Redacción Farmacosalud.com
El Hospital Vall d’Hebron de Barcelona y la compañía Chiesi han desarrollado ‘Air4Life’, la primera aplicación española que usa la gamificación para estimular el seguimiento del tratamiento en pacientes con afectación respiratoria crónica. La herramienta tiene como objetivo apoyar y estimular de una forma interactiva la toma de la medicación nebulizada y motivar la práctica del ejercicio físico para mejorar los hábitos y el estado de salud de los pacientes crónicos complejos con afectación respiratoria. En el desarrollo conjunto de esta solución innovadora en el sector eHealth han participado los pacientes y los Servicios de Farmacia Hospitalaria y Neumología del Vall d’Hebron Barcelona Hospital Campus y el área de Respiratorio de Chiesi España. Los pacientes usuarios de la aplicación tendrán acceso a través de una clave y contarán con el apoyo de un equipo multidisciplinar del hospital, expertos en la atención médica y farmacéutica en estos pacientes.
“Para la definición de las características más relevantes de la herramienta hemos contado con la opinión de los pacientes que actualmente están en tratamiento en el hospital y la sinergia del trabajo de médicos y farmacéuticos expertos, lo que sin duda supone un factor diferencial de la aplicación”, afirma el Dr. Toni Álvarez, del Servicio de Neumología del Hospital de Vall d’Hebron. Por su parte, la Dra. Aurora Fernández-Polo, farmacéutica del Servicio de Farmacia de Vall d’Hebron, destaca que la aplicación “va en la línea de la apuesta por la innovación de nuestro hospital”, y está enfocada “a promover hábitos en salud y contribuir en la mejora del estado clínico y calidad de vida de los pacientes mediante elementos de refuerzo positivo y superación. Air4life es una herramienta de salud digital centrada en el paciente”.
Gamificación para cuidar la salud respiratoria
‘Air4Life’ propone al paciente un reto diario para mejorar el estado de su ‘avatar’ y conseguir puntos con un objetivo semanal. Algunas de las actividades y retos a completar semanalmente son realizar ejercicio físico (medido mediante la funcionalidad ‘Healthkit’), las tomas del tratamiento antibiótico nebulizado (sincronizada con la configuración inicial del paciente según su pauta de tratamiento habitual), la toma de otra medicación por vía oral (recordatorios ‘push up’) y puntuar un ‘hoy me siento’ -indicando dos veces al día si está flojo, bien, muy bien o genial-.
Los pacientes cuentan con 7 días para ir completando las actividades diarias sugeridas, acumulando así puntos para conseguir el objetivo de la semana. Cuando los usuarios completan el objetivo de puntos semanal, la app felicita al usuario, y le invita a empezar nuevos retos de la semana y superarse en los objetivos conseguidos en semanas anteriores. Durante las tres primeras semanas se irán desbloqueando nuevos retos (ej.: toma de medicación oral u “hoy me siento”). Además de las actividades especificadas, hay otras funcionalidades que el usuario podrá realizar a través de la app como el recordatorio de la visita al médico o a la farmacia, consultar su resumen de actividad y los logros conseguidos, recibir consejos según va resolviendo pruebas o acceder a su configuración de perfil.
Terapias biológicas: ayudan a combatir la resistencia a los fármacos en asma grave
En otro orden de cosas, se calcula que hasta un 50% de pacientes con asma no están bien controlados a pesar de que siguen el tratamiento adecuado. En muchas ocasiones esta falta de “control” se debe a la existencia de factores agravantes y a la coexistencia de otras enfermedades, tales como tabaquismo, alergias, obesidad, etc.; aunque en otros casos es debido a la gravedad intrínseca del asma. De los más 300 millones de personas que padecen asma en todo el mundo, un 5% sufre asma grave resistente a los medicamentos actuales. En este sentido, dentro de los nuevos tratamientos desarrollados para combatir el asma, las opciones más eficaces y prometedoras son las terapias biológicas. “Estas alternativas constan en tratamientos derivados de organismos vivos que están dirigidos a dianas moleculares específicas. Las terapias biológicas emergen como una solución relevante para los casos de resistencia a los fármacos actuales”, explica la Dra. Eva Martínez Moragón, neumóloga y miembro del área de asma de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).
En las últimas décadas, se han desarrollado diferentes fármacos biológicos centrados en varias dianas terapéuticas. Estos medicamentos están mostrando resultados terapéuticos muy esperanzadores en pacientes con asma grave no controlada. En España, algunos de los pacientes candidatos reciben este tipo de tratamiento mediante ensayos clínicos con anticuerpos monoclonales (mepolizumab, reslizumab, benralizumab, lebrikizumab, etc.) administrados por vía subcutánea quincenal o mensualmente. Éstos complementan la terapia inhalada habitual de cada paciente.
Tratar la fibrosis pulmonar idiopática desde el inicio, clave para la supervivencia
"Pensar en su existencia". Éste es el primer paso para mejorar de una manera definitiva el pronóstico de los pacientes con Fibrosis Pulmonar Idiopática (FPI), una patología rara con escasas alternativas terapéuticas hasta hace dos años. Así lo afirma el doctor José Antonio Rodríguez Portal, especialista del Servicio de Neumología del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, que es también coordinador del Área de Enfermedades Pulmonares Intersticiales de SEPAR. "Tanto los profesionales sanitarios como los propios pacientes se fijan poco en esta enfermedad porque aparte de no ser muy común [afecta a unas 7.500 personas en España], hasta hace muy poco no existía ninguna opción terapéutica disponible. Recibir un diagnóstico de este tipo era algo demoledor", comenta este experto.
La FPI es una patología de causa desconocida que provoca la inflamación y endurecimiento o cicatrización progresiva (fibrosis) del tejido pulmonar, lo que deteriora lenta pero progresivamente la función respiratoria. Su pronóstico es muy grave y la tasa de supervivencia cinco años después de su detección no supera el 40%.
Señales de alerta de la FPI
La FPI tiene una sintomatología muy inespecífica, de forma que, según aconsejan los expertos, se debe estar atento a esa tos seca y persistente que no cede en tres o cuatro semanas y que no responde a un catarro convencional. La fatiga o falta de aire después de subir escaleras o caminar un poco deprisa, el dolor torácico o una coloración azulada en la piel y en las uñas son también señales de alerta. No obstante, como indica el doctor Rodríguez Portal, “la pista definitiva la proporciona un ruido muy característico que escuchamos en el pulmón cuando acercamos el fonendo. Es algo parecido al crujido que causan las pisadas sobre la nieve o al separar las dos partes de una tira de velcro".
El doctor Julio Ancochea, jefe del Servicio de Neumología del Hospital de La Princesa de Madrid, asegura que, sin duda, el reto mayor frente a esta enfermedad es el diagnóstico precoz. “Sabemos que habitualmente entre la aparición del primer síntoma y la atención al paciente en un centro especializado pueden transcurrir unos dos años. A eso contribuyen varios factores: que el paciente desconoce los síntomas y lleva un estilo de vida sedentario que enmascara la dificultad respiratoria; que la propia enfermedad suele tener un inicio insidioso de progresión lenta, y que aún falta concienciación sobre enfermedades raras por parte de muchos profesionales médicos”, explica.
El abordaje multidisciplinar del tabaquismo facilita el tratamiento individualizado
El papel tanto de médicos como de enfermería es fundamental en la documentación del tabaquismo como patología, en la motivación para el abandono del tabaco y en el apoyo al paciente durante todo el proceso de deshabituación. “Todos los profesionales sanitarios debemos estar implicados en las intervenciones en tabaquismo, adaptando las mismas a los distintos niveles de actuación y personalizándolos a las características de cada fumador”, explica Paz Vaquero Lozano, especialista en tabaquismo y coordinadora del Área de Enfermería de SEPAR.
El consejo sanitario para dejar de fumar debe ser breve, firme, personalizado y oportunista, por ejemplo aprovechando la visita de control del paciente a la consulta. “Un objetivo asistencial primordial en los servicios de neumología españoles es implementar el consejo antitabaco en la práctica clínica diaria. Existe evidencia científica que demuestra que el consejo para dejar de fumar, brindado por la enfermería a los pacientes, aumenta entre un 5% y un 10% las probabilidades de éxito de abandono”, asegura la DUE Vaquero. A lo que añade: “Si a dicho consejo se le añade un seguimiento individualizado del paciente, el efecto de esta intervención resultará todavía más eficaz”.