Redacción Farmacosalud.com
Los avances tecnológicos en la preservación de órganos han permitido mejorar los procesos de los trasplantes. Gracias a las mejoras introducidas en las máquinas de perfusión hipodérmica, estos aparatos han trasformado el concepto de la preservación clásica en frío. Así las cosas, se ha conseguido añadir al líquido de perfusión sustancias farmacológicas que mejoran la viabilidad del órgano, hasta el extremo de que se logra optimizar órganos que en un principio no iban a ser utilizados para trasplante, han informado fuentes del III Congreso de la Sociedad Española de Trasplante (SET). Las nuevas máquinas de perfusión han trasformado el concepto de la preservación clásica en frío de órganos abdominales (riñón, páncreas e hígado).
En el marco del III Congreso de la SET se han presentado nuevas técnicas de preservación de órganos, uno de los temas que más inquieta a estos especialistas. En los casos de donante vivo, esta circunstancia no es tan importante, pero en aquellos casos en lo que el donante es cadáver por parada cardiaca o muerte encefálica, la preservación es crucial para la supervivencia del órgano y por tanto la realización de trasplante. Esto resulta todavía más importante en el caso de los trasplantes combinados (aquellos que se realizan con dos o más órganos de forma simultánea), ya que tal y como explica el doctor Daniel Casanova, catedrático de Cirugía del Hospital Marqués de Valdecilla de la Universidad de Cantabria (Santander) y ‘Chairman’ del Board Europeo de Trasplante, “requieren una planificación diferente, que incluye la selección del propio donante, la técnica de extracción, el modelo de preservación y la logística del propio trasplante, ya que en ocasiones son diferentes equipos de cirujanos los que deben alternarse y por tanto exige un alto nivel de coordinación”.
Las nuevas máquinas ‘perfunden’ el órgano constantemente
El porcentaje de trasplantes combinados no es muy alto, suponen algo menos del 2% del total, pero en el caso de los de páncreas se acercan al 80%, en tanto que normalmente la transferencia de este órgano va asociada a la de riñón.
Los expertos han tenido la oportunidad de compartir y presentar nuevos aspectos sobre la investigación dirigida hacia la preservación de órganos. A pesar de que no es una tecnología nueva, las máquinas de perfusión hipotérmica son las nuevas herramientas para la conservación del órgano. Gracias a la mejora de la tecnología, estos aparatos han trasformado el concepto de la preservación clásica en frío. “Las nuevas máquinas ‘perfunden’ el órgano constantemente y permiten, al mismo tiempo, monitorizar y añadir al líquido de perfusión sustancias farmacológicas que mejoren su viabilidad”. En este sentido, hay que resaltar que con estos aparatos se consigue optimizar órganos que en un principio no iban a ser utilizados para trasplante debido a las lesiones isquémicas existentes. “Esta mejoría de la calidad del órgano se produce especialmente en los riñones, pero durante el congreso se ha presentado nuevas técnicas para páncreas e hígado”, aclara el especialista.
Situaciones que requieren trasplantes combinados
La causa que puede inducir a un trasplante combinado suelen ser la existencia de dos patologías severas diferentes que deben tratarse mediante el trasplante de los órganos correspondientes. “Un ejemplo sería el trasplante de páncreas y riñón que se practica en pacientes con Diabetes Mellitus tipo 1 que en la evolución de la enfermedad han desarrollado una insuficiencia renal terminal, por lo que el trasplante trata de solucionar simultáneamente la diabetes y la insuficiencia renal, mejorando la supervivencia y la calidad de vida”, explica Casanova.
Otra de las situaciones que precisan este tipo de intervenciones son aquellas en las que resulta necesario trasplantar un órgano vital para tratar una patología avanzada que necesita (por razones inmunológicas o de viabilidad) el concurso de otro órgano asociado. Otros ejemplos de este tipo de trasplante son: corazón y pulmón (en una hipertensión pulmonar severa asociada a cardiopatía importante), hígado e intestino (con afectación severa del sistema portal), y los multiviscerales sobre todo en niños, (para tratar tumores que necesitan resecciones amplias y cuya solución de reparación solo puede ser realizada mediante el concurso de varios trasplantes).