Redacción Farmacosalud.com
La firma Royal Philips (NYSE: PHG, AEX: PHIA) ha anunciado los resultados de dos grandes ensayos clínicos, publicados en el ‘New England Journal of Medicine’, que comparan los resultados de los pacientes utilizando el periodo libre de ondas (iFR) y la reserva de flujo fraccional (FFR) en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades del corazón. Lanzado por primera vez en 2013, iFR es un innovador índice derivado de la presión exclusivo de Philips que permite la evaluación fisiológica sin hiperemia de los bloqueos coronarios. Los hallazgos de los ensayos DEFINE FLAIR e iFR Swedeheart, que estudiaron 4.529 pacientes como parte de los estudios aleatorios de resultados de fisiología coronaria más amplios hasta la fecha, se presentaron en la Sesión Científica Anual y Exposición 2017 del American College of Cardiology (ACC.17) en Washington. Los investigadores Justin Davies, del Imperial College de Londres-Reino Unido, y el Dr. Matthias Götberg, de la Universidad de Lund en Suecia, presentaron datos de resultados de un año que muestran que, en comparación con una estrategia guiada por FFR, una estrategia guiada por iFR ofrece una solución de diagnóstico más coste efectiva y más rápida con un malestar reducido para el paciente, manteniendo unos resultados consistentes para el paciente.
"Los hallazgos de estos dos estudios clínicos tienen el potencial de mejorar significativamente el uso de la evaluación fisiológica coronaria", dijo el Dr. Manesh Patel, MD, FACC, FSCAI, Jefe de la División de Cardiología y Co-Director del Centro del Duke Heart de la Escuela de Medicina de la Universidad de Duke. "Una de las barreras para la adopción de iFR ha sido la falta de datos clínicos; sin embargo, ahora tenemos evidencia de que una estrategia de tratamiento guiada por iFR es tan fiable como una estrategia guiada por FFR con respecto a futuros eventos cardiovasculares. Adicionalmente yo creo que reducirá el malestar del paciente. Juntos los resultados de estos estudios demuestran que se pueden hacer grandes ensayos simples en la práctica clínica, y debe eliminar las barreras al uso de la fisiología coronaria en los procedimientos de intervencionismo".
iFR evita la administración de agentes hiperémicos al paciente
En terapias guiadas por la imagen en enfermedad arterial coronaria, los médicos han estado usando FFR además de imágenes de angiografía para evaluar la fisiología de un bloqueo sospechoso en las arterias coronarias para decidir, guiar, tratar y confirmar la terapia apropiada. iFR es la medición fisiológica de última generación que utiliza los mismos dispositivos de guía de presión y equipos como FFR, pero evita la administración de agentes hiperémicos al paciente, que se requiere con FFR.
Los ensayos DEFINE FLAIR e iFR Swedeheart demuestran que, comparado con el FFR, el iFR ofrece un tiempo, coste y complejidad de procedimiento reducidos sin degradación de eventos cardiacos adversos mayores (MACE). El criterio de valoración primario de DEFINE FLAIR e iFR Swedeheart fue la tasa MACE al año en los grupos iFR y FFR. DEFINE FLAIR muestra tasas de MACE de 6,8 por ciento en el brazo guiado por iFR versus 7,0 por ciento en el brazo guiado por FFR, p = 0,003 para no inferioridad. Los datos de los resultados de iFR Swedeheart mostraron tasas de MACE de 6,7 por ciento en el brazo guiado por iFR versus 6,1 por ciento en el brazo guiado por FFR, p = 0,007 para no inferioridad.
iFR conduce a una reducción del 10% en el tiempo de procedimiento
Los dos ensayos establecieron además que iFR ofrece un procedimiento más rápido mientras que elimina, casi completamente, los síntomas graves del paciente en comparación con FFR. El estudio DEFINE FLAIR demostró que debido a la eliminación de la necesidad de un fármaco hiperémico, los tratamientos guiados por iFR conducen a una reducción del 10% en el tiempo de procedimiento frente al tratamiento guiado por FFR (p = 0,001), mientras que reducen el malestar del paciente en un 90% (p < 0,01). Los efectos secundarios de los fármacos hiperémicos pueden incluir aumento de la frecuencia cardíaca, palpitación del corazón, enrojecimiento, temperatura elevada y sentimientos de destrucción inminente, que simulan el sufrimiento físico y emocional.
DEFINE FLAIR fue una comparación aleatoria y a ciegas de los resultados clínicos y la eficiencia de las intervenciones iFR y FFR de 2.492 pacientes en 49 centros en Europa, Asia, América del Norte y África. iFR Swedeheart fue un ensayo aleatorio de 2.037 pacientes en 15 centros de Suecia, Dinamarca e Islandia que evaluaron los resultados de la iFR frente a la intervención guiada por FFR. Ambos estudios llevaron a cabo sus comparaciones de iFR frente a FFR utilizando guías de presión y equipos Philips. Desde la introducción de la modalidad de iFR sin hiperemia en 2013, la iFR se ha estudiado en casi 15.000 pacientes y se utiliza en más de 4.100 laboratorios de cateterismo en todo el mundo.
El nivel socioeconómico y el riesgo cardiovascular
Un estudio recientemente publicado en la Revista Española de Cardiología, una de las publicaciones de mayor impacto de esta área, pone de manifiesto la relación entre el Producto Interior Bruto (PIB) y la mortalidad cardiovascular. Investigadores de la Universidad de Málaga, el Hospital Universitario Virgen de la Victoria y el Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Cardiovasculares (CIBERCV), han constatado que existe una asociación inversa entre riqueza y mortalidad por causas cardiovasculares. “En el análisis observamos una correlación entre menor PIB y mayor mortalidad por cardiopatía isquémica y enfermedad cerebrovascular, así como un menor número de intervenciones como angioplastias, cirugías o marcapasos”, según apunta Manuel Jiménez-Navarro, investigador del CIBERCV y del Hospital Virgen de la Victoria de Málaga y coordinador del estudio.
Aunque sigue siendo la primera causa de muerte en España (29,66% de la mortalidad), existen diferencias entre las Comunidades Autónomas, siendo Andalucía la región con mayor índice de mortalidad cardiovascular (33,16%) y Canarias la de índice menor (24,34%). El equipo de investigación analizó los datos del PIB per cápita medio durante los años 2005 a 2014 en relación con la mortalidad cardiovascular general, por enfermedad arterial coronaria, insuficiencia cardiaca y accidente cerebrovascular. Asimismo, se estudió la media de intervenciones cardiovasculares por comunidades autónomas. Andalucía, una de las regiones con PIB más bajo de España (solo seguida por Extremadura) supera en 3,5 puntos la media de española de mortalidad cardiovascular general, siendo la comunidad que registró una media superior en el periodo estudiado, al igual que en insuficiencia cardiaca y accidente cardiovascular.
Los resultados del estudio ponen de manifiesto que la riqueza económica de una región podría considerarse uno de los factores a tener en cuenta en la estimación del riesgo cardiovascular, así como a la hora de establecer medidas preventivas.