Redacción Farmacosalud.com
La prevalencia de la infección activa por el virus de la hepatitis C (VHC) en pacientes coinfectados por VIH en España se situó en 2018 en el 3,7%, lo que supone un descenso del 53,8% respecto a 2017 (en el que la prevalencia de coinfección se situó en el 8%) y del 83,3% respecto a 2015 (en el que se constató una prevalencia del 22,1%). Este profundo descenso en la prevalencia de infección activa observado en los últimos 3 años obedece fundamentalmente al acceso al tratamiento anti-VHC basado en antivirales de acción directa (AAD), que pasó de ser del 59,3% de todos aquellos con infección activa en 2015 al 92,2% en 2017.
Así lo pone de manifiesto un nuevo estudio realizado por expertos de GeSIDA (Grupo de Estudio del SIDA de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica) en el que se han recogido datos de 1.733 pacientes, seleccionados de forma aleatoria de una población de referencia constituida por los 40.650 pacientes que estaban en seguimiento activo en 43 hospitales distribuidos por toda la geografía española en 2018, lo que corresponde aproximadamente a un tercio del total de la población infectada por el VIH en España.
El virus de la hepatitis C, principal comorbilidad asociada al virus del SIDA
“Estamos a las puertas de un hecho histórico en el abordaje del VIH en España como es el de la eliminación del VHC en pacientes coinfectados. Cabe recordar que el virus de la hepatitis C ha sido la principal comorbilidad asociada al virus del SIDA así como una de sus principales causas de morbimortalidad”, señala el Dr. José Ramón Arribas, secretario de GeSIDA, quien ha puesto en valor el “excelente trabajo” realizado por los compañeros del Grupo de Estudio implicados en el tratamiento de coinfección. “Estos datos ponen de manifiesto la importancia de contar con la experiencia y la opinión de los profesionales sanitarios a la hora de afrontar retos en salud, algo que en el ámbito del VIH puede dar igualmente frutos muy positivos en cuestiones como la mejora de las estrategias de prevención, con herramientas como la PrEP, o del diagnóstico precoz”, precisa.
Para ser conscientes de la magnitud en el descenso de la prevalencia, el Dr. Juan Berenguer, del Hospital Universitario Gregorio Marañón y coordinador de este trabajo de investigación junto al Dr. Juan González, del Hospital Universitario La Paz, recuerda que “entre los siete años transcurridos entre 2009 y 2015 el descenso en la prevalencia de infección activa fue de un 35%, frente al 83,3% de diferencia entre 2015 y 2018”.
A esto Berenguer también añade otro hecho igualmente relevante: “De los pacientes con infección activa por VHC, un tercio estaban recibiendo tratamiento con AADs en el momento de llevarse a cabo el estudio. Si consideramos que la mayoría de estos últimos pacientes habrán logrado respuesta viral sostenida (lo que se traduce como estar curados de la hepatitis C), la proporción de infección activa por VHC en pacientes con VIH en España en 2018 podría situarse en una cifra cercana al 2,5%”, asegura. “Estaríamos hablando prácticamente de la erradicación del VHC en pacientes coinfectados con VIH”, apostilla.
La infección adquirida a través de las relaciones HSH ha ido creciendo desde 2015
Según el Dr. González, el estudio confirma asimismo que la adquisición de la infección por consumo de drogas inyectadas ha sido la principal vía de transmisión de los pacientes con hepatitis C en España, aunque la infección adquirida a través de relaciones sexuales entre hombres que practican sexo con hombres (HSH) ha ido creciendo desde 2015, momento en que este grupo de población representaba el 2,7% de las infecciones activas, hasta alcanzar el 10.9% en 2018.
De los pacientes con infección activa por VHC, el 10,9% tenía cirrosis hepática. Hay que destacar que tenían cirrosis hepática el 26,4% de los pacientes que habían logrado respuesta viral sostenida tras tratamiento anti-VHC. Considerando tanto a los pacientes con infección activa por VHC como a los curados con el tratamiento, en 2017 un 6,7% de los pacientes infectados por VIH en España tenían cirrosis hepática por VHC. “Nuestros hallazgos muestran que falta muy poco para que alcancemos la ansiada meta de la eliminación del VHC entre los pacientes infectados por el VIH en España”, apunta el Dr. Juan González, coordinador del estudio de la prevalencia de la coinfección VIH/VHC a nivel nacional junto al Dr. Berenguer.
Gran avance médico entre la población reclusa
A colación de las palabras del Dr. González, el Dr. Javier García-Samaniego, jefe de Sección de Hepatología del Hospital Universitario La Paz y coordinador de la Alianza para la Eliminación de las Hepatitis Víricas en España (AEHVE), destacado que “España es a día de hoy el país que más pacientes ha tratado por millón de habitantes con los nuevos antivirales, cerca de 130.000, y está en condiciones de ser el primer gran país del mundo en alcanzar la meta de la eliminación en los próximos años, en línea con los objetivos marcados por la OMS de acabar con las hepatitis virales como problema de salud pública en 2030”. “Es más –añade–, en poblaciones vulnerables donde la prevalencia de la hepatitis C era más elevada que en la población general -como la población reclusa o los coinfectados por VIH-, las estrategias de microeliminación están acercándonos a la eliminación mucho antes de lo esperado, hasta el punto de que posiblemente sea en el medio penitenciario o en el colectivo de pacientes con coinfección por VIH donde antes consigamos este objetivo, antes incluso de la fecha marcada por la OMS”, ha explicado García-Samaniego.
Por su parte, el Dr. Antonio Rivero, vicepresidente de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), sociedad matriz de GeSIDA, ha puesto en valor la labor y la experiencia de los profesionales sanitarios encargados del diagnóstico y tratamiento de las enfermedades infecciosas en España, quienes “prestan una importante labor desde la red asistencial de servicios y unidades de Enfermedades Infecciosas en todas las comunidades autónomas españolas, y que, a pesar de no tener el reconocimiento de su labor mediante la titulación de especialistas en enfermedades infecciosas, son referente en cuanto a producción científica en toda Europa”.
Finalmente, el Dr. Juan Berenguer subraya que los datos de este estudio muestran que, “independientemente de que seamos capaces de eliminar el VHC entre la población coinfectada, el virus dejará su legado durante años”, pues un número significativo de pacientes con fibrosis hepática avanzada o fibrosis “deberá continuar de por vida en programas de cribado de carcinoma hepatocelular a pesar de la curación de la infección”.