Redacción Farmacosalud.com
Según se desprende de la investigación ‘LipiDiDiet’, una bebida nutricional de una toma diaria para tratar el Alzheimer, Souvenaid, logra resultados positivos a la hora de enlentecer el curso de la afección en personas con Alzheimer prodrómico, es decir, sujetos que tienen fallos de memoria pero que hacen vida normal al no sufrir aún demencia, comenta a www.farmacosalud.com el doctor Rafael Blesa, director del Servicio de Neurología del Hospital de Sant Pau de Barcelona e investigador de la Línea de Terapias Avanzadas y Ensayos Farmacológicos de la Unidad de Memoria de dicho centro hospitalario. Los resultados completos del ensayo clínico europeo se han publicado en ‘The Lancet Neurology’.
La historia de Souvenaid arranca hace más 15 años, cuando en el Massachusetts Institute of Technology-MIT de Boston (Estados Unidos), Richard Wurtman desarrollaba un novedoso tratamiento a base de nutrientes básicos de la dieta mediterránea que sería bautizado con el nombre de Fortasyn Connect. En animales se pudo comprobar que este nutriente médico jugaba un papel importante en el mantenimiento celular y en el crecimiento de las membranas de las células, aparte de que mejoraba la comunicación entre neuronas, la conocida como sinapsis. A partir de los años 2008-2009, se empezaron a llevar a cabo estudios con Fortasyn Connect -al que se daría el nombre comercial de Souvenaid®- en seres humanos y en 2012 se demostró que este producto era capaz de mejorar la memoria reciente en las personas con diagnóstico de Alzheimer muy leve, o sea, pacientes que ya tenían demencia, si bien en estadíos muy iniciales.
No es un fármaco, sino un nutriente médico
Así las cosas, por primera vez un nutriente médico tenía la indicación para la mejora de la memoria en casos de Alzheimer leve. “Esto es muy relevante porque no se estaba ante un fármaco, sino que se trataba de un nutriente médico que para demostrar su eficacia había tenido que pasar por los mismos filtros que cualquier producto que finalmente acaba siendo un fármaco”, afirma el doctor Blesa.
En paralelo, en 2008-2009 unos investigadores procedentes de países nórdicos iniciaron, con financiación de la Unión Europea, el proyecto ‘LipiDiDiet’ con el objetivo de comprobar los efectos de Fortasyn Connect en los individuos con Alzheimer prodrómico (deterioro cognitivo leve), es decir, personas que todavía no han entrado en la fase de Alzheimer con demencia. En la fase prodrómica, la persona manifiesta o tiene fallos de memoria pero sigue haciendo vida normal, es decir, no padece demencia, pero cuando se somete a ciertas pruebas “se demuestra que tiene alguno de los biomarcadores característicos de la enfermedad”, señala el médico.
Los participantes en la investigación iban a recibir durante dos años o bien Fortasyn Connect o bien placebo. Al final, en el ámbito del objetivo primario del estudio -demostrar con un test si se mejoraba la memoria reciente- no se demostró que el grupo tratado fuera superior al grupo placebo. “¿Eso es algo negativo?”, se pregunta el doctor Blesa. Y a continuación responde lo siguiente: “En el sentido estricto sí porque es un estudio negativo con respecto al objetivo primario. Cuando se analiza el resultado del trabajo se observa que las personas que habían tomado Fortasyn Connect durante dos años estaban, al final del estudio, bastante o relativamente estables... y lo que sorprendió fue constatar que el grupo tratado con placebo también lo estaba".
Por lo tanto, no se pudo ver una diferencia porque el grupo placebo, en lugar de empeorar como era de esperar, no había empeorado. “¿Qué quiere decir esto, que los Alzheimers no empeoran? No, lo que quiere decir es que en la época en que se hizo el ensayo no teníamos estudios previos hechos con la categoría del Alzheimer prodrómico. Por lo tanto, realmente no se sabía a ciencia cierta cuál sería el declinar cognitivo que tendrían estas personas a lo largo de un año o dos”, indica Blesa. De hecho, los investigadores calcularon que se produciría un declive que, al final, no se produjo.
En cuanto a los objetivos secundarios del estudio, eran dos: por un lado, saber si se iba a enlentecer el curso de la enfermedad o si había alguna forma de demostrar que, funcionalmente, los pacientes estarían igual o peor en su día a día después de dos años. “Y lo que se observó fue que, desde un punto de vista funcional, las personas que habían recibido Fortasyn Connect estaban estadísticamente mejor que las del grupo placebo, quienes habían declinado más”, revela el experto. Por otro lado, se trataba de esclarecer si el cerebro de los sujetos tratados con Fortasyn Connect se iba a atrofiar igual o, por el contrario, se atrofiaría menos. Una vez medido el grosor de la parte del cerebro que tiene que ver con la generación de la memoria reciente, el hipocampo, “se vio que las personas tratadas presentaban menos atrofia”, asegura.
DHA y EPA, uridín monofosfato, colina, vitaminas B12, B6, C y E…
En resumen: Souvenaid, comercializado en España desde hace 5 años con indicación para el Alzheimer en estadío muy leve, no ha evidenciado un resultado positivo en la memoria de los pacientes con Alzheimer prodrómico; en cambio, los resultados respecto al enlentecimiento del curso de la enfermedad en esas personas sí han sido positivos tanto desde un punto de vista funcional como desde la óptica del proceso atrófico del hipocampo cerebral.
Souvenaid (Fortasyn Connect) es una combinación de multinutrientes: contiene los dos principales componentes de los ácidos grasos Omega 3 -ácido docosahexaenoico (DHA) y ácido eicosapentaenoico (EPA)-, uridín monofosfato (una sustancia muy importante para el metabolismo de las neuronas), colina (muy relevante para la bioquímica del cerebro en aspectos memorísticos) y vitaminas B12, B6, C y E, además de ácido fólico, fosfolípidos y selenio.