Redacción Farmacosalud.com
Dicen que ‘dos mejor que uno’… pero en el caso que nos ocupa, dos en uno, mejor que dos en dos. El nuevo antirretroviral Rezolsta de la compañía Janssen combina el fármaco Darunavir y el potenciador Cobicistat en un solo comprimido para tratar a las personas con VIH. Según el doctor Josep Mallolas, consultor sénior del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Clínic de Barcelona, “el pasar de 2 a una sola pastilla impacta de forma importante en la adherencia por 2 motivos: 1) El primero por cuanto facilita obviamente el cumplimiento de la medicación al ser menos pastillas para el mismo efecto. Y 2) Evita la adherencia selectiva, que consiste en tomar parcialmente la medicación. Con esta opción (Rezolsta) el fármaco se toma correctamente con toda seguridad”.
“Es difícil conseguir una adherencia del 100% en cualquier tratamiento crónico y posiblemente de por vida. Por ello, cuanto más cómodo y sencillo, mayor posibilidad de adherencia máxima y correcta evitando los ‘olvidos’ que en muchas ocasiones son el principio del fracaso virológico”, agrega el galeno en declaraciones a www.farmacosalud.com.
“Científicamente no hay ninguna duda que la denominada PPRE funciona”
Tal y como afirma el doctor Mallolas, una de las claves de Rezolsta es su perfil de tolerabilidad: “La tolerabilidad de Rezolsta es buena. No es de esperar ninguna manifestación clínica en concreto como efecto adverso. Por otro lado, el uso del potenciador cobicistat sí que puede provocar un número de interacciones farmacológicas importantes, pero que en todo caso son similares a las que provoca el otro potenciador que se ha utilizado por separado desde hace muchos años con darunavir, que es ritonavir. En definitiva, estas interacciones son ampliamente conocidas y en la actualidad manejables en la práctica médica habitual”. Así las cosas, en principio las contraindicaciones que presenta Rezolsta son “las mismas que las que tenía darunavir con ritonavir, es decir, solamente las derivadas de las interacciones farmacológicas por el uso del potenciador. Precisamente, la versatilidad es una de las características fundamentales de Rezolsta, pues va a ser una combinación que va a ser tributaria de ser empleada en cualquier escenario del tratamiento antirretroviral, tanto en pacientes naive que nunca han recibido tratamiento previo, como en simplificación así como en esquemas de rescate”, explica el experto.
Mallolas también ha opinado sobre la controvertida profilaxis pre-exposición (PPRE), o sea, recibir fármacos antirretrovirales para evitar que prospere una posible infección por VIH (medicarse antes de exponerse a un posible contagio): “Científicamente no hay ninguna duda que la denominada PPRE funciona y evita nuevas infecciones del VIH. La controversia en este punto es quién debe asumir el coste de esta profilaxis. ¿La sanidad pública? ¿Privadamente la persona en concreto? De hecho, el uso del preservativo tiene un impacto científico similar y su coste no lo asume la sanidad pública”.
La terapia atazanavir/ritonavir+lamivudina, opción eficaz y segura en pacientes estables
Por otro lado, un estudio realizado por el Grupo de Estudio del SIDA (GeSIDA) de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) demuestra que la terapia de simplificación dual con atazanavir/ritonavir+lamivudina es una opción eficaz y segura en pacientes estables. Concretamente, en el citado estudio la proporción de pacientes con carga viral indetectable a las 48 semanas fue del 84% en terapia dual frente al 78% en terapia triple, demostrándose la no inferioridad de la nueva estrategia. Además, hubo más pacientes en el grupo de tratamiento triple que abandonaron el estudio por problemas de toxicidad, han indicado desde GeSIDA.
Este ensayo clínico se realizó para demostrar que una terapia consistente en dos medicamentos para el VIH (atazanavir potenciado con ritonavir+lamivudina) era tan eficaz como usar tres medicamentos (atazanavir potenciado con ritonavir más dos nucleósidos). De esta manera se pretendía demostrar que una combinación con menos fármacos era tan eficaz como el tratamiento estándar, evitando exponer a los pacientes a medicamentos innecesarios. De hecho, el tratamiento antirretroviral ha cambiado drásticamente la evolución de la infección por el VIH, que ha pasado de ser una enfermedad rápidamente mortal a una infección crónica. Actualmente los pacientes que son diagnosticados precozmente y que toman su medicación con regularidad tienen un pronóstico vital similar al de las personas de su sexo y edad. No obstante, el tratamiento antirretroviral ha de tomarse indefinidamente y eso causa varios inconvenientes, algunos de los cuales pueden limitar la eficacia del mismo. Uno de ellos son las toxicidades, que aunque raras con los fármacos modernos pueden causar problemas a lo largo de la vida de un paciente. Los fracasos del tratamiento a veces se asocian con resistencias del virus a los fármacos, que inutilizan los medicamentos que tomaba el paciente así como otros de la misma familia. Por último, pero no menos importante, el coste de los tratamientos es un aspecto que también influye cuando deben ser administrados de por vida.
La lucha contra las comorbilidades asociadas al VIH, una de las prioridades
Por su parte, el doctor Antonio Rivero, jefe de Sección de Enfermedades Infecciosas del Hospital Reina Sofía de Córdoba, profesor de la Universidad de Córdoba y presidente de GeSIDA, destaca que como consecuencia del éxito del tratamiento antirretroviral asistimos a un envejecimiento gradual de las personas infectadas por el VIH, entre las cuales pueden presentarse comorbilidades propias de la edad como las enfermedades cardiovasculares, los trastornos metabólicos, la enfermedad renal, la osteoporosis y el deterioro cognitivo; aspectos cuyo adecuado manejo es tan importante como el control del VIH. Por todo ello, el estudio de nuevas estrategias de tratamiento de tratamiento antirretroviral y la lucha contra las comorbilidades y coinfecciones asociadas al VIH son hoy en día algunas de las prioridades en la lucha contra el virus causante del sida, sostiene Rivero.
Cada año se diagnostican en España alrededor de 3.500 casos de VIH, han apuntado desde la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV). Actualmente, la mayoría de las infecciones se producen por vía sexual y en hombres homosexuales. En el caso de las mujeres, el contagio tiene lugar en la mayoría de las ocasiones por vía heterosexual. El uso del preservativo y el tratamiento antirretroviral son muy eficaces para evitar la transmisión del VIH. La transmisión vertical (de la madre al feto) en los países desarrollados es muy rara, ya que en el control de los embarazos siempre se realizan pruebas para detectar el VIH y otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS).