Redacción Farmacosalud.com
Los médicos internistas advierten que la enfermedad tromboembólica venosa es un grave problema de salud si no se diagnostica a tiempo. Una de sus manifestaciones es la embolia pulmonar (EP), que en el 7% de las gestantes es grave y suponen el 15% de las muertes maternas en los países desarrollados. Además, dado que el tratamiento necesario es la anticoagulación, pueden producirse complicaciones hemorrágicas durante el embarazo, el parto y el puerperio. Así lo ha expuesto el Dr. Francisco Galeano, facultativo del Servicio de Medicina Interna del Hospital General Universitario Gregorio Marañón (Madrid), con motivo de la presentación del consenso multisociedad de la Enfermedad Tromboembólica y el Embarazo.
“La enfermedad tromboembólica venosa es la tercera causa de muerte y la primera causa de muerte evitable en nuestros hospitales. Si partimos de esta premisa, Medicina Interna tiene un papel primordial. Los servicios de Medicina Interna tratan el mayor número de pacientes hospitalizados, pero no solo eso, muchos de estos pacientes son pluripatológicos y de edad avanzada, ambos factores de riesgo de la enfermedad tromboembólica”, informa el Dr. Miguel Martín Asenjo, coordinador del Grupo de Trabajo de Enfermedad Tromboembólica de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI).

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Implantación de equipos de Asistencia Compartida
Otros factores de riesgo de estas afecciones son el cáncer o las intervenciones quirúrgicas, por lo que la SEMI defiende la implantación de equipos de Asistencia Compartida, para que se encarguen del tratamiento de la enfermedad tromboembólica y de su profilaxis. De hecho, hoy “la inmensa mayoría de las Unidades de Enfermedad Tromboembólica de España están lideradas por médicos internistas, en colaboración con otros especialistas, consecuencia de la transversalidad de la especialidad, que permite un tratamiento integral del paciente afecto, más allá del órgano o sistema en cuestión”, explica el Dr. Martín Asenjo.
El nuevo consenso multisociedad sobre enfermedad tromboembólica venosa en el embarazo ha sido elaborado por la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) junto con la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM) y la Sociedad Española de Radiología Vascular e Intervencionista (SERVEI). Este trabajo revisa la evidencia disponible y formula conclusiones y recomendaciones sobre el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad tromboembólica venosa (ETV) durante el embarazo y puerperio, dado que ambas etapas suponen un incremento significativo del riesgo de padecer trombosis venosa profunda (TVP) y embolia pulmonar (EP).
Documento dividido en dos partes
Por la amplitud de la evidencia revisada, el nuevo documento se ha dividido en dos partes: una dedicada al diagnóstico y otra al tratamiento de la ETV en el embarazo y el puerperio. Según el Dr. Galeano, autor principal del dossier, “el embarazo y el puerperio aumentan el riesgo de padecer un episodio de ETV. La forma más frecuente durante la gestación es la TVP, mientras que la EP lo es durante el puerperio”. Añade que “la EP es una de las causas más frecuentes de mortalidad no obstétrica en los países occidentales y una importante causa de morbilidad en las pacientes gestantes. Se estima que el 30% de las TVP no tratadas migran al territorio pulmonar”.
La Medicina Interna tiene un papel central el manejo de la enfermedad tromboembólica venosa en general, dado que tiene una afectación multiorgánica y que es una patología eminentemente clínica, siendo actualmente la especialidad que con más frecuencia se encarga de su manejo en la hospitalización y las consultas. En el caso concreto de la ETV asociada a la mujer embarazada, y en vista de las circunstancias especiales relacionadas con la gestación, el manejo debe ser multidisciplinar y coordinado con otras especialidades relevantes como son la consulta de alto riesgo de Obstetricia y Hematología.




