Redacción Farmacosalud.com
Está escrito. Es lo que hay que hacer con un lesionado medular en una situación de emergencia. Si bien hasta ahora en general se estaba actuando con absoluta corrección en estos casos, los expertos han querido plasmar en un documento los criterios que deben seguir los servicios de emergencia extrahospitalarios a la hora de atender a una persona que ha sufrido un traumatismo de esta índole. Según explica a www.farmacosalud.com la doctora Ampar Cuxart, lo que da un aire pionero a este protocolo en España es el concepto de haber establecido por escrito “de una forma ordenada, actualizada y consensuada” entre los servicios de emergencias extrahospitalarias y un hospital de referencia en lesiones medulares “la actuación que hay que seguir ante un paciente que sufre un traumatismo con sospecha de lesión medular aguda”.
El Hospital Universitario Vall d’Hebron (Barcelona) y el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) de Cataluña han presentado el nuevo Protocolo de Atención Inicial al Paciente con Lesión Medular Aguda Traumática (LMAT), un documento que ofrece a los profesionales implicados en la atención al paciente adulto o pediátrico con una posible LMAT una guía para su diagnóstico y tratamiento desde el lugar del incidente y durante el traslado. A la vez, se especifican los criterios de derivación a la Unidad de Lesionados Medulares del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación Vall d’Hebron, centro de referencia en estos casos para Cataluña, Islas Baleares y Andorra.
Una atención integral equitativa, de calidad, eficiente y satisfactoria
El objetivo final del protocolo es conseguir una atención integral equitativa, de calidad, eficiente y satisfactoria tanto para los afectados como para los profesionales sanitarios que les atienden, teniendo en cuenta que el Hospital Vall d’Hebron es el único centro de Cataluña capacitado para atender a este tipo de pacientes desde la fase aguda de la patología, incluyendo el enfoque de la rehabilitación para cada caso. El documento tiene como referencia el llamado Codi PPT, que se puso en marcha en el año 2011. El código lo activa el SEM en el lugar del incidente facilitando información sobre las posibles lesiones al hospital categorizado y escogido para preparar la recepción y atención inicial al paciente. Vall d’Hebron ya ha atendido más de 1.500 casos de pacientes con prioridad 0 y 1, los más graves.
Los autores del protocolo destacan la importancia de generar un verdadero continuum asistencial. En este sentido, recalcan que la Unidad de Lesionados Medulares permite el manejo específico del paciente lesionado medular, hecho que incluye el tratamiento quirúrgico en el momento idóneo, lo que conlleva notables beneficios (mejor recuperación funcional, estancias hospitalarias más cortas y menos problemas sobrevenidos). El jefe de la unidad, el doctor Miguel Ángel González Viejo, apunta que “hace falta que todo el mundo tenga presente que todos los pacientes con sospecha de lesión medular aguda tiene que ser trasladados al hospital”, y “sólo en caso de riesgo vital inmediato tienen que ser trasladados al centro más próximo y en el menor tiempo posible; una vez resuelto el problema vital inmediato, tienen que ser trasladados a Vall d’Hebron”. Cuxart, que es jefa del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital Vall d’Hebron, recuerda que “los primeros momentos de atención son vitales”, según unas declaraciones difundidas por este centro hospitalario.
La oportunidad de contar siempre con un especialista en lesiones medulares
Uno de los aspectos diferenciales de la nueva guía es que “dice claramente que el paciente con sospecha de lesión medular tiene que ser trasladado al Hospital Universitario Vall d’Hebron (hospital de referencia en estos casos en Cataluña), donde hay una unidad de lesionados medulares con un médico de guardia durante las 24 horas al día que puede dar, con la colaboración de todos los demás especialistas necesarios (anestesistas, personal de cuidados intensivos, etc), la mejor atención en este tipo de lesiones”, comenta Cuxart. “Por otro lado, sólo se contempla que el paciente con sospecha de lesión medular pueda ir a un centro hospitalario no especializado en caso de que haya un riesgo vital, un riesgo para la vida del paciente. Y, en este caso, se recomienda que una vez el afectado esté estabilizado, y a poder ser en menos de 24 horas, sea referido al Hospital Vall d’Hebron”, agrega.
El nuevo protocolo nace de los resultados de experiencias contrastadas en países como Australia y Canadá. “El SEM permite garantizar la atención inicial del enfermo en el lugar del incidente y coordinar tanto los recursos necesarios para hacer esta primera asistencia como gestionar a través de la Central de Coordinación Sanitaria (CECOS) el destino más adecuado según el estado clínico del afectado”, explica el doctor Francesc Xavier Jiménez Fàbrega, jefe clínico del SEM. “Esto evita traslados innecesarios entre hospitales”, enfatiza.
La guía puede ayudar a evitar el agravamiento de lesiones medulares incompletas
El novedoso documento mejora, en general, la atención a los lesionados medulares y, en un plano más particular, puede evitar incluso el agravamiento de algunas de esas lesiones. “En los pacientes que desgraciadamente han padecido una lesión vertebral compleja, con desplazamiento de los cuerpos vertebrales, y que por lo tanto presentan una lesión medular completa, poco podemos hacer con la tecnología médica de la que disponemos en la práctica clínica. Otra cosa son las líneas de investigación que hay en marcha para intentar prevenir o mejorar la lesión medular una vez establecida”, admite la doctora Cuxart. O sea, lo que está diciendo la experta es que en un caso de lesión compleja la nueva guía mejora la atención inmediata al paciente, pero una afectación medular grave es la que es y, por ahora, las emergencias médicas poco más pueden hacer mediante su actuación para intentar impedir que, a medio o largo plazo, el afectado por ese grave traumatismo acabe necesitando una silla de ruedas.
Ahora bien, existe otro grupo de lesionados que pueden beneficiarse en mucha mayor medida del nuevo protocolo de atención: son aquellas personas, tanto jóvenes como de edad avanzada, que han sufrido mínimas lesiones medulares o incompletas. “Estas lesiones -indica la facultativa- son las que, potencialmente, más pueden beneficiarse de una atención en un centro especializado para lesionados medulares porque, al haber allí profesionales expertos en el diagnóstico y categorización de la lesión medular, se pueden tratar adecuadamente pequeñas lesiones medulares… en manos no expertas, esos mismos casos pueden ser tratados como una lesión no medular, lo que pueda empeorar el resultado del traumatismo”.
Como ejemplo concreto de colectivo susceptible de beneficiarse en mayor medida del nuevo protocolo figuran las personas mayores de 65 años, detalla Cuxart: “Actualmente son personas con una vida mucho más activa, están en mejores condiciones funcionales porque todo ha mejorado. Por cierto, es un colectivo que cada vez más nos viene con lesiones medulares. A veces sufren caídas (yendo en bicicleta, caminando por la montaña, etc) y padecen mínimas lesiones medulares o incompletas”. Una lesión completa es aquella en que la afectación sensitiva y de fuerza incide totalmente en las extremidades inferiores o de las cuatro extremidades, mientras que en un cuadro incompleto la afectación sensitiva o motora es parcial.
La afectación medular aguda, más habitual en hombres que en mujeres
La incidencia de la lesión medular traumática en Cataluña se ha mantenido estable en los últimos años, situándose en 4,4 casos por millón de habitantes. Es más habitual en hombres que en mujeres, con una ratio de 3,6 hombres por cada mujer lesionada. Las causas son diversas. En adultos, la más habitual es el accidente de tráfico (aproximadamente el 40%). Los principales elementos determinantes son la alta velocidad, la no utilización de los sistemas de seguridad, como el casco o el cinturón de seguridad, el consumo de alcohol y drogas, y la deficiente calidad de la asistencia inicial. La segunda causa más habitual es la caída accidental, que representa el 35% de los casos y afecta sobre todo a la población de más edad. En pacientes pediátricos, las lesiones más habituales se producen en los accidentes de tráfico, incluyendo los atropellamientos. De hecho, es la primera causa de muerte en recién nacidos, niños y adolescentes.
La atención inicial al paciente con una posible lesión medular
La atención al paciente con posible lesión medular se engloba dentro de la atención al enfermo politraumático (Codi PPT). Su pronóstico depende de una detección precoz, la aplicación de los procedimientos adecuados y la derivación al centro de referencia que pueda ofrecer una atención completa al enfermo. El SEM activa anualmente cerca de 9.000 Codis PPT. En caso de un accidente con heridos, se tiene que aplicar la norma P.A.S (Proteger, Alertar y Socorrer). Tanto los ciudadanos como los profesionales de la atención médica tienen que seguir estos consejos para garantizar la atención al accidentado y lograr el objetivo principal, preservar la vida del paciente:
-Proteger: evitar que haya más víctimas. Señalizar el lugar del accidente y esperar que el equipo de rescate haga su trabajo. Llevar al enfermo a un lugar seguro (en el caso de los profesionales sanitarios).
-Alertar: solicitar otros recursos si la situación desborda a los primeros intervinientes. Los ciudadanos tienen que avisar a los servicios de emergencia llamando al 112.
-Socorrer: empezar a atender al enfermo. Los ciudadanos tienen que actuar según sus habilidades y conocimientos, no todo el mundo está preparado para auxiliar a personas heridas.
Los ciudadanos que se encuentren a un accidentado, tienen que tener en cuenta que:
-Se tiene que evitar mover o trasladar a una persona herida.
-No se le tiene que dar comida ni beber.
-Se tiene que evitar sacar el casco a un motorista o a un ciclista.
-Se tiene que abrigar a las víctimas, si es posible hacerlo con seguridad.
-Hay que intentar tranquilizar a las víctimas.
-Quedarse a su lado hasta que llegue un profesional capacitado para atenderles.
-Facilitar la labor de los profesionales, dejándoles espacio para trabajar y manteniendo la calma.