Redacción Farmacosalud.com
Llega a España ALECENSA® (alectinib), medicamento indicado para tratar el cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) ALK+ y las metástasis cerebrales asociadas a esta enfermedad. De acuerdo con el estudio ALEX, el nuevo fármaco logra reducir en más de la mitad el riesgo de progresión o muerte frente a la terapia estándar con crizotinib, además de constatarse una disminución significativa del riesgo de progresión del tumor en el sistema nervioso central (SNC), por lo que se muestra activo frente a las diseminaciones tumorales hacia el cerebro. Según explica a www.farmacosalud.com el doctor Javier de Castro, jefe de la sección de Oncología del Hospital La Paz de Madrid, alectinib es eficaz en esos dos supuestos -cáncer pulmonar y metástasis cerebral asociada a este tumor- con independencia de la edad que presente el paciente.
El promedio de presentación del cáncer de pulmón no microcítico ALK+ está situado en 51 años de edad, mientras que el del tumor pulmonar convencional está situado en torno a los 70. “En el estudio ALEX, de hecho, se dividió a la población según la edad: pacientes menores de 65 años y mayores de 65, siendo la magnitud del beneficio aproximadamente del 50% (0.48 de hazard ratio, la razón de riesgo) en menores de 65 años, y del 0.45 en mayores, es decir, prácticamente similar”, establece De Castro.
Un fármaco de administración oral
El perfil típico de persona afectada de CPNM ALK+ se corresponde con individuos poco o nada fumadores. Se trata de un tipo de tumor maligno poco frecuente pero con una alta morbilidad asociada, ya que en un 60% de los casos se produce metástasis en el cerebro. Terapéuticamente hablando, es una condición muy difícil de abordar porque los tratamientos disponibles hasta ahora no han sido capaces de traspasar la barrera hematoencefálica y atacar a las células tumorales.
No obstante, el panorama ha cambiado radicalmente con la llegada de alectinib, el primer inhibidor ALK con un mecanismo de acción selectivo capaz de traspasar dicha barrera y penetrar en el Sistema Nervioso Central (SNC) y, por tanto, ser activo frente a metástasis cerebrales, lo que reduce el riesgo de progresión cuando la enfermedad aún no ha afectado a este órgano de la cabeza. En el desarrollo del nuevo fármaco, cuya administración es oral, han participado 12 hospitales españoles.
Aprobado en primera y en segunda línea
La doctora Annarita Gabriele, directora médico de Roche España, subraya que el desarrollo de Alecensa es una muestra más del compromiso de Roche con la investigación en el área de oncología, donde la compañía lleva más de 50 años investigando e introduciendo terapias innovadoras que han logrado cambiar el curso de algunos tumores con gran impacto en la población, como es el tumor pulmonar: “Actualmente, contamos con cuatro medicamentos autorizados frente a ciertos tipos de cáncer de pulmón -Tarceva, Avastin, Tecentriq y Alecensa– a los que se añaden más de una decena de productos en desarrollo, terapias dirigidas e inmunoterapias frente al cáncer, incluidas diversas estrategias de combinación, que nos permitirán desarrollar una oncología de precisión”.
Alecensa fue aprobado por la Agencia Europea del Medicamento en 2017 para las siguientes indicaciones ahora financiadas en España:
• Como tratamiento de primera línea en monoterapia para el cáncer de pulmón no microcítico avanzado ALK+.
• Como tratamiento de segunda línea en monoterapia para el cáncer de pulmón no microcítico avanzado ALK+ en pacientes que han sido tratados previamente con crizotinib.
La decisión de aprobación de primera línea obtenida en diciembre de 2017 se basó en los resultados del mencionado estudio ALEX, un ensayo internacional fase III en el que se demostró que esta terapia reduce en más de la mitad (53%) el riesgo de progresión o muerte (supervivencia libre de progresión, SLP) frente a la terapia estándar con crizotinib cuando se administra como tratamiento inicial. La tasa acumulada de progresión en el SNC al año para pacientes con o sin metástasis iniciales fue del 9,4% entre los tratados con alectinib, porcentaje que ascendió a un 41,4% en el grupo que recibió crizotinib, lo que muestra la capacidad de alectinib de prevenir el desarrollo o aparición de metástasis cerebrales.
Buen perfil de seguridad
En palabras del doctor Luis Paz Ares, jefe del servicio de Oncología del Hospital 12 de Octubre de Madrid, los resultados de ALEX avalan la superioridad de alectinib tanto en primera como en segunda línea. “Ahora lo realmente importante para los pacientes es la secuencia en que vamos a ir dando los medicamentos disponibles. Teniendo en cuenta los resultados obtenidos con este nuevo tratamiento como opción inicial, será difícil que lo dejemos para segunda línea, especialmente en aquellos pacientes con alto riesgo de metástasis cerebral”, señala el doctor Paz Ares.
Según este experto, “es muy relevante que la mediana de progresión pase de ser de unos 11 meses con el tratamiento estándar (crizotinib) a casi 26 con Alecensa. A esto hay que sumar otro hallazgo clave en relación a las metástasis cerebrales, tan habituales en estos pacientes: comprobamos que tanto los que al inicio ya presentaban presencia de la enfermedad en el cerebro como los que no la tenían se beneficiaban mucho más si recibían tratamiento con Alecensa, ya que unos experimentaron menor progresión y otros conseguían evitar la aparición de metástasis cerebral. Además, todas estas ventajas se han logrado con un buen perfil de seguridad”.
En ese aspecto incide la doctora Enriqueta Felip, jefa de Sección del Instituto Vall d’Hebron de Oncología de Barcelona. “Con Alecensa”, subraya, “disponemos de un tratamiento con una gran actividad a nivel de sistema nervioso central. Es una novedad fundamental porque muchos de estos pacientes tienen afectación cerebral y vamos a poder ofrecerles un fármaco que mejore su situación y, por tanto, impacte de manera favorable sobre su calidad de vida. A estas ventajas hay que añadir que es una opción segura y muy bien tolerada”.
El doctor De Castro destaca, también, el “buen perfil de seguridad de alectinib”. Según concreta, los efectos secundarios detectados son los siguientes:
• Astenia o cansancio (principal toxicidad detectada)
• Pueden aparecer alteraciones en transaminasas, aunque únicamente en el 5% de los casos. “Este punto es importante porque el aumento de transaminasas puede llegar a ser de hasta el 30% con otros fármacos que también son activos en esta enfermedad”, argumenta De Castro
• Mialgias (dolores musculares) en pacientes tratados durante muchos meses (más de dos años, en muchos casos)
• Puede haber elevación de la creatina fosfoquinasa (CPK), una proteína enzimática relacionada con la alteración muscular. De nuevo, se registran cifras muy bajas, no más allá del 5% de los casos
• Posible subida del colesterol en algunos enfermos
• Posible subida de glucosa (incidencia muy baja de casos)
• Estreñimiento (incidencia muy baja)
“Este tipo de perfil de toxicidad nada tiene que ver con la quimioterapia, donde los problemas vienen relacionados sobre todo con la toxicidad hematológica (glóbulos rojos y blancos, plaquetas). En el caso de alectinib no se produce nada a ese nivel”, destaca el experto. El doctor De Castro, asimismo, recuerda que, en el marco de un ensayo clínico, cuanto más se prolonga un tratamiento más posibilidades hay de que aparezcan más eventos adversos, lo que aún da más mérito a la alta tolerabilidad de alectinib, ya que el tratamiento que hasta ese momento era el estándar, crizotinib, tenía una media de duración de 10-11 meses, mientras que en el caso de alectinib el grupo de pacientes fue tratado durante unos 20-25 meses, el doble o más de tiempo que con crizotinib.
Sin eficacia en prácticamente todos los casos de cáncer cerebral primario
Alectinib, además, no está contraindicado. “No se ha visto ningún caso de toxicidad relacionada con hipersensibilidad al fármaco ni a ninguno de sus excipientes”, asegura.
Por otro lado, dado que alectinib es útil frente a tumores con alteración ALK, difícilmente tendrá indicación para el cáncer cerebral primario (con origen en el propio cerebro), puesto que “la existencia de la mutación ALK en el caso del cáncer cerebral primario es muy baja, prácticamente anecdótica”, precisa el doctor De Castro. De todos modos, hay otros tumores en los que sí está involucrada esta mutación, por lo que en esos casos alectinib podría ser eficaz.
El cáncer de pulmón es la primera causa de muerte en todo el mundo por cáncer. Esta enfermedad causa la muerte de más de un millón y medio de personas al año. Esto supone más de 4.350 muertes diarias. El tumor pulmonar se clasifica básicamente en dos tipos: cáncer de pulmón microcítico o de célula pequeña y cáncer de pulmón no microcítico. Este segundo tipo es el más prevalente y representa el 85% de todos los casos.