Redacción Farmacosalud.com
La compañía de implantes auditivos MED-EL y la firma de ingeniería médica CASCINATION AG se han unido para transformar la cirugía otológica a través de dos innovaciones destacadas: OTOARM y OTODRIVE. Estas tecnologías representan un avance relevante en términos de precisión, estabilidad y control, ya que permiten a los cirujanos realizar procedimientos complejos con mayor seguridad, eficiencia y confianza, sin renunciar al criterio clínico y la destreza manual que caracterizan a la cirugía otológica.

OTOARM
Fuente: www.medel.pro / Omnicom PublicRelations Group
OTOARM: estabilidad quirúrgica con libertad de movimiento
Con un diseño ergonómico y una capacidad de ajuste perfecta, OTOARM es un sistema diseñado para hacer que el uso de los instrumentos quirúrgicos sea más simple, estable y preciso. Sus características son:
• Mayor estabilidad y máxima precisión: al tratarse de un sistema robótico, elimina el temblor de la mano del cirujano durante el uso de los instrumentos quirúrgicos. Posibilita un posicionamiento exacto de los instrumentos y llevar a cabo ajustes precisos con una sola mano.
• Diseño compacto y práctico: es ligero, se puede cargar por USB-C, y puede ser integrado sin interferencias en cualquier entorno quirúrgico.
• Campo visual libre: su estructura está diseñada para mantener despejado el campo quirúrgico.
OTODRIVE: control robótico al servicio de la cirugía otológica
Mejora el control del movimiento de los instrumentos durante la cirugía, aportando una mayor uniformidad en los procedimientos más delicados. Entre sus principales características:
• Movimiento lineal preciso: desplazamiento controlado hacia adelante y hacia atrás con total fluidez.
• Modular y eficiente: es fácil de integrar, se carga con USB-C y se adapta al flujo de trabajo habitual del quirófano.
• Operación manos libres: el pedal que lleva incorporado da la oportunidad al cirujano de mantener el foco visual y manual en el campo quirúrgico.

OTODRIVE
Fuente: www.medel.pro / Omnicom PublicRelations Group
Ventajas clínicas para cirujanos y pacientes
Para los cirujanos, las herramientas quirúrgicas OTOARM y OTODRIVE representan un avance significativo en términos de precisión y control, con un impacto directo en la calidad de los resultados auditivos que se pueden alcanzar. Estos sistemas innovadores contribuyen a reducir la carga física durante las intervenciones y aumentan la estabilidad instrumental, evitando que el pulso del facultativo, o incluso su latido cardiaco, se transmitan a la guía de electrodos durante la inserción.
Además, permiten realizar esta maniobra a velocidades extremadamente lentas, constantes y controladas, imposibles de reproducir de forma manual. Esta capacidad de inserción ultrasuave y precisa mejora notablemente la preservación de las estructuras más delicadas de la cóclea, algo esencial cuando el objetivo es conservar al máximo los restos auditivos del paciente previo a la operación.
Gracias a la estabilización milimétrica que ofrece OTOARM y al micromovimiento guiado de OTODRIVE, los profesionales pueden afrontar incluso los procedimientos más complejos con total confianza y control. Estas innovaciones permiten que el foco esté donde realmente importa: en lograr los mejores resultados posibles para cada paciente.
Desde la perspectiva del enfermo, los beneficios de estas tecnologías son igual de relevantes. Al asistir al cirujano con herramientas que mejoran la precisión y la estabilidad del procedimiento, se incrementan las probabilidades de preservar estructuras del oído interno, lo que puede favorecer una recuperación más rápida y un mantenimiento parcial de la audición residual.
Este enfoque quirúrgico menos invasivo y más controlado resulta especialmente relevante en el caso de los implantes cocleares. La asistencia robótica posibilita una inserción más suave que las técnicas manuales tradicionales, reduciendo con ello de forma considerable el trauma quirúrgico. Esto cobra especial importancia para aquellos pacientes que aún conservan audición en frecuencias graves, pero que no logran suficiente discriminación con un audífono convencional. La posibilidad de combinar la estimulación eléctrica con la acústica, preservando la audición residual, abre nuevas puertas hacia una experiencia auditiva más completa y personalizada para cada usuario.