Redacción Farmacosalud.com
Una línea de investigación pionera en el mundo y desarrollada por un consorcio de hospitales españoles plantea una nueva forma de estudiar el cáncer de cabeza y cuello sin necesidad de recurrir a procedimientos invasivos. La clave está en la saliva. Un equipo liderado por el Dr. Francesc Xavier Avilés Jurado, especialista en Otorrinolaringología, jefe de la Unidad de tumores de cabeza y cuello del Hospital Clínic de Barcelona e investigador principal del nuevo estudio, ha demostrado que el microbioma salival —el conjunto de microorganismos que habita en la boca— puede reflejar con notable precisión el entorno biológico del tumor y, lo que es aún más prometedor, aportar información sobre la evolución clínica y la respuesta al tratamiento. Los primeros resultados de este trabajo han sido presentados en el 76º Congreso Nacional de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC), celebrado recientemente en Madrid, y suponen un paso adelante hacia la identificación de biomarcadores no invasivos en cáncer.
El carcinoma de cabeza y cuello es un grupo heterogéneo de neoplasias malignas que se originan principalmente en el epitelio mucoso de la cavidad oral, faringe (nasofaringe, orofaringe, hipofaringe), laringe, cavidad nasal y senos paranasales. El subtipo más frecuente es el carcinoma escamoso de cabeza y cuello (HNSCC), que representa aproximadamente el 90% de los casos y constituye uno de los grandes desafíos en oncología debido a su gran diversidad biológica y clínica. Actualmente no existen marcadores fiables que permitan predecir qué pacientes con este cáncer –de los que se producirán sólo en este año más de 7.000 nuevos en España– responderán mejor a cada tratamiento. Esta incertidumbre dificulta la personalización terapéutica y la mejora de los resultados clínicos.

Dr. Francesc Xavier Avilés
Fuente: SEORL-CCC / Euromedia grupo
Tradicionalmente, el análisis del tumor se realiza a través de biopsias de tejido, un procedimiento que, aunque esencial, resulta invasivo, doloroso y no siempre repetible. Frente a ello, la nueva aproximación desarrollada por este grupo de investigación español propone utilizar una ‘biopsia líquida salival’, un procedimiento no invasivo, indoloro y fácilmente repetible que podría permitir seguir la evolución del tumor a lo largo del tiempo.
"Estos primeros resultados confirman que la saliva no es sólo un reflejo pasivo de la cavidad oral: contiene información funcional que, debidamente interpretada, puede decirnos cómo evoluciona el tumor y cómo responde al tratamiento. Nuestra aproximación multiómica nos permite avanzar hacia un conocimiento integral de la lesión tumoral, su ambiente y a biomarcadores pronósticos no invasivos que podrían cambiar el manejo clínico del cáncer de cabeza y cuello", explica el Dr. Avilés Jurado.
Del "quién está" al "qué hacen": una mirada funcional al microbioma
El análisis del microbioma salival se ha realizado mediante técnicas de secuenciación masiva de ADN. Concretamente, se han aplicado dos aproximaciones complementarias: el estudio 16S, que identifica qué tipos de bacterias están presentes, y la metagenómica, que va un paso más allá y permite conocer qué funciones metabólicas o inmunológicas desempeñan esas bacterias. Este enfoque integrado, conocido como análisis multiómico, permite pasar de una visión descriptiva (‘qué microorganismos hay’) a una visión funcional (‘qué están haciendo y cómo pueden influir en el tumor’).
Los resultados preliminares muestran que, en los pacientes con cáncer de cabeza y cuello, la diversidad microbiana de la saliva disminuye y aumenta la presencia de bacterias con potencial proinflamatorio. Además, se han identificado rutas metabólicas alteradas que podrían tener relevancia clínica, como el metabolismo del succinato, la síntesis ribosomal y la regulación de selenoproteínas, todos ellos procesos implicados en la inflamación crónica, el metabolismo celular y la progresión tumoral.

Fuente: SEORL-CCC / Euromedia grupo
Entre los hallazgos más novedosos destacan tres géneros bacterianos —Selenomonas, Actinomyces y Prevotella—, cuya presencia y actividad parecen estar asociadas a la evolución del tumor. Y, gracias al análisis funcional, los investigadores han detectado la expresión de marcadores moleculares concretos, como K01823 (Metilmalonil-CoA mutasa) y K07015 (proteína ribosomal S19), relacionados con la síntesis de proteínas y el metabolismo del succinati. Estos procesos podrían vincular la actividad de las bacterias con cambios en la biología tumoral, en particular con la biogénesis ribosomal y la inflamación del microambiente del cáncer.
En términos sencillos, esto significa que ciertas bacterias presentes en la saliva y ciertas vías metabólicas podrían influir en el comportamiento del tumor, modulando su agresividad y su capacidad para resistir los tratamientos. Si se confirma esta relación, este líquido corporal podría convertirse en un espejo molecular del tumor, proporcionando información clave sobre su evolución sin necesidad de recurrir a procedimientos invasivos. "Parece existir un diálogo entre el microbioma y el tumor, uno influye al otro y viceversa; descubrir los términos de este diálogo, tanto para inhibirlo como para promocionarlo, puede ser clave en el desarrollo de herramientas no sólo pronósticas, sino también terapéuticas", señala Avilés.
Una herramienta prometedora para la medicina personalizada
El enfoque propuesto tiene implicaciones clínicas de gran alcance. Analizar la saliva de forma periódica podría permitir a los médicos monitorizar la respuesta al tratamiento, detectar recaídas o ajustar la terapia de forma individualizada según los cambios observados en el microbioma y en su funcionalidad. Además, se trata de una técnica fácil de aplicar, económica y cómoda para el paciente, que podría integrarse en la práctica clínica habitual una vez validada.

(de izq. a dcha): la Dra. María del Mar Medina González, secretaria general de la SEORL-CCC; el presidente de la SEORL-CCC, el Dr. Serafín Sánchez Gómez, y la presidenta de Relaciones Internacionales de la SEORL-CCC, la Dra. Marina Carrasco Llatas
Fuente: SEORL-CCC / Euromedia grupo
"En oncología, cada avance que nos acerca a una medicina más personalizada y menos agresiva tiene un impacto directo en la calidad de vida de los pacientes. Este tipo de herramientas pueden ayudarnos a anticipar complicaciones, adaptar los tratamientos y, en última instancia, mejorar los resultados", subraya el facultativo, quien destaca también la importancia de la colaboración entre hospitales para "convertir los avances del laboratorio en beneficios reales para los pacientes".
Pérdida auditiva, inestabilidad corporal y deterioro cognitivo en personas mayores
Tradicionalmente, se ha creído que el deterioro cognitivo y las caídas en las personas mayores estaban estrechamente relacionados, como dos caras del mismo proceso de envejecimiento del cerebro. Sin embargo, un estudio entre más de 700 adultos de 55 años realizado en España sugiere que la conexión real pasa por el oído: la pérdida auditiva sería el factor común que debilita tanto el equilibrio como las capacidades mentales. En otras palabras, escuchar peor puede significar pensar y moverse peor, no porque una cosa cause la otra, sino porque ambas dependen del buen funcionamiento del sistema auditivo.
Un estudio desarrollado por especialistas de la Clínica Universidad de Navarra y presentado en el Congreso de SEORL-CCC determina que, en mayores de 55 años de edad, los que tenían pérdida auditiva no tratada tuvieron 3 veces más riesgo de inestabilidad postural y que, incluso con tratamiento, el riesgo seguía siendo evidente (de 4,1 veces más que en el grupo sin pérdida auditiva), así que se puede decir que, a mayor hipoacusia, mayor riesgo de tener inestabilidad, aunque ésta se trate.




