Redacción Farmacosalud.com
Los neumólogos españoles han constatado en los últimos meses que se está produciendo una falta de abastecimiento de los fármacos utilizados en el tratamiento habitual de la tuberculosis en territorio español. Ante esta situación, la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) quiere poner de manifiesto las consecuencias que tanto para los pacientes y su entorno como para la salud pública puede tener la falta de estos medicamentos si se prolonga en el tiempo, y reclaman el pronto restablecimiento de la distribución de los mismos así como evitar que se repitan en el futuro situaciones como esta.
Actualmente, el tratamiento estándar o habitual de la tuberculosis recomendado por todas las guías clínicas se basa en la combinación de cuatro medicamentos que se administran durante dos meses y la combinación de dos de ellos durante cuatro meses más. La recomendación es administrar los fármacos en combinación, es decir, todos juntos en la misma presentación. No se recomienda el uso de los fármacos por separado, en presentaciones diferentes, para evitar la aparición de resistencias, precisando además en este caso la toma de un mayor número de pastillas.
No disponibilidad de la presentación combinada con rifampicina e isoniacida
La interrupción prematura del tratamiento y, sobre todo, dejar de tomar un fármaco y continuar con otro puede hacer derivar la enfermedad hacia una tuberculosis resistente. La no disponibilidad de esta presentación combinada con rifampicina e isoniacida, está obligando a los neumólogos a administrar los fármacos en preparados diferentes e individuales con los riesgos ya señalados: dificultando el seguimiento del tratamiento y facilitando la aparición de resistencias.
“En un tratamiento prolongado como en la tuberculosis es fácil que se pueda abandonar la toma de uno de los fármacos o que se tomen desordenadamente y producir resistencia al otro. Si ocurre esto el fármaco se vuelve inefectivo ya de forma permanente” explica el Dr. José Maria García García, director del Programa de Investigación en Tuberculosis de SEPAR. La tuberculosis resistente es mucho más difícil de tratar y curar. Para los pacientes significa un tratamiento más largo con medicamentos menos habituales, más caros pero menos efectivos. La tuberculosis resistente tiene, además, el riesgo de que se pueda transmitir a otras personas provocando por lo tanto que la tuberculosis sea una enfermedad mucho más difícil y costosa de curar.
Baja prevalencia de tuberculosis resistente en España
Cabe señalar también, que en España la aparición de tuberculosis resistente ha sido hasta ahora muy baja: el número de casos es de apenas un 1%, debido a que se han utilizado siempre fármacos combinados, con la que la situación actual estaría en riesgo de facilitar el desarrollo de resistencias. “Por todo ello, creemos importante el solucionar el problema actual de desabastecimiento de fármacos antituberculosos en combinación y sobre todo prevenir el que se vuelvan a repetir circunstancias como las actuales en el futuro” concluye el Dr. García García.
La tuberculosis es una enfermedad causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis. Afecta principalmente a los pulmones pero en ocasiones puede atacar también otras partes del cuerpo. Es una enfermedad contagiosa que se transmite por las vías aéreas de persona a persona a través de las secreciones respiratorias: tos, estornudos o esputos. La tuberculosis es una enfermedad de declaración obligatoria. Los datos más recientes en España son los casos notificados en el año epidemiológico 2016, que abarca el periodo que va desde el 4 de enero de 2016 al 1 de enero de 2017. Según estos datos, en España se registraron 4.934 casos en total en el 2016. La tasa de incidencia de TB fue de 10,46 casos por 100.000 habitantes, de acuerdo con los datos recogidos por el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III.