Redacción Farmacosalud.com
Burgos se convertirá, del 6 al 9 de octubre, en la capital española sobre la prevención y abordaje de las enfermedades del riñón al acoger el 47º Congreso de la Sociedad Española de Nefrología (S.E.N.). La reunión, a la que asistirá un equipo de www.farmacosalud.com con el fin de realizar una cobertura especial del evento, congregará a más de 1.000 médicos, investigadores y especialistas de todo el territorio español, además de prestigiosos ponentes internacionales que presentarán los avances y retos en el tratamiento de la afección renal. Mediante la promoción del debate y la puesta en común de las últimas investigaciones, el objetivo del encuentro es también la sensibilización social en torno a la Enfermedad Renal Crónica (ERC), una de las patologías más desconocidas y, sin embargo, de mayor impacto en la calidad de vida de los pacientes y en el sistema sanitario, con una prevalencia que ha aumentado en un 20% en la última década en España. Por ello, a esta patología se la conoce como la epidemia silenciosa del siglo XXI.
Así, según el registro de la S.E.N., la prevalencia de la Enfermedad Renal Crónica (ERC) se sitúa en España en 1.211 personas por millón (algo más de 4 millones españoles), de los cuales 55.000 están en Tratamiento Renal Sustitutivo (TRS) (hemodiálisis, diálisis o trasplante). En total, unos 6.000 españoles pasan cada año a necesitar alguna de estas opciones terapéuticas cuando falla su función renal.
El coste del Tratamiento Renal Sustitutivo, muy superior al del tratamiento del VIH
“Cada paciente que empieza a necesitar TRS le cuesta al sistema sanitario más del triple que uno que se encuentra en estadios iniciales. Y el coste medio por paciente del Tratamiento Renal Sustitutivo es 6 veces superior al del tratamiento del VIH y 24 veces superior al de la EPOC y el asma” explica el presidente del XLVII Congreso de la S.E.N., el nefrólogo Pedro Abáigar Luquin, jefe de Servicio de Nefrología del Hospital Universitario de Burgos, que insiste en la necesidad de combatir el infradiagnóstico de esta patología (que se sitúa en el 25%) y fomentar su detección precoz “para evitar en lo posible que la enfermedad avance hasta estadios en los que la única alternativa será prácticamente el TRS”.
El aumento de la prevalencia de esta patología en España, en consonancia con lo que sucede en Europa y EE.UU, ha llevado a los expertos a hablar ya de ‘epidemia silenciosa’. Entre los factores que explican este incremento están el envejecimiento de la población junto con la presencia de factores de riesgo, como la enfermedad cardiovascular, la diabetes o la hipertensión. De hecho, el 50% de la población con alguna de estas patologías sufre enfermedad renal crónica. A estos factores hay que añadir el infradiagnóstico de la enfermedad: se estima que el 25% de los afectados desconoce su situación en las fases iniciales, lo que complica el manejo clínico al tener que realizarlo en estadios más avanzados.
A pesar de que la ERC tiene un elevado impacto en la salud de la persona y en el sistema sanitario -se estima que el Tratamiento Renal Sustitutivo consume el 3% del presupuesto del Sistema Nacional de Salud y el 4% del presupuesto dedicado a Atención Especializada-, la Enfermedad Renal Crónica es una de las grandes desconocidas entre la población. “A muy poca gente se le ocurre medirse la función renal todos los años cuando llega a cierta edad, y tampoco es habitual que digamos que tal o cual alimento o hábito -como fumar o el consumo excesivo de alcohol- perjudica la salud del riñón-. Cambiar esa tendencia, como parece que estamos consiguiendo hacer con la patología cardiovascular -que está además estrechamente relacionada con la enfermedad renal- , es fundamental para frenar el avance imparable de la ERC en países como el nuestro y el coste social y sanitario que lleva aparejado”, explica María Dolores del Pino, presidenta de la S.E.N.