Se estima que la prevalencia de hiperhidrosis llega hasta el 2,8% de la población[1]. A partir de estos datos, se calcula que en España más de 1.200.000 personas conviven con esta patología. Su causa es desconocida, aunque dos tercios de los pacientes tienen un familiar con hiperhidrosis[2]. “Las personas con hiperhidrosis producen sudor en cantidades mucho más grandes de las necesarias para controlar su temperatura corporal, especialmente en las palmas de las manos, las plantas de los pies y las axilas”, señala el Dr. José Luis López Estebaranz, dermatólogo, profesor en la Universidad Rey Juan Carlos y director médico de la Clínica DermoMedic. “Esta patología afecta por igual a hombres y a mujeres y se empieza a manifestar desde la infancia y la adolescencia”, añade. La sudoración excesiva tiene un gran impacto en la calidad de vida de las personas[3] llegando a condicionar la elección de su trabajo[4]. También les limita su forma de vestir llegando a afectar su autoestima y la seguridad en sí mismos[4]. Un gran porcentaje de las personas que la sufren evita participar en actividades sociales[3]. En concreto, y según un estudio realizado entre personas con esta patología, un 34% piensa que sudar excesivamente en público es peor que tener miedo escénico y un 30% cree que produce más vergüenza que tener acné o sufrir obesidad[4], han apuntado fuentes de la compañía Allergan.
El Dr. López Estebaranz proporciona algunos consejos para combatir esta patología:
-Usar prendas que sean frescas. Las fibras naturales pueden ser frescas pero absorben sudor y permanecen húmedas. Algunas fibras sintéticas menos frescas repelen el sudor y permanecen secas. Tenga disponible ropa para mudarse durante el día
-Mantener un ambiente en el trabajo fresco y bien ventilado
-Evitar el consumo de alcohol, café, té, tabaco y alimentos picantes
-Reducir el estrés, la tensión y la ansiedad
-Mantener una buena higiene corporal. De esta forma evitará el mal olor corporal, si bien no el exceso de sudoración
Bótox y denervación simpática
Los tratamientos tópicos con soluciones antitranspirantes que incluyan clorhidrato de aluminio hexahidratado son las medidas iniciales. Con estos productos tópicos la mayoría de los casos no se controlan, por lo que es necesario utilizar otros tratamientos. “Es la toxina botulínica tipo A* aplicada de forma local intradérmica el tratamiento que ha revolucionado el manejo de los pacientes con hiperhidrosis focal idiopática”, comenta el especialista. “Es un tratamiento que se realiza de forma ambulatoria y dura entre 15 y 30 minutos. Sus efectos pueden durar en torno a 7 meses y su eficacia es cercana al 100%”, continúa. El 89% está satisfecho con los resultados en la primera semana y hasta el 93% lo está en la semana 16[5]. “En axilas el tratamiento es prácticamente indoloro. Dentro de la primera semana de tratamiento ya es notoria la mejoría en la sudoración. Un segundo tratamiento es necesario cuando se empiece a notar una vuelta a la sudoración excesiva. Esto suele ocurrir pasados 4-9 meses”, explica el Dr. López Estebaranz.
Por otro lado, y según informa la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), actualmente el tratamiento de elección de la hiperhidrosis palmar y axilar es la denervación simpática (simpatectomía, simpaticolisis y clipping) por su alta eficiencia y seguridad. Esta técnica consiste en la interrupción del estímulo nervioso de la cadena simpática a nivel T2 (rubor facial), T3 (palmar) y T4 (axilar). “La denervación simpática torácica es segura, con pocas complicaciones, escasos efectos secundarios y elevada eficacia. Esto ha generado que sea cada vez más solicitada por aquellos pacientes que sufren alguna de las formas de hiperhidrosis, e incluso por pacientes afectados por rubor facial”, explica el Dr. Pedro M. Rodríguez Suárez, cirujano torácico del Hospital Universitario de Gran Canaria Dr. Negrín y miembro de SEPAR. “La efectividad de la simpatectomía torácica viene determinada principalmente por el tipo de hiperhidrosis y el tiempo transcurrido desde la intervención. La efectividad inicial en la hiperhidrosis palmar alcanza el 99,2% con una satisfacción del 97%. Pasados los 6 meses de la operación la efectividad puede disminuir hasta el 98%, en algunos casos”, explica Rodríguez.
El tratamiento de la recidiva, la reintervención quirúrgica
En relación a la calidad de vida, transcurridos 30 días desde la intervención, el 86,4% de los pacientes definen su calidad de vida como “buena o excelente”. Los principales factores que determinan el incremento en la calidad de vida postoperatoria son la ausencia o disminución de la hiperhidrosis y la ausencia de sudoración compensatoria. “El grado de satisfacción postoperatoria es elevado aunque disminuye con el tiempo a causa de la aparición de la sudoración compensatoria o por la reaparición de la hiperhidrosis”, afirma el Dr. Rodríguez. Las complicaciones derivadas de la simpatectomía torácica no superan el 10%, siendo el neumotórax la más frecuente, aunque solamente debe ser tratado con drenaje pleural en el 30% de los casos. El efecto secundario más importante de esta técnica es la sudoración compensatoria, que ocurre entre el 50 y el 90% de los casos, pero que en gran parte de los casos (alrededor del 90%) se presenta de forma leve. “A pesar de la aparición de la sudoración compensatoria, el 90% de los pacientes que la sufren toleran mejor este efecto secundario que los síntomas de la hiperhidrosis que sufrían previamente a la intervención”, asegura el Dr. Rodríguez. “Solamente el 6% de los pacientes se arrepiente de la operación por motivos de compensación compensatoria muy severa. Es por ello que es fundamental informar a los pacientes de los posibles efectos secundarios y complicaciones del abordaje quirúrgico de la hiperhidrosis”, añade
La persistencia de la hiperhidrosis se presenta entre un 1,9-2,8% de los casos y suele deberse a una simpatectomía torácica errónea o incompleta. La recidiva de la hiperhidrosis suele aparecer durante los primeros 6 meses y su intensidad, en la mayoría de los casos, es levemoderada. Al igual que para la persistencia, el tratamiento de la recidiva es la reintervención quirúrgica, la cual registra una tasa de éxito superior al 80%.
* Toxina botulínica tipo A: Botox®
Referencias
1. Actualización en hiperhidrosis focal primaria. D. González Fernández, N. Pérez Oliva. Med Cutan Iber Lat Am 2012;40(6):173-180
2. Health A-Z Encyclopaedia: Hyperhidrosis http://www.nhsdirect.wales.nhs.uk/encyclopaedia/h/article/hyperhidrosis/#ratearticle
3. Hyperhidrosis support group: About Hyperhidrosis http://www.hyperhidrosisuk.org/about.htm
4. Experiences with Sweating Survey. For the International Hyperhidrosis Society http://www.sweathelp.org/pdf/harrisexec.pdf
5. Effect of botulinum toxin type A on quality of life measures in patients with excessive axillary sweating: a randomiced controlled trial. M.K. Naumann y col. on behalf of the botox hyperhidrosis clinical study groupBr J Dermatol 2002 Dec;147(6): 1218-1226