ceftolozano/tazobactam en cUTI
Como se recoge en ‘The Lancet’, el estudio en cUTI es un ensayo multicéntrico y doble ciego en el que 1.083 pacientes adultos hospitalizados con cUTI, incluida pielonefritis, se dividieron aleatoriamente para recibir por vía intravenosa ceftolozano/tazobactam (1,5 g q8h) o una dosis elevada por vía intravenosa de levofloxacino (750 mg qd) durante siete días. En este estudio, la terapia con ceftolozano/tazobactam mostró ser efectiva en pacientes con cUTI y pielonefritis, incluida una mayoría de infecciones causadas por patógenos resistentes a levofloxacino. Levofloxacino es una opción de tratamiento común para cUTI y pielonefritis, y se incluye en las guías de práctica clínica internacionales sobre estas infecciones.
Ceftolozano/tazobactam alcanzó el objetivo primario del estudio de no inferioridad estadística frente a levofloxacino (margen de no inferioridad del 10%). El objetivo primario incluía erradicación microbiológica y tasa de curación clínica (tasa de curación compuesta) entre los días 5 y 9 desde el final del tratamiento (visita de comprobación de curación). El intervalo de confianza del 95% de la diferencia de tratamiento fue del 2,3% al 14,6%.
Acerca del estudio de ceftolozano/tazobactam en cIAI
Como se describe en ‘Clinical Infectious Diseases’ el estudio en cIAI es un ensayo multicéntrico y doble ciego en el que 993 pacientes adultos hospitalizados con cIAI se dividieron aleatoriamente para recibir ceftolozano/tazobactam intravenosa (1.5 g q8h) y metronidazol (0,5 g q8h) o meropenem intravenoso (1 g q8h) durante un periodo de cuatro a diez días. El tratamiento podía continuarse hasta 14 días en pacientes con algunas de las siguientes características: abscesos múltiples, peritonitis difusa no relacionada con el apéndice, fallo de un tratamiento antimicobiano anterior o infección adquirida en hospital. El tratamiento con ceftolozano/tazobactam y metronidazol demostró ser eficaz en pacientes con cIAI, incluidas las infecciones de ciertos patógenos resistentes, como enterobacterias productoras de betalactamasa de amplio espectro (BLEE). Meropenem es una opción de tratamiento común para cIAI y se incluye en las guías de práctica clínica internacionales de cIAI.
El objetivo primario de este estudio fue la tasa de curación clínica a 24-32 días tras el inicio del tratamiento (visita de comprobación de curación). Para la FDA estadounidense, el análisis primario se realizó en la población microbiológica objetivo del tratamiento. Se estableció un margen de no inferioridad del 10% y los límites inferior y superior del intervalo de confianza del 95% obtenidos fueron -8,9% y 0,5%, respectivamente. Para la Agencia Europa del Medicamento (EMA), la población primaria de análisis fueron los pacientes clínicamente evaluables, el margen de no inferioridad fue del 12,5% y el límite inferior y superior del intervalo de confianza del 95% fue del -4,2% y 4,3%, respectivamente.
Las bacterias gram-negativas, un problema grave de salud pública global
Las bacterias gram-negativas son un problema grave de salud pública global. El Centro estadounidense para el Control y la Prevención de las Enfermedades ha clasificado ciertas bacterias gram-negativas dentro de las amenazas más graves para la salud pública. Las bacterias gram-negativas son causas comunes de cIAI y cUTI. Escherichia coli es la causa más frecuente de cUTI y aumentan los casos de cUTI provocados por Pseudomonas aeruginosa. Además, Pseudomonas aeruginosa es la segunda causa más común de UTI asociada con el uso de catéter. Los principales patógenos de cUTI son: Enterobacteriaceae, incluida Escherichia coli y Klebsiella pneumoniae, han indicado fuentes de MSD.