Redacción Farmacosalud.com
Definitivo. El Black Friday ha venido para quedarse. De hecho, ya está aquí, plenamente implantado, imparable en su propagación. En los Estados Unidos el Black Friday es el día que inaugura la temporada de compras navideñas con significativas rebajas en muchas tiendas y grandes almacenes. Pues bien, las atractivas ofertas también han llegado al mundo de la cirugía estética. Este viernes 24 de noviembre se celebra dicha jornada comercial y desde la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE) se previene a los ciudadanos ante los descuentos y promociones circunscritos a este ámbito de la medicina, dado que, según afirman, hay unos mínimos precios que no pueden rebajarse si no es a costa de una reducción de las garantías de seguridad para el paciente. La doctora Ainhoa Placer, vocal de Comunicación y Redes Sociales de SECPRE, pone un ejemplo práctico, un aumento de senos o mamoplastia: “Efectivamente, hay unos mínimos debajo de los cuales deberíamos empezar a desconfiar por el ahorro en garantías. Hay que tener en cuenta todos los gastos como son gastos hospitalarios, implantes mamarios de calidad, honorarios de los cirujanos, honorarios de la enfermera instrumentista, honorarios del anestesista, consulta… Éstos pueden ser variables, pero yo desconfiaría de precios que estén por debajo de 5.000 euros + IVA”.
Desde SECPRE se recomienda a las personas que estén valorando someterse a una intervención quirúrgico-estética que recelen de descuentos con fecha límite, bonos, 2x1 y promociones similares, consideradas “faltas muy graves” en el ejercicio de la Cirugía Plástica por los estatutos de la SECPRE en su artículo 26.1.m. Según esta sociedad médica, las ofertas de esta clase tratan -por su planteamiento mercantilista- las intervenciones quirúrgicas como meros productos de consumo, cuando se trata de servicios de salud en los que la seguridad del paciente debe ser siempre la primera prioridad, junto con la excelencia en la calidad del resultado. Dentro de este tipo de lotes Black Friday o promociones similares, las ofertas que más se suelen hacer son las de “cirugía de mama (aumento de mamas sobre todo) y liposucción en el campo de la cirugía estética, y todo tipo de tratamientos del campo de la medicina estética (toxina botulínica, rellenos con ácido hialurónico, peeling químico, mesoterapia…)”, define la doctora Placer.
Así pues, seguridad y calidad pueden ponerse en riesgo cuando ‘las cuentas no cuadran’, es decir, cuando la suma de los costes de todos los recursos humanos y técnicos que participan -o deberían participar- en una intervención de cirugía estética es superior al precio ofertado. Estos costes y recursos son los siguientes:
• Honorarios del/los profesional/es médico/s a cargo de la intervención, que tiene/n que contar con la titulación de “Médico Especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora”, la única oficial y homologada en España para la práctica de esta especialidad.
• Honorarios del/los profesional/es de Enfermería, que interviene/n en todo el proceso.
• Honorarios del profesional anestesista.
• Honorarios del centro sanitario en el que se realiza la intervención: costes de alquiler del quirófano, sala de postoperatorio, hospitalización si es precisa, etc., pues toda intervención quirúrgica debe efectuarse siempre en una clínica u hospital.
• Costes de los materiales protésicos, en caso de que sean necesarios; por ejemplo, los implantes mamarios para las intervenciones de aumento de mamas.
Para aclarar dudas, escribir a un correo electrónico: info@secpre.org
Como es lógico, los costes varían de unas ciudades a otras e incluso dentro de ellas, pero hay unos mínimos cuyo ahorro sólo puede deberse a la reducción de las garantías de seguridad y/o calidad, sea por la implicación de menos facultativos, la no cualificación de éstos, la no presencia del anestesista durante la operación, el uso de instalaciones inadecuadas, la inferior calidad de los materiales, un postoperatorio y un seguimiento posterior del paciente insuficientes, etc. Igualmente, la capacidad de reacción de los cirujanos se limita enormemente si aparecen complicaciones durante una intervención, como una reacción anafiláctica o un sangrado abundante, y no tienen a su disposición los elementos adecuados para atajarla, incluyendo otros profesionales sanitarios o la equipación necesaria.
Por tanto, a criterio de SECPRE la actitud ante ofertas y promociones como las mencionadas ha de ser, como mínimo, ‘crítica’, lo que implica leer cuidadosa y atentamente la letra pequeña, tanto de los anuncios como de los consentimientos informados que firman los pacientes antes de cualquier intervención quirúrgica, y asegurarse de que el profesional a cargo de ella tiene la titulación de “Médico Especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora”. Este título se obtiene después de al menos 11 años de formación (seis de licenciatura en medicina y cinco de especialización vía MIR), si bien los cirujanos plásticos continúan formándose durante toda su trayectoria profesional. En caso de que una persona acceda a uno de esos descuentos pero no llegue a ver con claridad si le conviene o no someterse a la operación, la vocal de Comunicación y Redes Sociales de SECPRE recuerda que esta sociedad médica pone su mail a disposición de cualquier usuario “por si se quiere preguntar al respecto: info@secpre.org Intentaremos contestar a todas las dudas con el fin de ofrecer la mayor calidad e información relacionada con nuestra especialidad”.
“Nunca hay que olvidar que estamos realizando un acto médico y que somos médicos”
Llegados a este punto… ¿Una oferta tipo Black Friday puede ser correcta, desde el punto de vista médico y de costes económicos, porque, por ejemplo, el cirujano/a que dirige la intervención se rebaja algo su propio sueldo para poder abaratar, ni que sea un poco, la operación, y hacerla más atractiva a ojos del usuario? ¿O sea, una oferta de este tipo puede ser bienintencionada y ser totalmente válida desde un punto de vista quirúrgico y práctico? “Nosotros creemos que, desde el punto de vista ético, no deben hacerse rebajas ni descuentos en el campo de la medicina. Aunque pueda parecer una parte un poco más frívola dentro de la medicina, nunca hay que olvidar que estamos realizando un acto médico y que somos médicos. No es un producto de consumo, sino que es un servicio de salud”, contesta la facultativa.
Con todo, las modas son las modas y la cirugía estética tampoco es ajena a ello. De acuerdo con la doctora Placer, hay operaciones de estética que están en boga últimamente y que pueden ser mayoritarias no solamente en el Black Friday, sino también en los días posteriores e incluso como regalo de Navidad o Reyes: “Podría ser que además de la cirugía mamaria (aumento de mamas en especial) y la liposucción, que son las más afectadas, se ofrezca también aumento de mamas mediante lipoinjerto (grasa propia) o cirugía genital… Ya he visto ofertas relacionadas con el lipoinjerto como ‘reduce tu contorno en tus caderas y te regalamos aumento de mamas’… cuando se trata de una cirugía muy delicada y que debe ser realizada por un especialista en cirugía plástica reparadora y estética”.