Redacción Farmacosalud.com
Además de los tratamientos farmacológicos, es muy importante insistir en los beneficios que una dieta adecuada puede tener en el control de la hipertensión arterial (HTA), no sólo en las etapas iniciales del diagnóstico sino también durante todo el seguimiento de este tipo de pacientes. En este sentido, un estudio (1) realizado por la Unidad de HTA y Riesgo Vascular del Hospital Clínic de Barcelona en el marco del estudio PREDIMED (PREvención con DIeta MEDiterránea, www.predimed.es/introduction.html) sobre 235 pacientes con una edad media de 66,5 años, de los cuales el 85,4% presentaban HTA, mostró los beneficios de la dieta mediterránea suplementada con aceite de oliva virgen extra o frutos secos sobre los valores ambulatorios de la hipertensión arterial de los pacientes estudiados, todos ellos de alto riesgo vascular -mayoritariamente hipertensos bajo tratamiento farmacológico-. Pero no solamente una dieta adecuada puede ayudar a mantener un buen control de la HTA: el Grupo de Investigación sobre el Riesgo Cardiovascular, Nutrición y Envejecimiento del IDIBAPS, en el que participan profesionales del Clínic, está desarrollando una nueva investigación dentro del estudio PREDIMED PLUS, financiado por el CIBER de Obesidad y Nutrición (ISCIII), con el objetivo de evaluar el impacto que el incremento de la actividad física pueda tener en los valores ambulatorios de la PA, fundamentalmente en los pacientes con HTA.
Los resultados de este estudio, que actualmente está en fase de reclutamiento de participantes, estarán disponibles en 2020, han apuntado fuentes del Hospital Clínic.
La HTA, causa de muerte de 9 millones de personas al año
La hipertensión arterial afecta ya a mil millones de habitantes en todo el mundo y es la causa de la muerte de 9 millones de personas al año, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esta enfermedad crónica puede causar infartos de miocardio y accidentes vasculares cerebrales, se desarrolla de forma silenciosa e invisible y no suele presentar síntomas. Pero, aun siendo potencialmente letal, es una enfermedad que se puede prevenir; para ello es importante sensibilizar a la población sobre la importancia de un diagnóstico temprano, así como dar a conocer las medidas higiénicodietéticas y de actividad física existentes que pueden ayudar a mantener la HTA bajo control. Con este objetivo, la Unidad de HTA y Riesgo Vascular del Hospital Clínic de Barcelona organiza el domingo 17 de Mayo, Día Mundial de la Hipertensión Arterial, el I Open ‘Marxa Nòrdica’ en la ciudad condal.
En España, a pesar de los múltiples esfuerzos clínicos y terapéuticos realizados para mejorar el control de la hipertensión arterial, los resultados obtenidos siguen siendo muy mejorables. Datos epidemiológicos recientes (2) revelan que la proporción de españoles que sufren de HTA (presentan cifras de presión arterial (PA) máxima superior o igual a 140mmHg y/o cifras de PA mínima superior o igual a 90 mmHg, de mantera mantenida) respecto al total de la población de 18 años o más alcanza el 33%, es decir, 33 personas mayores de edad de cada 100 son hipertensas en España. De ellas, solamente unas 20 (el 59,4%) conoce su situación de hipertenso. De estas 20, 16 siguen un tratamiento (78,8%) pero solamente 8 de estas 16 personas mantienen su HTA controlada. Prácticamente, solamente uno de cada cuatro españoles alcanza realmente los objetivos de control de su hipertensión arterial.
I Open ‘Marxa Nòrdica’ contra la HTA
Para promocionar entre la población los beneficios que un ejercicio físico adecuado puede ofrecer a los pacientes hipertensos, la Unidad de HTA y Riesgo Vascular del Clinic organiza el Domingo 17 de Mayo, coincidiendo con el Día Mundial contra la Hipertensión Arterial, el I Open ‘Marxa Nòrdica’ en Barcelona, durante el cual instructores especializados en este tipo de marcha muestran a los participantes los principios básicos de la técnica a lo largo de dos recorridos programados, de 6 y 10 km, respectivamente, por la zona olímpica de Barcelona.
La hipertensión arterial afecta a más del 68 por ciento de los mayores de 60 años de edad, según datos ofrecidos por la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG).
La toma de la tensión arterial es un acto sencillo, pero a menudo se realiza incorrectamente; por eso, con el fin de que las personas mayores aprendan a tomarse la tensión de manera correcta, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología ha elaborado el ‘Decálogo para tomarse correctamente la tensión’:
1- Antes de comenzar comprueba que el esfigmomanómetro (aparato que se usa para medir la tensión) sea del tamaño adecuado. Si es muy pequeño de manera proporcional al tamaño del brazo nos puede arrojar una cifra tensional falsamente elevada.
2- No fumes, realices ejercicio físico o ingieras café antes de tomarte la tensión, ya que también puede condicionar cifras elevadas de tensión arterial temporalmente.
3- Descansa al menos cinco minutos antes de realizarte la medición.
4- Mide tu tensión siempre a la misma hora. El mejor momento es en las primeras horas de la mañana, en donde se suelen presentar los niveles más altos.
5- Mide tu tensión siempre en una habitación con temperatura media (entre los 18-22 ºC).
6- Toma la medición con el brazo siempre en posición horizontal a la altura del corazón, apoyándolo en una mesa o el brazo del sillón.
7- Coloca el manguito alrededor del brazo desnudo, entre el hombro y el codo con la manga remangada (que no apriete el brazo) y con las piernas ligeramente abiertas.
8- Mientras te tomas la tensión no hables ni te muevas.
9- Mide siempre la tensión en ambos brazos, y quédate con la cifra más elevada. El diagnóstico definitivo de hipertensión se basa en al menos tres mediciones de tensión arterial tomadas en dos visitas diferentes.
10- Realiza otra medición cinco minutos después de la primera.
Referencias
(1) http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/22949530. Achievement of cardiometabolic goals in aware hypertensive patients in Spain: a nationwide population-based study
(2) http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/24799608. Mediterranean diet reduces 24-hour ambulatory blood pressure, blood glucose, and lipids: one-year randomized, clinical trial.